20

97 29 2
                                    

«Todo se iba saliendo de control, estaba entre la espada y la pared, mirar el mechón de cabello, mi lobo rasguñaba mi interior culpándome de todo.

De dañar a mi otra mitad de la manera tan cruel en la que lo hice, mi lobo me decía que era mi culpa y que él me advertía que con esto no debía de jugar, pero como un tonto no le hice caso.»

El pálido se levantó al escuchar ruidos, personas cubiertas entraron y lo sometieron para inyectarle algo para dormir. Cuando abrió los ojos vio que estaba amarrado a una silla y a la par suya estaba la omega también.

—Suran. —la llamo.

La omega se movió incómoda y abrió los ojos y miró el lugar confundida, mientras se quería liberar; la puerta se abrió y dejó ver a un peli rosa, el cual sonrió mientras arrastraba una silla y se sentó para verlos.

—Ya despertaron. —hablo.

—Libéranos. —dijo la omega.

—No. —negó. —querían a su hijo de vuelta, así que por eso los traje.

—¿Qué pretendes? —preguntó el alfa.

Jimin solo se levantó y salió con la silla y cerró la puerta, minutos después se abrió la puerta y vieron al omega y unas personas entrar con un niño en brazos y una silla. El omega puso al niño en la silla y luego lo acarició de manera lenta.

—Póngales el collar. —ordenó.

Unos hombres se acercaron a los tres y les pusieron unos collares de metal y luego tomaron al alfa y lo sacaron. Jimin vio a la omega y se acercó para pedir que los dejaran solos con el niño.

—Debí matarte cuando tuve oportunidad. —habló la omega y el peli rosa se rio.

—Tienes razón. —sacó un cuchillo y lo pasó por la mejilla del niño. —pero fue un error que yo no voy a cometer.

—Si tocas a mi hijo, juro que te haré pedazos. —amenazó la omega.

—No es tu hijo. —le hizo un pequeño corte en la mejilla. —Lo único que te une a este niño es un lazo que crearon, porque de ahí lleva mi sangre y genes su rostro lo dice todo.

—Si es tu hijo, no lo matarías. —le dijo.

—Sabes que todo lo que me hicieron me hace negar verlo como mío. —mencionó. —y mi lobo tampoco lo reconoce como tal.

—Tuviste una hija, debes saber lo que se siente ser padre omega. —dijo.

—Lo sentía. —sonrió. —pero tu esposo también me la arrebató y esta vez lo regresaré de la misma forma.

Memories Of A Criminal [Y.M] [#2] [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora