Capítulo 1

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Suspiró rendido masajeándose la sien. Jooha intentaba enseñar a Dooshik dándole instrucciones de como hacer un nuevo platillo para el menú de su restaurante, cosa que estaba siendo realmente agotadora para el omega. El castaño había insistido en que podía cocinar algo delicioso, pero había puesto la cocina patas arriba, por lo que Jooha se vio en la obligación de ayudarlo, no quería tener que cambiar la cocina entera solo por tener a Dooshik cocinando media hora.

—No cortes así de brusco, tienes que hacerlo con suavidad —indicó Jooha quitándole el cuchillo para ponerse a cortar la carne y así enseñarle.

—Ya entiendo hyung, ahora déjame a mí. Yo puedo solo.

Le devolvió el cuchillo y negó con una suave risa. Realmente parecía un niño chiquito emocionado por hacer algo por sí solo.

Suspiró y dio la vuelta para dirigirse al sofá, últimamente se agotaba con facilidad y estaba sensible a algunos olores, en este caso le resultó desagradable el olor a carne cruda, por lo que decidió alejarse antes de que le dieran náuseas.

—¡Recuerda echarle sal! —le gritó desde el sofá una vez acomodado, dispuesto a poner la televisión.

Escuchó un sí como respuesta.

Encendió la televisión y se estiró en el sofá, no entendía el porqué estaba tan agotado, si últimamente no hacía nada más que estar en cama, si es cierto que dedicaba tiempo al restaurante, aunque únicamente ente cocinaba, el trabajo más cansado se encargaba Dooshik.

Antes no solía ir mucha gente, por el hecho de que era un restaurante nuevo, pero teniendo en cuenta a cuando abrió por primera vez, ahora iba mucha más gente, incluso tenían clientes fieles que asistían a menudo a comer, además que una parte del restaurante la hicieron bar, y Dooshik se encargaba de ello, pues realmente era malo en la cocina.

Dooshik finalmente terminó el platillo y a su parecer no quedó tan mal.

—¡Mira, hyung, terminé! —llevó el plato consigo para enseñárselo a su omega, pero este había quedado profundamente dormido.

Dooshik sonrió dejando el plato en la mesita. Se arrodilló y aceró su rostro al del pelilila.

—Dormilón, es hora de comer —comenzó a repartir besos des de su mejilla hasta la nariz.

Jooha soltó un gruñido indicando que estaba despertando.

—Vamos amor, despierta —esta vez acarició su mejilla hasta que los ojos de Jooha se abrieron.

—Mhp, ¿ya terminaste? —se puso boca arriba y estiró su cuerpo.

Dooshik emocionado, cogió el plato y se lo enseñó sorprendiendo al omega. No había quedado tan mal.

—Oh, ¿será que por fin aprendiste a cocinar?

—¡Hyung! —el alfa gimoteó como si de un niño se tratase.

Jooha soltó una carcajada y se incorporó haciéndole una señal a su alfa para que se sentara a su lado.

Se llevó un poquito de comida en la boca, saboreándola, no sabía tan mal, sin embargo, abrió los ojos al sentir náuseas, le dio el plato a Dooshik y corrió al baño.

Dooshik extrañado dejó el plato en la mesita y siguió a su omega hasta el baño, encontrándolo vomitando.

—¿Tan malo estaba? —preguntó apenado con un puchero en los labios.

—No es eso —otra arcada acompañada de vómito, sus ojos lilas comenzaron a llenarse de lágrimas a causa de las náuseas.

Dooshik acarició su espalda dándole apoyo, hasta que vació todo lo que tenía.

—Lo siento —se disculpó el omega —. Ultimamente no me estoy sintiendo bien, estoy muy cansado y suelo tener náuseas, aunque es la primera vez que vomito.

—Deberíamos ir al médico, puede ser estés enfermando del estómago —dijo preocupado —. De hecho vayamos ahora mismo.

Se levantó con la intención de ir a por las llaves del coche.

—No te preocupes Dooshik, iré mañana. Estoy cansado ahora, quiero dormir.

ᴅᴜʟᴄᴇ ꜱᴏʀᴘʀᴇꜱᴀ | 𝒫𝑒𝒶𝓇𝓁 𝐵𝑜𝓎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora