mimos y cuidados 🪷

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La mañana llego y ni uno tenía planes de despertar, luego del primer día de celo ambos cayeron rendidos. La rutina que seguían era sencilla, satisfacer a sus lobos y luego mimarse y cuidarse mutuamente.
Jimin debía admitir lo mucho que amaba ser mimado y cuidado, durante el celo en especial.

YoonGi fue el primero en despertar, estaba desnudo al igual que su esposo quien se encontraba sobre su pecho, sonrió y beso su frente suavemente antes de recostarlo con cuidado en la cama, se guardo una risita cuando vio el cuerpo contrario lleno de marcas y sonrió satisfecho al ver el suyo de la misma forma.
Se puso ropa interior y su bata para después ir a la cocina, comenzó a cocinar algo ligero para ambos pero que saciara a sus lobos ahora dormidos.
Lo acomodo sobre una bandeja y lo llevo a la habitación dejándolo en la mesita, fue por un par de toallas húmedas y comenzó a pasarlas suavemente por el cuerpo de su marido limpiando el líquido ligeramente seco entre sus piernas, durante la ducha se encargaría de limpiar más a fondo, sus labios dejaban cálidos besos mientras se aseguraba de no despertar al menor, cuando estuvo limpio, fue por ropa interior y una camisa que le pertenecía para vestir al rubio quien comenzaba a despertar.

-Amor...

Llamo el Omega con voz ligeramente ronca debido al desgaste de su garganta por el día anterior, el mayor se acercó y depósito suaves besos en su mejilla

-Aquí estoy...¿Qué pasa?

Jimin sonrió y se acercó más, besándole con tranquilidad, sentía su cuerpo menos pegajoso.

-Tengo hambre, amor...

Abulto sus labios viendo al alfa quien asintió y se separó suavemente

-Traje el desayuno, siéntate para que puedas comer cielo...

Hablo con suavidad, el Omega lo obedeció y le pasó la bandeja con el desayuno correspondiente, ambos comieron disfrutaron con tranquilidad el desayuno.
Al terminar, YoonGi se encargó de limpiar y guardar todo mientras Jimin se aseguraba de preparar la bañera para disfrutar un baño relajante entre los dos.
Poco después, la pareja se encontraba sumergida en el agua. El alfa estaba sentado mientras el rubio estaba entre sus piernas de espaldas sintiendo los labios de su esposo besarle la marca una y otra vez con cariño.

-Vas a despertar a mi lobo~

Advirtió el más bajo mientras le daba total acceso íntima y sensible zona, el pelinegro soltó una risita mientras se acercaba a su rostro

-No tengo problemas con eso...el mío está por hacerlo también ~

Murmuró con voz juguetona, luego de ese intercambio de palabras ambos mantuvieron un cómodo silencio mientras YoonGi se encargaba de duchar a su Omega quien tenía los ojos cerrados y mantenía una suave sonrisa por cada atención recibida.
Luego de finalizar la limpieza del más bajo este mismo se encargó de limpiar a su esposo quien lo miraba con cariño, ambos salieron tiempo después de la ducha yendo a la habitación.

-Umh...Te dije que lo ibas a despertar Min~

El Omega menciono en una especie de gemido mientras comenzaba a quitar la toalla que cubría su cuerpo, se recargó contra la pared alzando sus caderas

-Mira lo mojado que estoy...

Llevo sus manos a sus nalgas y abrió estas dejando resbalar de su entrada hasta sus muslos aquel lubricante viscoso, las feromonas inundaron el lugar y a YoonGi quien veía todo con su lobo atento y su amigo de abajo también.
No tardó en acercarse y tomar la cadera de su marido quien gimió de gusto, en ambos resplandeció aquel característico color en sus ojos dándole la bienvenida a sus lobos. El alfa apenas alineó su miembro no dudo en entrar, el rubio aún seguía preparado por la noche anterior por lo que deslizarse en su interior no fue problema. Ambos gimieron ante la sensación, Jimin sintió como su esposo salía por lo que se quejo volteando apenas para ver sobre su hombro a YoonGi masturbarse con la vista de su mojada entrada la cual se apretaba contra nada, deseando ser llenado de nuevo, llevo su mano al pene de su alfa y lo alineó empujando hacia atrás metiéndolo entero, se reincorporo llevando su mano al cuello del mayor para sostenerse y pegando su espalda al pecho de su marido sintiendo a la perfección cada centímetro, YoonGi estaba encantado con esto, veía el pequeño bulto asomarse en el vientre de su Omega a causa de lo profundo que había llegado.

