ᴅᴜʟᴄᴇ ꜱᴏʀᴘʀᴇꜱᴀ | 𝒫𝑒𝒶𝓇𝓁 𝐵𝑜𝓎

Capítulo 2

Hace días que se sentía diferente, tanto por el agotamiento repentino y las náuseas. Era normal que se sintiera cansado cuando se encargaba del restaurante, sin embargo, notaba que su cansancio era el doble, y los días de descanso, que se pasaba el día entero en el sofá y de vez en cuando, salía de paseo con su alfa, esos días eran agotadores. 

Despertó alarmado al escuchar un fuerte sonido repetitivo. Suspiró al darse cuenta que solo era la alarma. Eran las ocho de la mañana, Jooha quería seguir durmiendo, por lo que fue a apagarla, lo cual al moverse notó un peso sobre él, con rapidez la apagó y se acurrucó nuevamente en los brazos de Dooshik, quién tenía su mano de manera protectora en el vientre del omega.

Ante el movimiento y, anteriormente, el ruido de la alarma, Dooshik soltó un gruñido, para seguidamente despertar recordando que debian ir al hospital, pues su omega no se estaba sintiendo bien.

Antes de incorporarse, un olor dulce invadió las fosas nasales de Dooshik.

—Mmhp, hyung —lo llamó acercando su cara al cuello del contrario —. Que bien hueles hoy —enterró su rostro en el cuello de su omega aspirando ese aroma —. Es tan dulce. ¿Hemos cambiado de jabón y no me he dado cuenta? —preguntó incorporándose y trató de olerse a si mismo —. Buenos días.

—¿Que tonterías dices tan temprano?

—Tenemos que ir al hospital, mi amor —esta vez si se incorporó estirando sus brazos.

—No quiero, quiero quedarme en la cama contigo todo el día —hizo un puchero demasiado tierno a la vista de Dooshik.

Las mejillas del castaño se tornaron rojizas y su corazón dio un brinco.

—No digas eso, no podré resistirme —se tiró sobre su omega y comenzó a darle besos por toda la cara.

Una arcada se presentó en Jooha, por lo que apartó al alfa de encima suyo y corrió al baño.

Dooshik preocupado, lo siguió y lo vio vomitando nuevamente.

Frunció el ceño. Jooha llevaba días vomitando, y con malestares. Y si... ¿Y si no era un simple dolor de estómago y era algo más?

—Oye hyung, deberíamos ir al médico a que te revisen. No creo que sea un dolor de estómago normal. ¿Has contemplado la posibilidad de estar embarazado?

El omega sintió otra arcada.

—¡Lo siento! No debería haber dicho eso —se disculpó —. No era el momento. Pero si voy a llevarte al médico.

—No, ¿de verdad crees que esté embarazado? —tocó su vientre y en sus ojos apareció un leve brillo.

—Bueno, tienes todos los síntomas.

Jooha se levantó del suelo con ayuda de Dooshik, se lavó la cara y los dientes, pues le resultaba asqueroso el sabor después de vomitar y ambos fueron a vestirse.

Una vez en la consulta, Jooha explicó sus síntomas y el doctor comenzó a revisarlo, pues si era muy probable que estuvieran esperando un bebé.

Le puso el gel frío y comenzó a pasar la maquina en busca de algo.

Se dió cuenta de algo.

—Ahí lo tenemos —señaló el pequeño puntito en la pantalla el cual era el feto —. Muchisimas felicidades a los dos, vais a ser papás —afiemó el doctor con una gran sonrisa.

A Dooshik se le iluminó la cara, sus mejillas se tornaron de un leve color rojo y tenía una sonrisa que no podía ocultar.

Mientras tanto Jooha miró a su alfa esperando alguna respuesta.

Dooshik lo miró y no dudó en abrazarlo.

—¡Seremos papás! —se separó y atrapó las mejillas del omega entra sus manos.

—¡Si! —los ojos de Jooha no tardaron en aguarse y empezaron a salir lágrimas.

—Tienes cuatro semanas de embarazo, a partir de ahora deberías venir cada tres o cuatro semanas a revisarte.

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—No me creo que vayamos a ser padres —comentó Jooha una vez llegaron a casa.

—Tenemos que preparar una habitación para el bebé, y comprar una cuna, y juguetes y... — Jooha lo interrumpió con una carcajada.

—Aún es muy temprano para eso —atrapó su cara entre sus manos —. Primero disfrutemos del embarazo.

Jooha le dio un corto beso a Dooshik, pero este último lo volvió a atrapar.

—Estoy muy feliz —el alfa abrazó al pelilila para volver a besarlo.

Dooshik pidió permiso para adentrar su lengua a la boca del contrario así comenzando a acariciar su lengua.

Jooha saltó rodeando la cadera de Dooshik con sus piernas.

El castaño se dirigió a su habitación y con suavidad se dejó caer con su omega debajo.

—Eres hermoso.

Besó la frente del mayor, bajando por la punta de su nariz hasta llegar a sus labios.

—Te amo —le dijo entre el beso y comenzó a quitarle la camiseta.

—Tambien te amo, Dooshik —respondió el omega.

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Mil disculpaaas por tardar tanto, algunos ya sabrán que he estado ocupada.

Ya me queda menos para tener vacaciones, espero estar más activa.

Intentaré tener mínimo un capítulo más en este mes, y también prometo que trataré de haceelos mejores y más largos.

Nos vemos!! 💗