Flamingo Pink.

5. En un mundo de chicos, él es un caballero.

¿Cómo no enamorarte y caer rendido a los pies de la persona que has deseado por tanto tiempo si además de eso es un ser humano sensible, inteligente y te quiere presumir con todo el mundo?

Porque es lo que ha estado haciendo, llevarme a cada una de las prácticas y partidos amistosos que puede y que nos permiten empatar nuestros horarios; ambos tenemos que estudiar, él debe practicar y yo necesito trabajar además de ayudar en el negocio de mis padres, lo cual nos reduce el tiempo para estar juntos considerablemente pero puedo ver todos los esfuerzos que hace Jin para vernos aunque sea unos minutos al día lo cual me acelera el corazón y me alienta a continuar soñando sobre que podemos ser para siempre...

Soy muy consciente de las miradas nada discretas que me dedican al pasar, así como de los cuchicheos que se presentan cuando me ven llegar a algún lugar de entrenamiento. Aún así, ninguna de esas cosas me hace estar preparado para el coro de exclamaciones de sorpresa que emiten todos los presentes cuando al finalizar la práctica Jin viene corriendo hacia donde estoy esperándolo y me planta el beso más delicioso que he recibido de él.

Estoy seguro de que no hay disimulo en las personas que están siendo testigos de cómo su mano fuerte me afianza por el mentón y la nuca mientras los dedos largos se le enrollan en mi desordenado cabello permitiéndole a su boca explorar más y más la mía y después de lo que me parecen segundos se aparta despacito y me encuentro abriendo los ojos con lentitud y de lleno me recibe una sonrisa cálida y preciosa.

-Hola- me dice y estoy convencido de que de no ser porque los dos somos plenamente conscientes de que tenemos público nos habríamos vuelto a estrellar en otro beso.

-Hola- respondo, arrugando la nariz como para quitarle importancia a que este es el momento donde nos estamos declarando oficialmente al mundo como una pareja.

También pienso que no es que SeokJin me lo haya preguntado, pero para mí estamos juntos, justo como lo están pensando el resto de personas que nos rodean.

-Quizá otro día no hubiera sido este tipo de bruto que sólo llega a estamparse a tus labios, como mosca en la sopa - dice mientras se ríe bajito y  toma siento a mi lado en la banca restándole importancia a los pares de ojos que siguen cada uno de sus movimientos.

-Entonces ¿qué pasó con tu capacidad de raciocinio hoy?-pregunto intentando sonar inocente.

Jin entrecierra los ojos y me apunta con uno de sus finísimos dedos.

-¿Acaso no te has visto en un espejo?- responde ofendidísimo y yo sólo atino a soltar una risilla nerviosa.

Él no es del tipo de los que te endulzan el oido con palabras bonitas o te adulan para llevarte a la cama con facilidad, por eso es que esta especie de piropo me toma por sorpresa y no sé qué responderle. Le agradezco al cielo que él toma la iniciativa para continuar hablando.

-Honestamente NamJoon y YoonGi me habían estado molestando sobre que me estaba inventando todo sobre nuestra relación.

-¿Qué?-pregunto.

Y no lo interrogo en consecuencia de lo que acaba de decir sobre sus amigos, sino porque al parecer ambos pensamos que no estamos viviendo en la realidad, él a su manera, yo a la mía.

-Eso - responde colocando los brazos sobre las rodillas y reclinándose hacia adelante, su mirada me busca cuando continúa - Creen que eres demasiado bueno para mí y que el hecho de haber aceptado salir conmigo solo habla de tu buen corazón para rechazar al inútil y rompecorazones coreback del equipo de americano.

No hay señal de que esté bromeando cuando termina de pronunciar esa letanía.

-Tus amigos no tienen idea de lo que pasó en la fiesta ¿verdad? - inquiero