Apenas segundos después comenzó a moverse sin piedad alguna, rompiendo aquel pomposo trasero. La necesidad y el deseo recorría el cuerpo de ambos amantes deseando más del otro sin ser saciados por nada, Jimin era un delicioso mar de gemidos y gruñidos al igual que el contrario. De un momento a otro el alfa tomo de las piernas al rubio, alzandolo y abriéndolo al mismo tiempo empujando hacia arriba sus caderas para follarselo a su propio gusto y ritmo. El choque de pieles recorría la habitación haciendo un rico eco acompañado de húmedos y obscenos sonidos que se creaban gracias al lubricante del menor, el cual chillaba maravillado cada vez que aquel gran pedazo de carne golpeaba su punto máximo de placer una y otra vez, su propia polla rebotaba contra su abdomen a punto de explotar por su orgasmo el cual no tardó en llegar.

-¡Alfa! ¡Amormmmgh! me v-vengo~

Grito desesperado motivando al mayor que le gemía al oído, las embestidas aumentaron sintiendo como el miembro de su alfa comenzaba a hacerse más ancho de la base, listo para anudarlo. Su orgasmo lo sacudió con fuerza, temblando bajo el cuerpo del pelinegro, manchando su propio abdomen. Trato de calmar su respiración pero YoonGi ya se lo estaba cogiendo de nuevo en busca de su propia liberación la cual llegó casi de inmediato, el líquido lleno el interior del rubio mientras el nudo de expandia evitando que saliera una gota del caliente semen y su propio lubricante.

-Justo así amor...tenlo todo dentro ¿Sí?~

Susurro YoonGi, el más bajo solo asintió con sumisión.
El alfa lo abrazo con más cuidado y lo llevo a la cama encontrando una cómoda posición mientras bajaba el nudo.

Así paso el tiempo, el mayor se encargó de mimar y besar el cuerpo de su esposo mientras le susurraba cuánto lo amaba y lo mucho que era feliz a su lado y era correspondido con suaves besos y frases que correspondían sus sentimientos. Volvieron a la ducha y luego el Omega se encargó de alimentarlos preparando el platillo favorito de su marido. Luego de comer, tuvieron un par de rondas más, desahogando a sus necesitados lobos hasta que la noche cayó, ambos cansados y limpios gracias a una tercer ducha, se acurrucaron entre las sábanas recién cambiadas y limpias.

-Umm....no siento mis piernas...ni las caderas

Susurro el Omega entre el silencio de la noche, escucho la suave risa del contrario

-lo siento cielo... mañana puedo hacerte un masaje ¿Sí?

Menciono también en voz baja el mayor quien mantenía sus manos de forma posesiva sobre el más bajo.

-Bien... aunque no va a servir de mucho...mañana también te voy a querer todo el día follandome.

Dijo coqueto, pasando su pierna sobre la cadera del alfa quien bajo su mano para comenzar a acariciarla deslizando hasta su trasero y dándole una palmada que causó un pequeño gemido al rubio

-No es necesario que me lo digas amor...con ver lo mojado que te pones sé lo necesitado que estás de mí.

Ambos se sonrieron y besaron con pasión y dulzura.

-Te amo Yoonie...Descansa.

-Y yo a ti, Cielo ....

Fueron abrazados por el sueño cayendo agotados luego de tan movido día, el celo era algo muy importante y sin duda compartirlo con quién amas era más que perfecto. Los mimos y cuidados son indispensables y este matrimonio sabe muy bien como cumplir con este requisito




-Sol.

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⏰ Última actualización: Jun 07 ⏰

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Sweet Husband • YoonMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora