Chico Raro ᵏᵒᵒᵏᵐⁱⁿ ᵃᵈᵃᵖᵗᵃᶜⁱᵒⁿ

40 ) 2020

— Seunghyun, qué mierda estás haciendo. —murmuró intentando contener el enojo, lo cual en su tono de voz no había funcionado.

— Jungkook —se levantó y apartó rápidamente del rubio—. Joder, tenías que llegar justo ahora. —gruñó por lo bajo.

— ¿Intentabas...? —frunció su ceño y dio un paso hacia el bajito, quién retrocedió— ¿Tú intentabas hacerle algo a Jimin?

— Por favor Jungkook, no actúes como si tú no quisieras acostarte con él. Siempre has intentado ganarte su confianza para poder —el contrario no le dejó terminar puesto que lo empujó contra la puerta del baño.

— ¡Eres asqueroso Seunghyun! —alzó su puño pero se detuvo a centímetros de su mejilla.— Mingyu Él —ahora fue Seunghyun quien le interrumpió.

— Y no sabes cuánto me divertí. —dijo con una sonrisa y sin dejar de tener aquel contacto visual con Jungkook.

Seunghyun aprovechó que el mayor estaba aturdido y lo empujó para lograr escapar, corrió fuera de la habitación y posteriormente bajó las escaleras.

Jungkook no lo siguió, se acercó a Jimin y se aseguró de que estuviera bien, no tenía ninguna marca hecha recientemente pero de tan sólo pensar en Seunghyun tocando el delicado cuerpo del rubio, le daba rabia.

— Jungkook, ¿Qué pasa? Vimos a Seunghyun irse corriendo, ¿Ocurrió algo? —preguntó Taehyung quien había llegado junto a Dino .

— Dino , no dejes que Seunghyun se vaya, ¡Ve y atrápalo! —miró al primer mencionado y tras una mirada de confusión, acotó sus órdenes. luego miró a Taehyung—. Dile a todos que se vayan, la fiesta terminó.

No pudo oponerse ante su tono y menos su expresión, algo había pasado y era mejor simplemente seguir sus órdenes.

Taehyung avisó a todos que se fueran, la mayoría refunfuño pero poco a poco la casa comenzaba a vaciarse hasta que nadie más se encontraba ahí.

Diez minutos después de eso Dino regresó.

— No lo encontré por ninguna parte. —dijo al ver qué Jungkook bajaba las escaleras—. ¿Nos vas a decir qué demonios sucede?

— Mingyu tenía razón, Mingyu tiene razón. —admitió soltando un suspiro pesado. vió que sus amigos no habían entendido con eso así que volvió a suspirar intentando calmarse sin logro alguno.— Seunghyun intentó abusar de Jimin mientras dormía, lo vi... —frunció su ceño.— También admitió lo de Mingyu

— Jungkook —murmuró Dino.

— Si no me creen, entonces pueden irse muy a la mierda junto con él. —respondió de inmediato.— Joder, ¿Qué coño tenía en la cabeza para no creerle a Mingyu? —comenzó a caminar de un lado a otro.

— ¿Estás seguro de que viste bien? —volvió a preguntar Dino. Taehyung se encontraba en silencio, no tenía nada qué decir al final.

— Sé que lo conoces de hace tiempo, yo también creí conocerlo pero lo vi Dino, y estoy muy seguro de lo que vi. —se detuvo para mirar a ambos.

— Somos unos idiotas... —mencionó ahora Taehyung antes de sentarse en el sofá.

— ¿Me creen? —cuestionó Jungkook, Taehyung fue el primero en asentir, después Dino.

— Escucha, son las tres de la mañana, vayamos a descansar un poco, ¿De acuerdo? Más tarde, mañana o el Lunes buscamos a Seunghyun y arreglamos todo esto, ¿Bien? —dijo Dino mirando al castaño y al de cabello negro, el segundo de ellos no se veía convencido.— Jimin ahora está bien, Jungkook... Ve a dormir con él.

