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Despegue mis labios de los suyos, le mire fijamente pensado en cómo me iba a explicar lo que sucedió con la exmujer y aunque nos hubiésemos besado, el daño estaba presente, pensé en miles de excusas posibles, típicas.

— Perdóname, neno, fui un idiota en todas las formas posibles.— confesó el gallego.

— ¡Fuiste un idiota! ¿Cómo pudiste hacerme eso? Si algo iba mal, haberme avisado.— le alce la voz, mientras daba golpes a su pecho de rabia.

— Lo sé, lo se Auroriña, lo del beso no es excusa, pero tengo que contarte más, mi exmujer no está aquí, porque sí, hay razones.— dijo aguantando mis golpes en su pecho, mientras me intentaba calmar porque durante el proceso no pude aguantarme las ganas de llorar.

— ¿Cuál es la razón?— pare los golpes por curiosidad, mientras mis ojos se veían llenos de lágrimas.

— Te juro que te lo quería contar, pero Andrea se adelantó a venir a Los Santos y ni te vi para poder contártelo. ¿Vamos a dar un paseo por la playa? Para poder explicarte tranquilo y sin interrupciones.— dijo.

Yo asentí. Freddy, me llevo en su coche hacia la playa donde actualmente estaba desierta, solo se veían las estrellas junto a la luna y su oscuridad, también se oían las olas, ir y venir. Los dos caminamos descalzos por la arena de aquella playa.

— Andrea, mi exmujer y yo, tuvimos un hijo, Nick, está se quedó con la custodia sin yo poder decidir, se suponía que yo 15 días o así tendría que verle, pero llevo 2 años sin verle por su culpa, no sé qué coño necesita de mí para poder ver a mi hijo, quiero volver a ver su pelo liso negro como el mío, tener sus abrazos y su presencia, que hace años no siento. Cada vez que le veo en una vieja foto que tengo, me pregunto que será de él, ¿Cómo le irá en sus estudios? ¿Ya tendrá novia? Es tan, pero tan frustrante, neno.— este explicó con lágrimas en sus mejillas.

Su corazón se rompió en dos al escuchar su situación, desconocía esa parte de su pareja, pero Aurora le perdonó todo y lo paso por alto, por él.

Hacía 4 meses que se había trasladado a Los Santos, pero no había sentido nada como en esta ciudad. En Londres todo era un puterío constante y allí no podías tener una relación estable, en cambio, en Los Santos, era todo distinto y allí era donde quería estar, donde realmente había conseguido lo que quería, una razón para luchar, Freddy.  Freddy para Aurora se había vuelto la luz de su vida, por algo en que luchar en su vida, ya que con su familia no mantenía contacto de hacía muchos años y aunque la dolía tendría que dejarlos atrás por el bien de ella.

— Cariño, perdóname, perdóname por haberme comportado así, sin saber cuál era el porqué, me siento tan culpable.— seque las lágrimas de este con mis manos, le mire fijamente a sus ojos brillosos y llorosos.

— Aurora, no te sentías así, que ibas a saber si no lo sabías. Y el beso, ella me besó. Antes de todo, había ido a buscarte a la fiesta, llevábamos tiempo sin vernos y me hacía falta tu presencia, ya que, sin ti, yo no sería capaz de mantenerme en pie. Ella me besó, estaba celosa porque estaba buscándote entre la gente, te pido perdón de nuevo, Auroriña.— me explico con detalle.

— No tienes que pedirme nada, ya hace bastante que lo habías arreglado.— le sonreí.

Este me puso sus manos en mi rostro y antes de dar el paso, me susurro.

— Te quiero mucho, Auroriñi.— me susurro.

Sin yo poder responder y con una sonrisa me beso en media de aquella noche oscura y tranquila.

Los dos nos miramos y reímos a la vez.

— ¡Píllame si puedes!— sin avisar salí corriendo por la arena.

Freddy me siguió durante unos minutos, pero después me agarró, y me subió a sus brazos como princesa, los dos estábamos con una sonrisa de mejilla a mejilla. Me acerqué a su oído y respondí a su dicho de antes.

— Yo más, Freddy.— le susurré.

Y antes de que me pudiese decir nada, le besé con mucho sentimiento.

——

Cortito pero intenso JAJAJAJA, mañana más ‼️

TRANSLADADA | Freddy TrucazoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora