Nosotros - [ Chrome ] -

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—— El ramen atrajo a un mentalista ——

Todo nuestro esfuerzo había dado frutos, teníamos ramen...

— Entonces... solo queda probar, ¿Verdad? — Dije algo emocionada al ver el ramen de mijo terminado.

Senku me miro — Sí — Empezó a servir el ramen a los presentes los cuales miraban el platillo con asombro.

La rubia tomo el plato — Pero esto sigue siendo mijo, ¿No? — Dijo con extrañeza Kohaku viendo el platillo.

Chrome solo le dio una pequeña mirada a la rubia — ¡Voy a verificar que esto sea seguro!, ¡El deber de un hechicero es nunca temerle a algo nuevo! — El castaño se apresuro a probar — ¡Esta bueno! — Grito mientras seguía comiendo.

Rápidamente los de la era de piedra se apresuraron a probar el ramen y le dieron  la razón al castaño "estaba rico".

"Supongo que también lo comeré", pensé antes de aventurarme a probar también, no era para nada rico, la textura me daba algo de asco, dejaba un feo sabor en la boca, para nada se le compara al ramen de la era moderna.

Mire a Senku que ya lo había probado — ¿Te gusto? — Le susurre en el oído después de ver qué el también lo probó.

Senku me miro y negó con la cabeza, a lo que yo solté una risa por lo bajo — No sabe igual que en el mundo moderno pero para ellos es como un manjar de los dioses — Vio a Chrome, Kohaku y Suika quienes comían como si fuera lo más rico del mundo.

También comencé a ver a los chicos — ¡Bueno tienes razón! — Sonríe discretamente, al ver a los de la era de piedra me dio algo de ternura por así decirlo.

En un carrito llevamos el ramen a la aldea, muchas personas se acercaron para ver qué era lo que olía tan bien, algunas se animaron a probar sin saber el arduo trabajo que le esperaba, empezamos a dar ramen a la gente que se acercara y ellos parecían amarlo.

Se acercó una chica por un plato más ramen — ¿Tú eres el que hizo esto tan sabroso?, ¿Te llamas Senku?, ¿Cómo te gustan las chicas? — Lo abordo con preguntas una chica de coletas y pelo negro.

Senku no pensó dos veces en lo que diría — Me gustan las chicas que pueden bombear mucho oxígeno en el horno —Soltó con claras intención no románticas.

Kohaku y yo mirábamos la escena — ¡Que sinceró!, Senku, ¿De verdad eres incapaz de hacer una charla casual?, das lástima — Comento la rubia.

— ¡Pobre chica!, Senku jamás tendría sentimientos románticos hacia una persona — Dije mirando como la chica se iba — Senku es la persona más asexual que conozco — Comente con algo de burla ya que sabía bien que Senku no era asexual pero parecía.

Chrome se acercó a Kinro y Ginro quienes solo estaban viendo y haciendo su labor de guardias de la aldea — ¡Oigan, Kinro, Ginro!, tienen que probar esto, ¡Este ramen es bien malote! — Dijo Chrome mientras les ofrecía los dos platos de ramen a los guardias.

— No consumiremos esa sospechosa comida de hechicero — Exclamó Kinro deteniendo a Ginro de agarrar su plato de ramen — Y es absurdo que los guardias acepten este tipo de regalos — Su tono de voz era firme, se comenzó a cruzar de brazos — Esas son las reglas — Finalizo el guardia.

Chrome lo miró — ¿Así entonces, que es eso?, no recibes comida pero aceptas una lanza dorada — Comento con un tono de ironía, a lo que Kinro solo desvío la mirada algo indignado.