ʚɞ『ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 6』ʚɞ

91 7 4
                                    

Narrador: ___

Eran las 3:00 de la madrugada. Estaba dormido dentro de mi carpa cuando la tranquilidad de la noche fue interrumpida por el fuerte grito de dos animales peleando. Los sonidos eran lo suficientemente cercanos como para hacerme despertar de golpe. Me incorporé lentamente, frotándome los ojos y tratando de despejar la somnolencia que aún me envolvía y me impedía poder levantarme.

El campamento estaba completamente silencioso. Mis padres, sorprendentemente, aún no se habían despertado a pesar de los ruidos.

Escuché atentamente, intentando identificar de qué animales se trataba, pero los sonidos eran extraños, como si algo más estuviera sucediendo y se acercara a velocidad, rompiendo las ramas y pisando las hojas secas del suelo. Mi corazón comenzó a latir más rápido, una mezcla de curiosidad y temor recorría mi cuerpo. Decidí salir de la carpa para investigar, con cuidado de no hacer ruido para no despertar a mis padres por él momento.

Al salir, la noche era oscura, pero las estrellas brillaban intensamente en el cielo, dando una leve iluminación que permitía una visión pobre del bosque. Me acerqué lentamente hacia donde provenían los sonidos y donde se acercaban cada vez más, con cada paso sintiendo el frío de la noche. La luna proyectaba sombras inquietantes entre los árboles y el viento susurraba entre las hojas, aumentando mi sensación de inquietud y las ganas de salir corriendo a despertar a mis padres.

De repente, el ruido cesó, dejando un silencio inquietante que parecía envolver todo a mi alrededor. Me detuve, esperando escuchar algo más, pero la quietud era absoluta, hasta el ruido del viento moviendo las hojas había desaparecido. Una sensación extraña me recorrió el cuerpo, una mezcla de ansiedad y miedo que era acompañada por el sonido de la naturaleza en la noche. Era como si mi subconsciente me estuviera avisando de algún peligro inminente, como si algo estuviera rondando por la zona en la que estaba descansando.

Me sentía ansioso, tenía las ganas de salir corriendo sin darme la vuelta a revisar la zona. Todos tenemos una sensación de estar siendo observado desde la inmensa oscuridad del bosque. Lo cual aumentaba mi miedo y me hacía que la poca valentía que había reunido se desapareció fácilmente, siendo cualquier intento de mantener la compostura totalmente inútil.

Miré a mi alrededor, tratando de vislumbrar algo entre las sombras, pero no vi nada más que las oscuras siluetas de los arbustos y los árboles espesos. Decidí regresar a la carpa, convencido de que solo había sido un encuentro común con algún animal atraído por el olor de la comida que mi madre había preparado. Aún había algunos restos sobre la fogata.

Sin embargo, mientras me acostaba nuevamente, no pude evitar sentir que algo aún estaba acechándome en la oscuridad, esperando el momento oportuno para acercarse. A pesar de que aún no lograba todo lo que estaba sucediendo, en especial aquellos gritos inusuales. Simplemente decidí regresar con mis padres y despertarlos por si algo sucedía.

¿Mamá? ¿Papá? -pregunté mientras me acercaba a la entrada de su carpa. El campamento estaba completamente silencioso. Mis padres, sorprendentemente, aún no se habían despertado a pesar de los ruidos de antes-

-Me agaché y abrí lentamente la cremallera de la carpa de donde estaban durmiendo- ¿Papá? Mamá, ¿están despiertos? - susurré, tratando de no sonar demasiado asustado. Empujé la entrada de la carpa con cautela y me asomé -

-Mis padres seguían dormidos. Me acerqué y los sacudí suavemente- Papá, mamá, despierten. Escuché algo afuera, creo que hay animales cerca.

-Mi padre se removió, abriendo los ojos con dificultad- ¿Qué pasa, hijo? -murmuró ligeramente irritado, aún medio dormido-

Escuché unos gritos, como creo que eran animales peleando cerca -expliqué, mi voz temblando un poco- Eran muy fuertes y cercanos. Quizás sea un depredador o algo así papá.

Aprendiendo a ser PapáDonde viven las historias. Descúbrelo ahora