CAP 14. Inner Tempest

310 17 0
                                    

Pov's Rivers

La mañana estaba cargada de una calma engañosa mientras me despertaba en la cama de Ari. La luz del sol entraba suavemente por las cortinas, y por un momento, todo parecía perfecto. Pero sabía que era una ilusión. Había un peso en el ambiente, un eco de las emociones turbulentas del día anterior.

Ari y yo habíamos pasado por tanto juntas, y verla tan herida me destrozaba. Me levanté con cuidado, tratando de no despertarla. Necesitaba un momento para pensar antes de enfrentar el día. Caminé hacia la cocina y me preparé una taza de café, dejándome envolver por el familiar aroma que siempre me calmaba.

Mientras bebía, los recuerdos del día anterior volvieron a inundar mi mente. La traición de alguien en quien Ari había confiado, y cómo la había dejado devastada. Quería protegerla de todo ese dolor, pero sabía que no podía borrar lo que había pasado. Solo podía estar a su lado y apoyarla de la mejor manera posible.

Ama entró en la cocina poco después, con una expresión de preocupación en su rostro. Era una joven fuerte, pero ver a su hermana sufrir le estaba afectando profundamente.

Ama: Buenos días, Samantha. ¿Cómo está Ari?

Rivers: Buenos días, Ama. Todavía está dormida. Creo que la agotó todo lo que pasó ayer.

Ama: Sí, fue un día difícil para ella… y para todos nosotros.

Nos sentamos juntas en la mesa, compartiendo un silencio lleno de entendimiento. Ama y yo habíamos llegado a conocernos bien a través de los años, y sabíamos que nuestras preocupaciones por Ari nos unían aún más.

Ama: ¿Crees que va a estar bien?

Rivers: Quiero pensar que sí. Ari es fuerte, pero esto la ha golpeado duro. Lo único que podemos hacer es estar aquí para ella.

Ama asintió, su mirada reflejando la misma determinación que sentía yo. Estábamos juntas en esto, y no íbamos a dejar que Ari enfrentara su dolor sola.

Más tarde, cuando Ari se despertó, intentamos mantener un ambiente ligero y positivo. Hicimos el desayuno juntas y charlamos sobre cosas triviales, evitando cuidadosamente el tema que todos sabíamos que flotaba en el aire. Sin embargo, no podíamos esquivar la realidad para siempre.

Después del desayuno, Ari y yo decidimos salir a dar un paseo. El parque cerca de su casa siempre había sido un lugar donde encontrábamos un poco de paz. Caminamos en silencio, el sonido de las hojas bajo nuestros pies y el canto de los pájaros siendo la única banda sonora de nuestros pensamientos.

Rivers: Ari, sé que esto es difícil, pero quiero que sepas que estoy aquí para ti, pase lo que pase.

Ari: Lo sé, Samantha. Y eso me da fuerza. Pero a veces siento que este dolor nunca desaparecerá.

Rivers: Con el tiempo, se irá haciendo más llevadero. Y recuerda, no tienes que enfrentarlo sola. Ama y yo estamos contigo.

Ari me miró con gratitud, y en ese momento supe que estábamos en sintonía. Nos abrazamos, compartiendo un momento de conexión profunda que reforzaba nuestro vínculo.

────⊹⊱✫⊰⊹───
1 semana después
────⊹⊱✫⊰⊹───

Ya era noche y me disponía a tener la mejor tranquilidad con Ari pero esto no duró mucho. Esa noche, mientras Ari descansaba en su habitación, recibí una llamada que cambió el curso del día. Era un número desconocido, pero algo en mí sabía que debía contestar, salí de la habitación y me dispuse a contestar.

La Amante [rivari]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora