cap 15

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—Liam...¿Que haces aquí?

Preguntó Marión sorprendida al ver a su novio presente en la fiesta.

¿Qué estaba haciendo él allí? ¿Como sabía que ella se encontraba en esa fiesta, si nunca se lo mencionó?

La confusión junto con el bullicio del lugar hicieron que a la chica le girara el mundo. Todo a su alrededor desapareció y sólo podía ver el rostro de Liam, el cual reflejaba total decepción.

¿Porqué le miraba así? No estaba haciendo nada malo...¿o sí?

Marión se soltó del agarre de Liam, y con valentía repitió:

—¿Qué haces aquí?

—Lo mismo te pregunto.— refutó el chico.

La castaña quedó sin palabras ante aquella respuesta. No lograba entender porque su novio estaba de tan mal humor. ¿Acaso no podía notar lo bien que la estaba pasando?

—Nos vamos.— puntualizó Liam con autoridad tomando nuevamente a su chica de la muñeca para largarse de aquel lugar.

—¿Nos vamos? ¡No!— soltó Marión saltándose del agarre con fuerza.—No me puedo ir. Yo vine con mis amigos, no esta bien que me vaya y los deje aquí.

—¿Tus amigos? ¿Dónde están tus amigos que no los veo?— preguntó Whithfield con obviedad.

Marión lo miró derrotada, y con esperanza visualizó su alrededor tratando de encontrarlos con la mirada entre la multitud de persona que bailaban, reían y se divertían así como ella hacía unos minutos atrás. Pero no los vió, y con resignación bajó la mirada otorgándole la razón al chico.

—Vámonos.

Sin rechistar tomó su mano accediendo con tranquilidad, y lo siguió hasta fuera de la casa.

Cruzaron la carretera y se extrañó al ver que Liam abría la puerta de un auto con confianza. Jamás había notado que él tuviese un vehículo, así que con un poco de intriga se metió dentro agradeciendo por el calor que este le proporcionaba.

—¿Y este auto?— pronunció con voz baja la chica.

—Lo compré hace poco.

A esto, Marión frunció las cejas confundida. Él nunca antes lo había mencionado si quiera. Pero decidió callar y relajarse por tanta tensión en un solo lugar.

El camino a casa se hacía eterno, y gracias a esto, en la cabeza de Marión se repetían muchos pensamientos a la vez. No quería creer que sus amigos la habían dejado a propósito sola en esa fiesta, aún sabiendo que era su primera vez. Por su parte estaba bastante cómoda con los nuevos amigos que había hecho, sin embargo, no podía obviar que de cierta forma alguno se le insinuaba de manera sexual.

Echó un leve vistazo al perfil del chico que conducía a su lado, y se preguntó una vez más si de verdad lo conocía. No sabía que él sabía conducir. Tampoco sabía que tenía pensado comprar un auto.

No sabía donde trabajaba o de donde sacaba dinero para comprarse cosas todos los días. No sabía nada de su familia, de su madre, hermanos o amigos. Ni de donde venía, ni el porqué de mudarse justamente a la casa de al lado. Y sobre todo, no sabia como rayos había descubierto donde y cuando saldría ella con sus amigos esa noche.

Era un enigma, uno bastante complicado de entender. Increíblemente, Liam siempre tenía coartadas perfectas para responder a cada una de esas preguntas. Haciendo que todos, incluyendo a la chica, desistieran de las dudas.

—Llegamos.—anunció Liam.

Marión suspiró cansada, a pesar que el efecto del alcohol se le había pasado un poco, todavía se sentía abrumada y con dolor de cabeza.

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⏰ Última actualización: May 28, 2024 ⏰

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