Sabía que no valía la pena buscar ahora, estaba todo oscuro y habían muchísimos lugares para esconderse; Por lo que suspiró antes de asentir y regresar a la habitación con Jimin. Definitivamente más tarde iría a buscar a Seunghyun, quería golpearlo hasta que no respirara más. También estaba molesto consigo mismo, anteriormente Mingyu confió en ellos y les dijo lo que Seunghyun le hizo pero no le creyó, se sentía tan imbécil en ese momento.

Durante toda la noche no pudo dormir, admiró a Jimin quien se veía tan tranquilo, suspiró antes de abrazarlo. Así esperó a que amaneciera y cuando lo hizo, se levantó sin muchas ganas.

— ¿Vas a salir? —preguntó Dino al ver al pelinegro bajar las escaleras.

— ¿Limpiaron toda la noche? —frunció un poco su ceño al ver todo en orden.

— Sí, creímos que era lo mínimo que podíamos hacer, ¿No? —respondió Taehyung con una sonrisa—. ¿A dónde vas?

— Iré a casa a ducharme y cambiarme, ¿Pueden quedarse aquí? No me tardaré mucho, no quiero que Jimin esté solo. —se aproximó a la puerta mientras esperaba respuesta ajena.

— ¿Confías en nosotros? —cuestionó el rubio.

— Pf, claro. —abrió la puerta y se giró antes de salir.— Tú eres mi mejor amigo. —miró a Dino y tras decirlo miró a Taehyung.— Y tú eres mi exnovio. —sonrió antes de salir.

Decidió caminar a su casa, quería despejarse un poco, y eran al rededor de veinte minutos caminando pero ya que era temprano y era época de otoño, el clima era fresco. Al llegar a su casa notó que todo estaba en orden, deducía que sus padres ya se habían ido debido a que el sistema de seguridad estaba encendido.

Tomó una ducha larga para pensar un poco en todo. Seunghyun siempre fue muy coqueto y atrevido, pero llegar a ese punto había sido algo imposible de imaginar hasta esa madrugada. Se maldijo muchas veces por no sospecharlo a pesar de las mil pruebas que aquel chico le había dado.

Miró el contacto de Mingyu en su celular, podía llamarle, verse y hablar, le debía una sincera disculpa. ¿Después de tanto tiempo estaba bien?

Guardó su móvil antes de salir de nueva cuenta de su casa. Sí, necesitaba disculparse, pero ese no sería el día.

— ¿Todo está bien? —preguntó tras entrar a la casa y mirar a uno de sus amigos mirando televisión.

— Sí, Jimin despertó y dijo que tomaría una ducha. —respondió Dino con una sonrisa.

— ¿Dónde está Taehyung? —frunció su ceño.

— Tranquilo, está en la cocina preparando algo se sopa para tu chico. —le guiñó el ojo.

Jungkook no dijo nada, fue hasta la cocina y efectivamente Taehyung estaba ahí cocinando tan tranquilo mientras improvisaba un rap con los ingredientes que allí había.

— Taehyung. —el castaño se dio la vuelta tras dar un pequeño brinco al oírlo.

— ¡Kook! —dijo con una sonrisa.

— Te he dicho que no me llames así. —sonrió y se sentó en la barra.— Oye, gracias por esto, a Jimin seguro le gustará.

— Debe comerla, seguramente tiene resaca. —se cruzó de brazos.— Aunque no quiera, la comerá. —su compañero rió y Taehyung relajó sus brazos antes de acercarse a la barra y apoyarse en esta.— Te gusta mucho, ¿Verdad?

Esa simple pregunta hizo que Jungkook

dejara de reír al igual que de sonreír.

— Taehyung —pero el castaño no lo dejó terminar.

— Es porque es lindo y atractivo, ¿Cierto? —bajó su mirada a sus propias manos.

— Detente. —se levantó y dirigió al castaño para sujetar sus hombros.— Taehyung no te hagas esto, ¿Si? Por favor.

— Perdona, a veces no puedo evitar pensar en nosotros. —sonrió ampliamente pero sin alejarse del pelinegro.— Además, hoy mencionaste que somos exnovios, ¿Qué tal si Jimin escuchaba?

— ¿Ustedes...? —murmuró Jimin mirando desde la puerta, ambos lo miraron y Taehyung se golpeó mentalmente por no darse cuenta.