Capítulo 12: 'Rencores'

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Tristán

Tea: ¿Estás seguro de lo que haces Yami?- sé que lo que pasó con Yugi le afectó, aunque no se le note mucho- ¿no crees que es exagerado?

Yami: No, de hecho el plan es perfecto- se guardó la cuchilla del cortador en el bolsillo- solo tengo que provocarla y podré dejarla como el villano frente a toda esta maldita institución- Tristán, Ryou y yo nos miramos.

Ryou: ¿Y cómo es básicamente tu idea?, si Yugi se la pasa en la enfermería todo el tiempo, por algo es mejor que la otra, que nunca aparece y siempre llega tarde.

Yami: Conozco su horario, en el almuerzo él sale y en media hora regresa, tengo media hora para lograr mi cometido, además Kaiba resultó ser de ayuda en algo, el director se asoma a la ventana, a la par que mi Aibou está regresando, tengo el escenario ahí, solo me falta crear la escena.

Tristán: Honestamente te diré que te volviste loco- me miró mal- pero todo con tal de que saquen a la otra chica y que puedas estar en paz con el amor de tu vida, te apoyo- me sonrió, además ya es hora de un cambio.

Salimos al patio y si, el director estaba mirando hacia acá, no se me hace tan normal, pero bueno, cada uno tiene sus costumbres, supongo, entonces vimos que Mai venia, pero no como pensábamos, algunos estudiantes la insultaban, aunque yo también lo haría después de lo que le hace a los estudiantes, Yami fue a dejar las cosas, porque se supone que Mai regresaba más tarde, discutieron un poco, y por la cara de sorprendida me imagino que ya le dijo que ya sabe que fue ella, y le dio la cachetada, ¿de verdad es tan mala persona?, el director fue corriendo, Yugi llegó y si, creó la escena perfecta.

Yami

Yami: ¿Qué pasa?, ¿te insultan por obligar a unos estudiantes grandes a tener sexo contigo?- me miró mal y yo solo me reí- ¿qué?, te digo la verdad, no es mi culpa que seas una puta.

Mai: ¿Yugi no se acuesta contigo?, es igual.

Yami: No, porque soy adulto, ya tengo la edad y el director lo sabe- me miró más enojada y tensó las manos- además él si cumple con su trabajo, no como tú que solo te revuelcas con jóvenes para complacer tu mente enferma- y me dio la cachetada, yo volteé y cuando me pasé la mano, simuladamente logré enterrarme la cuchilla y la guardé.

Yugi: ¡¿Mai, estás loca?!- corrió hacia mí- mírame Yami- y cuando volteé, espanté a todos al rededor.

Yami: Me duele mucho, ¿es grave?- el directo apareció y regañó a Mai frente a todos, quería reírme, pero no, debo mantenerme, me fui con Yugi a la enfermería y Mai a la dirección, oh si, esto está mejorando poco a poco- me dio un golpe, si yo no le hice nada- me dolió cuando pasó el algodón mojado.

Yugi: Ya, amor, estoy siendo lo más delicado que puedo- sé que debe hacer presión para que la sangre se detenga, pero no pensé que dolería tanto- ahora te coloco la cura en toda la mejilla- me la puso con cuidado y me miré en el reflejo del agua aromática que me dio, dios, tengo un cuadrado en toda la mejilla- listo.

Yami: Gracias amor- miré que nadie viniera para acá y lo abracé- ¿en la noche me la cambio?

Yugi: Si, aunque menos mal hay de estas en la casa, solo debo mirar como avanza, menos mal no fue un corte tan profundo... aunque Mai siempre tuvo las uñas largas, así que era imposible que no te rasguñara así- otro punto a mi favor.

Más tarde...

Yugi

Mai: ¡Yugi!, por favor hablemos de lo que pasó- caminé rápido, pero me alcanzó- por favor.

Yugi: ¿Es una broma?, nosotros ayudamos a los estudiantes, y tu vas y le pegas a uno, hasta lo hiciste sangrar, Mai.

Mai: Eso se lo hizo él, yo no pude haberlo hecho.

Yugi: ¿Has visto tus largas y decoradas uñas?- cerró los ojos y movió los ojos, si... ahora se te olvida que tienes uñas- sales temprano y llegas tarde a trabajar, antes me agradabas mucho y cumplías conmigo el trabajo Mai, ya no eres la misma persona- acomodé mi maletín sobre mis hombros- ya no quiero ser más tu amigo, adiós- y me fui caminando rápido al apartamento.

Apenas Yami terminó sus deberes, se acercó a mí y le quité a cura.... ok, no sale tanta sangre, pero aún sale, le desinfecté y al menos ya casi no se queja, y le puse uno nuevo, después cenamos en casa, hice arroz con camarón, miramos televisión un rato, y Yami se recostó en mi pecho, lo consentí y cuando acomodaba la cabeza, le dolía y volteaba, va a ser difícil porque él siempre acomoda la cabeza presionando la mejilla derecha, justo donde tiene la herida, pero bueno, solo hay que esperar.

Hasta el próximo capítulo....

Pequeño YamiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora