Capitulo 3: Remembranza (2/2).

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No podía creerlo, estaba perplejo frente al acto violento con el que me encontraba justo a unos metros de mí, al igual que el chef, que viendo la escena daba unos pequeños pasos atrás, con el rostro totalmente repleto de miedo, pálido y con la boca abierta de la sorpresa llevada, impresionado de lo que veía con sus propios ojos, ni en su peor pesadilla pudo haber imaginado algo como esto. No puede ser... El cuerpo de Tom, el mesero, estaba tirado en el suelo boca arriba, mientras que el señor por quien él iba estaba arrodillado y encorvado alimentándose de lo que quedaba de la mitad del rostro del mesonero, dejando caer sus manos, que tenía en la cara del caníbal, intentando empujarlo en el suelo, ya sin remedio alguno, Tom acababa de morir, sus ojos quedaron congelados en el chef, con una expresión fría, indolora.

Lo mordía de forma desesperada, apresurado, con sus fuertes mordidas le arrancaba la piel mientras que con sus manos le presionaba la cabeza hacia el suelo para poder arrancar la mayor carne posible, se veían los músculos rosados en el interior del mesero, chorros de sangre salpicaban por todo el piso, comenzando a hacer un charco que cubría el otro lado de su rostro, se escuchaba como el señor se ahogaba de los trozos de carne que se metía en la boca, y como lo intentaba tragar de la forma más rápida para seguir comiendo de él, trozos de carne que no cabían ya en su boca caían de sus dientes, le había arranchado tanto parte del cuello como del rostro.

La cara manchada de sangre, al igual que su traje formal, con el cabello despeinado echado hacia delante no dejaba ver bien su rostro. Un escalofrió recorrió mi cuerpo, seguido de un profundo asco, unas nauseas casi irresistibles, lo evitaba a medias, sentía el exceso de saliva en mi boca y trataba impedir vomitar, volvía a sudar frío, a comenzar a temblar del miedo, no sentí nada de adrenalina, solo terror, estaba pasmado, no podía moverme, y sin asimilar lo que aun sucedía en frente de mí, una persona estaba comiendo de otra, ¡le está arrancando la piel y se la está tragando cuando hace tan solo unos minutos los dos se encontraban bien!

No podía evitarlo, recuerdos de aquella vez volvieron a mi mente, fue como una pequeña chispa que duró milisegundos.

Mientras ese característico olor a sangre, como el hierro, inundaba el baño, estilo centro comercial, pero en proporciones mínimas, la puerta vaivén volvió a sonar a mis espaldas, ni siquiera me volteé para ver quién era, yo seguía observando tal cosa, sabiendo al fin lo que había estado sucediendo desde antes, tal escena me lo reveló, el porque la ciudad había estado tan extraña, con que se enfrentaba la policía y a que se referían los civiles, y sobre todo, sabía que el señor que se encontraba en frente de mi ya no era una persona, ahora era solo un monstruo. Sentí un apretón fuerte en mi brazo con un intento de halarme desde atrás, me alarmé y rápidamente reaccioné volteándome y empujando la mano. Era la chica, que me miraba de una forma rara, una expresión no común de ver, y me apresuraba jalándome para sacarme del baño, me fijé, y el chef que estaba hace unos segundos a mi lado ya había salido, seguí girando el cuello y miré nuevamente la escena sangrienta.

El cuerpo de aquel muerto viviente es encontraba levantado, pude ver bien su rostro, sus ojos estaban clavados en mi, exactamente igual a como lo recordaba, los dientes chirriaban lentamente, el gesto lleno de ira y rabia, comenzaba a dar algunos pasos para ir ahora a por mi, caminando sobre el cuerpo de su irreconocible presa. Por un instante me congelé, fue todo tan rápido que me paralicé y no pude reaccionar, él ya estaba tan cerca de mí, se siente tan impactante que un muerto este caminando hacia ti de la forma como él lo hacía, estaba abismado viéndolo, me hacia sentir tan indefenso. -¡Corre!- gritó la chica con toda su voz, desafinando, mientras que con sus dos manos me presionaba el brazo, enterrándome un poco sus uñas mientras me halaba hacia la puerta. Volví en mi, me terminé de voltear y corrí junto a ella, sentía como si él ya estuviese encima de mí, una sensación terrible, escuchaba sus pasos acelerando, la adrenalina fluía.

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⏰ Última actualización: Jul 25, 2016 ⏰

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