Cap 1

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🌺Antes de empezar quiero decirles que está historia será un Omegaverse (Si no te gusta este tipo de historias con Omegaverse, chao)

🌺Relación de hombre con hombre, si no les gusta no lo lean y listo :)

🌺No soy buena escribiendo historias, hago esto más como un juego para mí que para los demás así que...;)

🌺La historia no sé si será larga o corta, eso será dependiendo de la imaginación que me entre (no tengo tanta)

🌺Los que vean la historia espero que la disfruten mucho, esto lo hago desde el fondo de mi hermoso pero también esquizofrenico corazón que ama este tipo de historias.

🌺Si no les gusta realmente espero que no lo lean, no soy buena redactando ni narrando, haré lo que pueda y espero que a algunos al menos les guste algo, no sé...

🌺No soy nada buena, así que lo primero que me salga pondré xd. Nunca he escribido algo así, ni sé escribir en primer lugar así que...nee

Ahora sí, empecemos, con esta rara, linda y loca historia que ni yo sabía que haría!

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Era una noche en la Cuidad de Bogotá, todo se sentía en un ambiente muy cálido, Armando Mendoza estaba trabajando cómodamente desde su oficina. Tenía pensado ya irse a su casa a descansar. El día había Sido demaciado largo y agotador, regularmente todos los días transcurrían así pero está noche se sentía más agotado, talvez por qué era viernes y sentía el peso de toda la semana en sus hombros.

Pero finalmente ya había llegado el tan glorioso Viernes que todos anhelan, tendría dos días de descanzo para no ir a trabajar y quedarse en su casa.

Rápidamente apagó su computador y agarro su saco.

-Betty...-. la llamó y ella se aparecio con rapidez para ver qué necesitaba su jefe. -Vea, ya me voy...usted también debería ya irse a su casa. Ya es muy tarde-. Se puso su saco.

-Si Doctor, solo me faltan unas cosas y y salgo Doctor-. Se acomodo las gafas.

-Bueno, pase buena noche y buen fin de semana-. Tomó su maletín mientras salía de su oficina.

Al salir de su oficina paso a un lado de las secretarias y se despidió de ellas, luego se dirigió a la recepción del segundo Nivel y le habló a Sandra.

-Sandra, ya le dijo a Mario que se alistara para irnos?-. Miró la hora en su reloj. -Ya es tarde-. Siguió en eso.

-Si Doctor, pero él ya salió-. Se acomodo las gafas. -Yo pensé que usted ya sabía Doctor-. Tomo su bolso.

-No, yo no sabía nada-. Se extraño. -Y le dijo para donde iba? Él no se va solo así-. Frunció el ceño.

-No Doctor, me dijo que usted ya sabía y que se iba a ir-. Subió las manos en rendición.

A Armando le pareció eso tan raro. Su esposo jamás había hecho eso, siempre lo esperaba y salían juntos de la empresa. Así había sido desde los últimos 4 años. Que pasaba?

-Le ayudo en algo más Doctor?-. Pregunto tímida, mientras Armando estaba hundido en sus pensamientos.

Se mordió levemente un dedo mientras estaba pensando. -No gracias, que pasen buena noche-. Se dirigió al ascensor que estaba abierto y se fue al garage.

Una vez llegó al garage tomo su celular y llamo a Mario Calderón. Uno, dos y tres pitidos y nada. No contestaba.

Realmente se preocupó, apresuró su paso y entro a su carro. Rápidamente condujo hasta su casa que estaba a unas cuantas calles lejos de Ecomoda.

Mi Omega en embarazoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora