~°Atado a mi°~

05

-...- Alastor se quedo en silencio, solo viendo a lucifer, para después retroceder y sentarse en la cama de la habitación, sujetando su cabeza.

Estaba mareado.

-¿Por que...?- Se preguntó más a si mismo, viendo al piso, sin duda, tenía más ganas de vomitar qué antes, pero intentaba mantenerse.

-Lo siento.- No lo sentía, no se arrepentía, pero no sabía cómo actuar viendo a Alastor apunto de pasar por una crisis.

-...- No sabía que decir, tenía todo revuelto, era muy tarde como para ir con Rosie, y más con el dolor de cabeza que empezó a manifestarse.

-¿Alastor...?- Se acercó a él, intentando poner su brazo sobre su hombro pero solo sintió como el nombrado se apartó, levantándose tambaleante, con una mano en la boca.

Oh, tiene náuseas.

Vio como se tambaleaba hacia el baño, sin dirigirle la mirada.

Después de escuchar las típicas arcadas, camino a paso lento hacia el baño.

Le sujeto el cabello, como ya era costumbre, mientras que Alastor intentaba no seguir vomitando.

Una vez se calmo todo, el pelirrojo quito la mano de lucifer de su cabeza de un manotazo.

Se sujetaba el estómago, le dolía, esto era por lo mucho que había estado vomitando estas últimas horas, sabía que después de un rato empezaría la hambre.

Cuando sintió de nuevo la mano de lucifer sobre su hombro se volvió a apartar, soltando un gruñido.

No tenía energías para discutir verbalmente, pero no quería a lucifer cerca, por lo que hizo un esfuerzo.

-Vete.-

-Al... No te puedo dejar así.-

-Te recuerdo que eres el causante. Vete.-

-Alastor, no me voy a ir.-

-Vete.- Alastor repitió, con un tono de voz más elevado.

-No.-

Sintió como unos tentáculos aparecieron debajo de el, sacándolo del baño y cerrando.

Suspiro para con sencillez volver a meterse al cuarto, volviéndose una lombriz y luego una serpiente.

-¿Por que no me puedes dejar tranquilo?- Juraría que Alastor no lo había escuchado, pero claramente estaba equivocado.

-Lo siento Al, pero no te puedo dejar así.- Hablo volviendo a su forma normal.

Escucho una risa, no era divertida, era más sarcástica. Alastor estaba frustrado.

-Ja, te recuerdo que TU me dejaste "así".-

-Lo siento.-

-No lo sientes.- Lucifer no contrataco, de igual forma era verdad. -¿Por que?-

-¿Mmm?-

-¿por que no simplemente confiaste en mi?- Alastor se quedo callado un momento, respirando intentando calmar la ira que empezaba a circular por todo su cuerpo. - ¿Por que no simplemente me hablaste? ¿Me dijiste lo que sentías?-

-Al...-

-Si te sentías inseguro por que te fuera a dejar. ¿Por que no hablaste? ¿Tu solución era provocarme esto?-
Lucifer se estaba empezando a sentir aún mas culpable, le sorprendió que Alastor supiera describir todo tan bien.

-¿Te diste.- Alastor lo interrumpio.

-¿Que si me di cuenta? Es obvio lucifer.- Alastor puso sus manos sobre su frente. -¿De donde mierda sacaste que embarazarme era buena idea?-