𝘔𝘋𝘌

Enamorada

Sus ojos de un color miel claro, brillan como dos estrellas en la noche, atrapando mi mirada llevandome a un universo desconocido.

Y su sonrisa ilumina mi mundo con su brillo.
Su voz, suave como un susurro que acaricia mi alma.
Pero sobre todo, me da paz.

El me da paz, con el me siento en calma.

Nos seguimos mirando a los ojos con unas sonrisas que se extienden en nuestros labios.

¿Cuanto tiempo llevamos así? La verdad es que no lo se, el tiempo parece distinto en su mirada.

El acaricia mi cabello, sentí la suavidad de sus dedos recorriendo cada hebra, lo llevo naturalmente, sin alisar, dijo que le gustaba más así y senti que mi corazón dio un brinco de alegría porque ningun novio me había dicho eso antes.

Pero es que ningún novio es como Zachary, ningún chico lo es, el es diferente, es perfecto, me trata como siempre quise ser tratada.

Todo de el me hace sentir especial:

Zachary, a veces siento miedo de que todo esto sea demasiado bueno para ser verdad. ¿Crees que realmente merezco toda esta felicidad?

Le pregunte un día.
El respondio:

"Camelia, escucha atentamente. Tú eres mi mayor tesoro, y cada momento a tu lado es como un sueño hecho realidad. No hay duda en mi corazón de que mereces toda la felicidad que te brindo, y mucho más. Eres mi luz, mi inspiración, y no puedo imaginar mi vida sin ti."

Siempre pensé que una relación no funcionaria si mi pareja viajaba mucho. El me ha demostrado lo contrario.

El me ha probado que no es así, cuando sale me llama siempre y cuando no tiene acceso a red me envía cartas demasiado románticas como para compartirlas.

Amo todo de el y siento que el también ama cada parte de mi, adoro la forma en que me mira como si fuera lo más importante y como me sonríe como si yo fuera la causante de cada una de sus sonrisas, como siempre se interesa por saber donde estoy y adoro cuando me llama "Camelia" y cuando dice que soy suya, adoro cada vez que hablamos de un futuro porque con el si puedo hacerlo.

Siento que es mi lugar seguro.