Un silencio incómodo reinaba en la sala, los líderes estaban muy nerviosos por la presencia del pelirrojo y más al saber que volvió como un rey.
Los más impactados eran Michael y Azazel, quienes querían salir corriendo, el miedo primitivo los dominaba, representándose en un abrazo de hermanos.
¿Por qué están tan asustados...? - preguntó Sirchez con confusión.
Ya entendí el por qué... - dijo Odín. - Tengo entendido que su guerra entre facciones fue dada por mucho tiempo en distintos lugares.
Cómo Maou si he estudiado eso, los conflictos se llevaron a cabo en distintos puntos y uno estaba en un lugar del Océano Pacífico. - dijo Sirchez.
Pero más allá de eso...había unas nubes que cubrían el lugar por completo. Se pensó por un tiempo que era alguna especie de anomalía climático, pero resultó ser una barrera para el reino. - termino de decir Azazel, sorprendiendo a los demás.
Y por nuestras disputas junto con Lucifer, Aiur se unió a la guerra, más que nada porque lo estábamos luchando cerca de sus tierras. - dijo Michael. - No comprendimos al inicio e incluso unimos fuerzas porque ellos disponían de un poderoso dragón y padre trato de sellarlo. Admito que fue un error por parte de nosotros pero...
De hecho fue bastante egoísta porque querían tener a ese dragón dentro de alguien de sus filas, solo que no esperábamos que Ddraig y Albion tuvieran su pelea en medio de todo y también.... Se robaron su poder y claro, nunca más se supo de él... hasta ahora. - Lo que dijo Kenichi hizo que Michael bajara la cabeza mientras que Azazel sudaba.
Aiur no tuvo nada que ver en su maldita guerra, nosotros actuamos, porque su guerra amenazaba en dañar mi hogar y el gran rey Yamoshi junto con Bahamut, junto con un número de valientes guerreros, alejaron lo suficiente a las facciones. - Kenichi afiló la mirada. - Hasta que Ddraig y Albion metieron sus malditas garras para joder mi nación y claro, ni se molestaron en averiguar, se excusaron con "el dragón amenaza a los nuestros" y fueron a sellarlo.
Chico, lamentamos lo que sucedió con tu hogar hace años, pero no hay que vivir en el rencor. - dijo Azazel como si nada pero Kenichi da un paso y el suelo se agrieta, cuando al caído.
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Esa actitud de jefe vago, me dan ganas de arreglarla a puñetazos. - Mencionó Kenichi con la furia a punto de salir, asustando a Azazel. - Te recuerdo que no solo fuiste culpable al igual que Michael con atentar la vida en mi hogar, también dejaste que los ángeles caídos renegados anden en el territorio de la demonio Gremory como Pedro por su casa, matando a varios inocentes.
Ahí si te cagaron, Azazel. - dijo Odín con sinceridad.
Kenichi-kun, nosotros queríamos.... - Sirchez fue interrumpido.
