Renacer |Yoonmin|

.5.

                                                                                                  🍃
El invierno llegó al pequeño pueblo, trayendo consigo noches frías y días claros.

Yoongi había llegado a un punto en su proceso de sanación donde sentía que podía empezar a abrir su corazón nuevamente, especialmente hacia Jungkook. El bebé, que ahora tenía unos meses más, era una fuente constante de alegría y esperanza en la casa.

Una mañana, mientras Jimin preparaba el desayuno y Jin y Namjoon conversaban en la sala, Yoongi se acercó a la cuna de Jungkook. El bebé, con sus ojos grandes y curiosos, miró a Yoongi y extendió sus pequeños brazos, balbuceando alegremente.

Yoongi sonrió, sintiendo una calidez en su corazón.

-Hola, pequeño- dijo suavemente, extendiendo sus brazos para levantar a Jungkook. Al principio, sus manos temblaban ligeramente, pero cuando el bebé se acurrucó en su pecho, una sensación de paz y amor lo envolvió.

Jimin observó desde la cocina, su corazón llenándose de emoción al ver a Yoongi sosteniendo a Jungkook con tanto amor y ternura. Era un momento significativo, una señal de que Yoongi estaba listo para avanzar y abrir su corazón de nuevo.

Yoongi caminó lentamente por la sala, acunando a Jungkook y hablándole en voz baja.

-Sabes, pequeño has traído tanta alegría a esta casa. Estoy agradecido por cada momento que compartimos-

Jimin se acercó a Yoongi, colocando una mano reconfortante en su brazo -Estás haciendo un gran trabajo, Yoongi. Jungkook te adora- con una linda sonrisa

A Yoongi le gustaba ver a ese hermoso omega sonreír y este le sonrió de vuelta, mirando a Jimin directo a los ojos -Gracias, Jimin. No podría haber llegado hasta aquí sin tu apoyo-

Mientras tanto, Jin y Namjoon, que habían estado observando la escena desde la sala, intercambiaron una sonrisa. La conexión entre ellos también había crecido, y se sentían más cercanos cada día.

-Es lindo ver cómo Yoongi está sanando- comentó Namjoon, su voz llena de admiración -Y tu lindo omega, tú has sido increíble, Jin. Tu apoyo ha significado mucho para todos nosotros-

Jin se sonrojó ligeramente, sintiendo una calidez en su corazón -Gracias, Namjoon. Tú también has sido una gran ayuda-

Namjoon sonrió y tomó la mano de Jin, apretándola suavemente -Ahora estamos en esto juntos, Jin. Todos estamos aquí para apoyarnos-

Más tarde, mientras Jungkook dormía en sus brazos, Yoongi se sentó en el sofá junto a Jimin. Miró al bebé con una mezcla de amor y esperanza.

-No sabía si alguna vez podría sentir esto de nuevo- confesó Yoongi, su voz temblorosa y casi como un murmullo -Pero gracias a ti por ayudarme ese día-

Jimin acarició suavemente el cabello de Yoongi -Debo admitir que si dude un poco, pero te vi tan vulnerable, pero siempre estaremos aquí para ti, Yoongi. Somos una familia ahora, y enfrentaremos todo juntos-

Pasaron un par de meses la presencia de Nam ya no causaba tanto impacto en la comunidad.

Un día, Namjoon llegó a la casa de Jimin con una expresión grave -Necesito hablar contigo, Yoongi- dijo, su voz firme y un poco acelerado -He descubierto algo importante sobre el incendio-

Jimin y Jin, que estaban en la sala, se unieron a la conversación, sus rostros llenos de preocupación.

Yoongi asintió, invitando a Namjoon a sentarse -¿Qué has descubierto?- preguntó, temiendo la respuesta.

Namjoon tomó un respiro profundo antes de hablar -El incendio fue provocado- dijo lentamente pero tajante y seguro de lo que decía -Y he encontrado pruebas que apuntan a tu antiguo jefe, Hyunwoo. Parece que siempre tuvo tensiones contigo porque quería a Suran, tu pareja de entonces-

Jimin y Jin intercambiaron miradas sorprendidas mientras Yoongi se hundía en el sofá, procesando la información.

-Hyunwoo... siempre tuvo celos de mí- murmuró Yoongi, su voz temblorosa y mirada atónita -Quería a Suran, pero ella me eligió a mí-

Yoongi miró a Namjoon, sus ojos llenos de dolor y recuerdos -Suran quedó embarazada y dio a luz a nuestro hijo, pero luego desapareció sin dejar rastro- haciendo una pausa para mirar a su alrededor -La busqué por todas partes, pero nunca encontré ninguna señal de ella, Sabía que estaba viva porque sentía nuestra conexión entre lobos, pero poco a poco se fue desvaneciendo-

Namjoon asintió, comprendiendo la profundidad del dolor de Yoongi -Las pruebas sugieren que Hyunwoo estaba obsesionado con encontrar a Suran- hizo una pausa y respiro -Pero después de que ella desapareció, comenzó a culparte por su huida. La discusión que tuvieron fue solo la culminación de años de tensión- su voz salió mas grave de lo que esperaba

Yoongi recordó aquella fatídica discusión.

-Nos enfrentamos en la oficina. Hyunwoo me culpó de la desaparición de Suran, diciendo que yo la había alejado- tensando el cuerpo solo con esos recuerdos -Terminamos en una pelea violenta, y después de unas semanas- pauso para seguir recordando y su voz salió mas grave, que a Jin y Jimin se les erizo los pelos -y luego ocurrió el incendio-

Las lágrimas comenzaron a correr por sus mejillas mientras revivía esos momentos -Pensé que todo había terminado con esa pelea, pero nunca imaginé que él provocaría el incendio- y luego su cuerpo quedo completamente débil.

Jimin se acercó a Yoongi, tomando su mano en señal de apoyo -Lo siento tanto, Yoongi. Ahora entiendo por qué has sufrido tanto. No merecías pasar por esto- Hundiendo su rostro en el cuello ajeno

Namjoon continuó -Voy a hacer todo lo posible para llevar a Hyunwoo ante la justicia. Con las pruebas que hemos reunido, podemos demostrar que él fue responsable del incendio-

La revelación de la verdad sobre el incendio trajo una mezcla de alivio y dolor a Yoongi. Mientras Namjoon se preparaba para llevar el caso a las autoridades, Yoongi encontró un nuevo sentido de propósito en la lucha por justicia para su hijo y Suran.

Más tarde esa noche, mientras acunaba a Jungkook en sus brazos, Yoongi sintió una paz que no había experimentado en años -Prometo que encontraré justicia para ti y para Suran- susurró, mirando al bebé dormido -Haré que Hyunwoo pague por lo que ha hecho-

Jimin se acercó a Yoongi, abrazándolo con fuerza -Estamos contigo en esto, Yoongi. No estás solo-

En la cocina, Jin y Namjoon compartían una taza de té, reflexionando sobre los eventos del día. -Es increíble todo lo que Yoongi ha pasado- dijo Jin, su voz llena de compasión.

Namjoon asintió -Sí, pero ahora tiene a personas que lo apoyan. Y vamos a asegurarnos de que se haga justicia-

Con Namjoon a su lado, y la fuerza de su nueva familia, Yoongi se preparó para enfrentar lo que viniera. La verdad había salido a la luz, y aunque el camino hacia la justicia sería difícil, sabía que no tendría que recorrerlo solo.

Y así, en medio del invierno, la casa de Jimin continuó siendo un refugio de calidez y amor, donde cada miembro encontraba la fuerza para sanar y seguir adelante, juntos.

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