Un joven albino se encontraba mirando a una pared blanca, recordaba pequeños fragmentos, un niño cabra y una casa con tonos morados. Un dolor agudo invadió la parte trasera de la cabeza el cual no se detuvo hasta el punto de que quería gritar por el dolor, sin embargo no quería provocar ruido, por lo que decidió tragarse el grito presionando mucho sus pulmones hasta que al momento de detener su dolor expulso el aire soltando un leve humo
-Veo que despertaste -escucho al lado de el-
-No, solo que estoy analizando el entorno antes de levantarme -respondió con un tono forzado de humor-
-Ahh, Saliste don comedia -respondió el doctor para soltar un leve bufido- bien, pasemos a tu análisis -agarrando un portapapeles- veo que tendrás varias dificultades al expresarte, tu control mágico se vera reducido -pasando la hoja- lo bueno es que no tienes problemas que pasen a mayores, se evito el derrame y no hay posibilidad de llegar a desarrollar algún tipo de enfermedad -cerrando el portapapeles-
-¿Como esta Chara?... La chica que cayo junto a mi -tratando de explicar a quien se refiere-
-Se encuentra con la familia real, tuviste suerte de que te encontró el príncipe y te detuvo la hemorragia -dándole la espalda al albino- Si no tienes más dudas me retiro, la hora de visita es dentro de un rato -apunto de salir-
-¿Por que nos ayudan? Los humanos los encerramos, pero nos ayudan, si sucede lo mismo los humanos no pensarían en matarlos -pregunto sentándose-
-Los monstruos no somos rencorosos, nos dolió y afecto la guerra, perdimos varios amigos, familias... Pareja -apretando su mano- sin embargo el rencor solo daña nuestras almas, por eso es que los ayúdanos, no esta en nuestra naturaleza el tener rencor... No como ustedes -dando un mirada a Sans por sobre sus hombros-
-Te diría que lo siento en nombre de la humanidad, pero se lo despreciables son, no dudarán en matarnos si volvemos... aunque no emos hecho algo malo -apretando las sabanas- si te puedo pedir perdón en mí nombre, el de Chara y el de los pocos humanos de buen corazón -inclinando su cabeza-
-No hay problema, ya pasaron generaciones para ustedes, no tienen nada que ver con la guerra entre nosotros y los humanos -relajando la mano- dentro de poco vendrá un médico a verte y a darte el alta si te recuperaste -marchandose-
-(espero sea verdad, los pocos monstruos que conocí son buenos... pero puede que no todos sean así) -penso para si mismo mientras se acostaba- maldita resaca
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Habían pasado 2 semanas, Sans conoció el subsuelo junto a Chara viendo como vivian los monstruos, como los veian: como seres de esperanza. Tras su recuperación, Sans fue adoptado por la pareja Skeleton y aunque tenía dudas (como el apellido de la pareja) le ayudaron a comprender el subsuelo y como funciona, asi como enseñarle sobre ciencias exactas (por parte de su padre) y arte (por parte de su madre)
Chara por otra parte estaba siendo educada como princesa ya que fue adoptada por la familia Dremmurr, sus clases le eran pesadas, aunque le interesaba lo que era la botaneria y leyes siendo la contraparte de su hermano el cual era un devorador de todos los conocimientos que no implicara lectura o trabajo de paciencia
Con el tiempo sintieron al subsuelo como un hogar, uno al que si pertenecían
XX-X-201X
Habían pasado 2 años, 2 años en los cuales su vida dio un giro de 180° con la llegada al subsuelo, aunque se sentían solos siendo los únicos humanos, también de sentían en familia con los monstruos
-Padre, Voy con Chara y Napstablook -grito el albino colocándose una campera-
-Bueno, regresa en una pieza -saludo su padre adoptivo-
Al salir de la casa tomo un atajo por el hombre del río llegando a Snowdine para adentrarse en el bosque hasta llegar a un claro, siendo iluminado por las gemas del techo que simulaban estrellas, encontrando un fantasma escuchando música
-Como siempre, siendo el primero -saludo a el fantasma que estaba tirado en el suelo-
-Ohh, ya llegaste -devolvio el saludo-
-como te encuentras, ¿Cómo te va con tu primo? -pregunto colocando ramas en una pequeña montaña-
-Sigue queriendo un cuerpo físico, si no mal me acuerdo está trabajando con... ¿Tomfis? -dudoso de su respuesta-
-Supongo que estarás solo tu con una apariencia de fantasma -terminando de apilar las ramas-
Sans saco un cerillo, lo prendió y tiró a la pila de ramas las cuales empezaron a arder
-¿Para que me llamaste? -pregunto el fantasma colocándose cerca del fuego-
-dentro de poco será el cumpleaños de Chara, quisiera darle un regalo pero no sé dónde se encuentra la última pieza -desplegando un dibujo garbateado-
-Ohh, lo vi por Watherfall, esta pasando una sala con un piano -relato recordando donde vio la gema-
-Gracias, sabía que podía contar contigo -guardando el garabato-
A los pocos segundos se escucha una rama romperse y al poco tiempo aparece la otra humana
-perdon por la espera, el palacio si que queda lejos -colocandose junto a los otros 2- ¿De que hablaban?
-Sobre un tema que compuse -contesto el fantasma-
-¿Me dejas escucharlo? -pregunto la castaña-
-Ten -entregando un reproductor de música-
La castaña se colocó unos auriculares y se tiró para atrás en la nieve escuchando la música
-Mejoraste bastante -opino mientras cerraba los ojos-
-Gracias, Princesa Chara -alegre de recibir una buena opinión-
-(Supongo que estará cansada) ¿Entrenamos Napsta? -pregunto el albino levantándose-
-Bueno, sin rencores -apareciendo en otro lado cerca de la fogata-
Autor: ¿Sera este un buen cambio? -mirando unos papeles-
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Después De Rutas [Undertale: Long Love (Remake)]
FanfictionHabía pasado tiempo, Sans y Chara, quienes en algún momento fueron humanos y amigos muy cercanos, terminaron separados Chara falleció tras envenenarse, siendo mandada a las profundidades del infierno tras la masacre que ocasionó con el cuerpo de su...