Felix lleva cinco años de casado con su esposo Jungkook pero el sentia que su matrimonio jamas fue verdadero ya que es como si estuviera casado con un completo desconocido. Aburrido de la misma rutina decide buscar algo para divertirse, y esa divers...
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La mañana había llegado, su cuerpo se sentía pesado y sus ojos estaban hinchados por recién despertarse. Abrió sus ojos cuando sintió una luz molestarlo, desorientado miró a su al rededor hasta que recordó lo que pasó el día anterior.
Miró a su lado y estaba vacío, un deja vú paso por su mente al recordar la primera noche que tuvo junto a Hyunjin. Se sentó en la cama haciendo una mueca por el dolor leve que sintió en su cadera, aún así se puso de pie y busco su ropa para vestirse. Cuando lo hizo fue al baño para arreglarse y después de unos minutos salió para caminar hasta el comedor de la casa donde pudo observar a Hyunjin a un lado de la mesa hablando por teléfono.
—No... Estoy al tanto de eso pero no estoy dispuesto a arriesgarme. He dicho que no...— Hyunjin observó a Felix acercarse. —Bangchan solo resuelve esto.— Sin decir nada más colgó la llamada. —Hey, buenos días.
Felix le sonrió y Hyunjin se acercó para darle un beso en la frente. —¿Dormiste bien?
—Si, no estabas a mi lado...— comentó con una sonrisa. —¿deveria acostumbrarme a no despertar a tu lado?— preguntó divertido.
Hyunjin rio y negó.
—Lo siento, quise hacerte el desayuno antes de ir a dejarte a tu casa.— dijo señalando la mesa donde llacian dos platos con carne y verdura a la plancha. —Espero te guste, no soy buen cocinero pero hasta ahora he sobrevivido.
—Tranquilo, se ve rico.— se sentó en una de las sillas y admiro la comida con una sonrisa. Era un detalle muy lindo de parte de Hyunjin. —Ven, comamos.— Señaló la silla a su lado.
Hyunjin no se hizo esperar y se sentó a su lado con una sonrisa. Ambos tomaron los palillos y empezaron a comer mientras platicaba de cualquier cosa no faltando las risas y asombro por parte de los dos. Realmente estaban pasando un tiempo juntos muy divertidos que ni cuenta se dieron de la hora hasta que el teléfono de Felix que estaba en uno d ellos sillones de la sala interrumpió su platica.
El dueño de teléfono se puso de pie y corrió a contestar la llamada pero fue demasiado tarde ya que colgaron. Pudo observar el nombre del remitente y mordió su labio al ver que se trataba de su esposo, aun no le había dicho a Hyunjin que estaba casado.
—¿Estas bien?— Le preguntó Hyunjin desde el comedor. —¿Necesitas irte ya? Si es así puedo ir a dejarte.
—No te preocupes, de seguro tu tienes que ir a trabajar así que iré yo solo a casa.— dijo rápidamente tratando de negar la propuesta por Hyunjin.
—Me sentiría mucho mejor si veo que llegas sano a casa, en serio para mi no hay ningún problema.— Dijo poniéndose de pie y acercándose.
Felix lo espero para abrazarlo por el cuello y acercarse a besar sus labios. —En serio estoy bien.— dijo al separarse.
—Esta bien.— paso sus manos por la cintura de Felix y le devolvió el beso esta vez más profundo y lento. —¿te veré otra vez?
—Amh...— mordió su labio pensando si sería buena idea. —.. S-si.
