Capítulo 16: Edimburgo

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(tn)

Tristán había logrado derrotar al responsable de aquella maldición que recibió mamá; me sentía orgulla por él y agradecida con Lancelot por ayudarlo a no contener ese poder demoníaco y cuidar de mi hermano

Tal parece que no me equivoqué en pedirle ayuda en cuanto me enteré de lo que sucedió con mi mamá a través de aquel sueño borroso que tuve

Admito que me hubiera gustado haberlos acompañarlos y pelear a su lado pero mi Deidad no me lo permitió, aún no era el momento adecuado para dar mi aparición, por lo que ella mencionó, esto podría haber ocasionado un grave problema si el rey de Camelot logrará saber de mi

No me había quedado otra opción más que intervenir mediante el uso total de mi poder y una técnica demasiado complicada que mi Deidad me enseñó: "intervención mental", está técnica se caracteriza por la comunicación mental o telepatíca hacia esa persona con la que su deseará comunicar, aunque el uso de esta técnica es algo riesgoso ya que ocupa una gran parte de poder debido a que también permite observar el entorno de esa persona deseada

Volviendo a lo sucedido, pude observar que todo había salido muy bien, mi hermano y Lancelot derrotaron a ese patán y veía como todos abandonaban aquel lugar, todos menos Lancelot

¿Porque no va con ellos?, me preguntaba

Lancelot

Veía como mi padre y los demás se alejaban de ese castillo en ruinas, todos se iban hacia una sola dirección, posiblemente a sus respectivos destinos y felices por la reina Elizabeth, en cambio yo, me quedaba observandolos desde lejos para tomar mi propio camino, sabiendo perfectamente que no era digno de ir con mi padre, no aún

Por alguna razón me habia alegrado al haber concluido esta misión, la voz que apareció en mi mente fue quién me la encomendó como favor

Eso fue muy extraño, recuerdo que fue una voz femenina muy dulce, podría jurar que se trataba de ella aunque el poder que se presenciaba a través de esa voz era demasiado poderosa

—¿A caso fuiste tu quién hizo esto?— Cuestioné susurrando

Esperaba volver a oír su voz en mi mente pero al parecer no pasó nada

—Qué idiota soy— Me dije a mismo

—Claro que no lo eres, por cierto ¿Cómo lograste saber que era yo?— Expresó esa voz en mi mente

Me sorprendí al oírla, aunque no entendía la manera en ella se podía comunicar conmigo por medio de telepatía

–Podría reconocerte tan fácil, después de todo tengo un vínculo muy cercano contigo— Respondí

—Muchas gracias por haberme ayudado, disculpa si solo puedo comunicarme contigo de esta forma– Mencionó

—No fue nada, me alegra que saliera todo bien con mi tía...—Respondí — Oye, ¿puedo preguntarte algo?

—Claro, no me queda mucho tiempo para seguir hablando contigo así que apresurate

—¿Te volveré a ver algún día?— Cuestioné

—Sólo el tiempo lo decidirá, por lo pronto te pido que te cuides y tengas una cercanía hacia mi padre, adiós Lance— Dijo finalmente

—¡Oye! ¡(tn) no te vallas aun! ¡Necesito decirte algo!— Expresaba entre gritos pero ella ya no respondió

Narradora

(tn) había caído al suelo después de haber concluido el uso de aquella técnica, la cual había robado todas sus energías

—Mi Deidad, ¿Se encuentra bien?— Cuestionaba Matilde preocupada mientras la sostenía del brazo

—S-si, me siento de maravilla— Respondió con lagrimas en los ojos y una sonrisa en su rostro— Matilde, Lancelot esta bien, logré hablar con el ¡Logré hablar con el! — Expresaba con inmensa alegría

—Me alegra mucho oír eso mi niña, pero creo que será mejor que valla a descansar un rato—Respondía su fiel nana quien la ayudaba a caminar hacia su cama

(tn) se recostó sobre su cama dejando caer por completo su cuerpo y quedando completamente dormida con una sonrisa en el rostro, no hacia falta describir la razón de ello o más bien, la persona que ocasionó esa reacción

Mientras tanto, con la familia Liones que se encontraba en camino hacia su respectivo reino iba surgiendo una peculiar conversación

—Dime Tristán, ¿Qué te hizo ir tú solo a combatir a ese villano? —Custionaba Elisabeth

—Bueno mamita, fue algo extraño, era como si mi hermana me lo ordenará— Respondió mientras se rascaba la nuca algo nervioso

—¿Tu hermana?— Cuestionaba Meliodas confundido

—Si papito, juraría que oí su voz en mi cabeza esta mañana que sucedió todo, por eso tuve el valor de ir— Respondió finalmente

—Con que ella fue eh...– Murmuró Meliodas por último

Siempre fuiste tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora