Capitulo 3

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Año 1997

Xóchitl después de esa tarde en la facultad de medicina con la mujer desconocida, siguió entrenando con Freya, la cual vio un progreso magnifico en su estudiante; parecía otra persona, dispuesta a superar sus límites.

-cual fue tu motivación pequeña flor – sonriendo la maestra a su pupila haciendo un atado tradicional japonés a una chica que estaba completamente maravillada por su delicadeza y precisión – quería hablar de algo contigo, sabes que pronto terminas de entrenar conmigo para presentarte en sociedad

La ingeniera se detuvo a la mitad de ese nudo, sabia la implicación de ser presentada como dominante, que cualquier sumisa o persona tenía que guiar e incluso ayudar en su tránsito, no sabía que procedía para su iniciación.

-lo tengo entendido, pero dijiste que sería en unos 3 meses, paso algo que deba enterarme – la hidalguense preocupada por el semblante de su maestra- me imagino que se adelantara la fecha

Freya sabía que tenía que ser honesta con Xóchitl, el cáncer que tenía era muy agresivo y su esposo la iba a trasladar a Houston Texas para el tratamiento, el cual no tendría fecha de retorno para volver a ese mundo del marques, le dolía saber que ella sería su última educando y tenía planeado algo muy especial para ella ya que tendría que adelantar esa presentación.

-será en tres semanas, quiero que pienses tu nombre de dominante, y por qué lo escogiste de esa forma – viendo a Xóchitl con una sonrisa nostálgica, tocando su cabeza como una madre amorosa – sabes que tu serás la última de mis aprendices, mi mayor orgullo como maestra

-es un honor y un placer, le agradezco sus atenciones – Gálvez se sentía como una niña que le daban una estrella al final de la clase, pero al ver las lágrimas de sus ojos de su mentora paro el juego, lo cual hizo que la chica se fuera algo molesta, pero al ver el porte de esa dominante solo salió del lugar – prometo nunca decepcionarla y caminar el camino que me enseño

-lo sé, sabes que estoy enferma verdad – soltando sus lágrimas esa mujer dura y firme, lo cual hizo que Gálvez la abrazara de forma protectora – me estoy muriendo, y Carlos cree que puede salvarme

-Freya, por el amor de dios no digas eso – sosteniendo a esa bella dama en sus brazos, acunándola como su princesa – todo saldrá bien te lo prometo

-prométeme que lo que pase en la iniciación lo harás, sin dudar y sin importar a la persona que te den vas a cumplir tu deber de dominante – viéndola a los ojos de forma firma y con convicción a aquella flor inocente y nerviosa por la mirada de esa mujer – prométeme que pase lo que pase harás la locura que tenemos planeada

-Claro que si para ambas cosas, para la segunda tu estarás para abrirlo – sonriendo dándole confianza a su mentora – te lo prometo que me moveré para hacer ese proyecto.

Saliendo de esa casa, Gálvez de lugar de ir a la empresa salió a visitar el museo de las culturas del mundo y terminando a san Ildefonso para distraer, su nombre era algo que portaría con orgullo pasando por el área de los griegos un nombre se arraigó a ella Deméter la diosa de los cultivos y la vida en la tierra, tener ese don tan maravilloso de crear vida con tus manos para ella le encanto esa idea al cruzar en su mente. Saliendo de ese museo fue a san Ildefonso y encontró una pintura de un pintor italiano Caravaggio, esa sangre y agresividad hizo que su corazón palpitara de una forma frenética de emoción, ver esa crueldad y crudeza en actos sacros lo cual lo hacía sublime de ver y disfrutar; saliendo de esa exposición fue a una cafetería pequeña en el trayecto en donceles encontró un libro dedicado a esa diosa por la universidad veracruzana, el mito y sus implicaciones, mientras le servían su café tomo unas anotaciones en el libro viejo y saco su cuadernillo y pidió una hoja blanca describiendo por qué el nombre, fue una hoja donde explicaba que buscaba en el mundo del marques, por qué la elección de ese camino de dominancia y el porqué de su nombre, dejando como firma Bertha Xóchitl Gálvez Ruiz alias Deméter Caravaggio.

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