｡✧ 🎀 𝒫𝒶𝓈𝓉𝑒𝓁𝑒𝓈 𝓎 𝒞𝒽𝒾𝒸𝓁𝑒𝓈 🎀 ✧｡

Es mucho pedir?

La rubia camino por las calles viejas y peligrosas de la Retropolis, no era nada nuevo para ella, esas sucias calles llenas de ratas dónde conocio a Rico, y ahí fue, entre la suciedad, donde se animó a hablarle a Bibi.

Caminaba con la delicadeza que la caracterizaba, era como una princesa que salía de su castillo y descendía al sucio mundo plebeyo, pero que aún fuera sucio, ella lo amaba, amaba ver el paraíso lleno de basura para regodearse de su pulcritud.

Pero esto ya no podía ser, ya no podría burlarse más, por qué su cara estaba sucia como la de una plebeya cualquiera.

No levantaba la cara del suelo y su vista solo veía la basura que ahora sentía que formaba parte de ella. Con su mano arranco el parche que tenía en su mejilla dejando ver que debajo de este no había nada. Lo tiró en una de las cesta de basura, y siguió caminado.

Levanto un poco su vista y vio el local, el local que había visto varias veces pero no sé habia molestado en entrar. Tal vez porque tenía una gran calavera con cuernos en la entrada, esa fue un buena razón para ella.

Entro por aquella puerta de vidrio arrastrando su vista como lo hacía con la punta de su paraguas en el piso y se sentó en una de las sillas del mostrador. No demoro mucho en ser atendida.

-Buenas tardes, Piper, en qué puedo ayudarte-.

Piper levanto su vista por completo al ver que al parecer el tendero la conocía, pues este era alguien que habia visto ya muchas veces tanto en los modos de juego o en la ciudad. Era Bull.

🍰- Oh, este es tu local?-.

🐂- Eh... Si? No estuviste aquí el día de la apertura? Recuerdo verte por aquí-.

Piper recordó, parece que el sumergirse tanto en sus mismos pensamientos, la hizo alejarse muy lejos de sus recuerdos.

🍰- Oh si, disculpa, no lo recordaba- Dio una risa culpable y dió una mirada al menu- Pedire una malteada de chocolate, gracias-.

Bull se alejo y se fue directo a la cocina.

🍰- Supongo que me quedaré aquí un rato-.

...

Un sofa completamente húmedo y notablemente hundido dejaba la figura de la pequeña chica que hace poco estaba acostada en posición fetal.

La Pelinegra tenía una vista visiblemente perdida mirando su imagen en el espejo, veía el cómo ni tantas de sus lágrimas pudieron limpiar su propia sangre de su cara, bajo su mirada y vio su mano destrozada. Con rabia, lanzo un golpe contra el espejo.

Con su mano llena de trozos de cristal, retrocedió por el dolor y se recostó contra la pared detrás de ella rompiendo en llanto de nuevo, cayendo lentamente hacia el frío suelo de su baño.

Sus lágrimas recorrieron todas sus mejillas, hasta que finalmente caen para aterrizar en sus piernas. Sus lágrimas, estaban calientes como una flama de soplete.

⚾- ¿!POR QUÉ, POR QUÉ¡? ¿POR QUE A MI?, MIERDA, ¿POR QUE? ¿POR QUE? ¿POR QUE? ¿POR QUE?-.

Golpeaba el suelo con fuerza.

La sangre empezó a salpicar por todo el lugar.

⚾- E-era mucho pedir q-que alguien t-tuviera el tiempo p-para conocerme?-.

Su voz quebrada reboto por toda las paredes del baño.

No hubo respuesta.

Estaba sola, sola contra el dolor de su alma.

...

Dio un largo sorbo a su malteada.

🍰- (Está bastante buena, supongo que estaba juzgando mal, este sitio por fuera parece un bar de mala muerte)-.