Lluvia

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Que bonito fue compartir una copa de vino tinto al llegar a casa después de la rutina, acariciar tu gato pinto mientras preparas un manjar de quesadillas. En algún punto de mi vida fuiste lo que más quise, mi hangar de pasiones, la ruleta rusa de emociones, mi canción más larga y triste. Hace unos meses terminó el amor, si, ese amor cansado e indudablemente resistente, terminó. Sendero largo y seco desde esa fecha, así lo describiría, a pesar de eso lo seguiré recorriendo con tal que al fin sonrías. No importando seas el cielo de alguien más, o conozcas ya un nuevo o quizá favorito mar, aquí seguiré escondido tras mis notas y un coñac. Así arda mi cama, me conformo que leas esto en algún momento, en cualquier lugar. Recuerdes que prometimos ser felices sin odio, sin rencor, sin pasado, ni presente, sin principio y sin final.

Soledad, nunca te abandonaría...Where stories live. Discover now