siempre fuiste tu - t/n x Sabito

capitulo 39

pov t/n

sabito me abrió la puerta de su apartamento, osea… nuestro apartamento, mis heridas se estaban demorando en regenerarse pero decidimos que era mejor terminar mi recuperación en casa, lejos de todas las bromas de Uzui que al parecer está en todos lados y queríamos estar solos como marido y mujer de una vez por todas, aunque debo admitir que igual estaba un poco triste, había pasado la mayoría del tiempo de la base con Kenji, a veces salimos a pasear los tres como familia y dejarlo fue como que se me hubiera roto el corazón otra vez, él lloró mucho

yushiro tambien fue a verme casi todos los dias, el muy idiota lloró la primera noche cuando me vió, lo que me hizo llorar a mi, despues de abrazarme me dijo que al parecer la mezcla de la medicina junto con la glicina habia hecho algo en mi sangre y estaba eliminando todo el rastro de “demonio”... osea que me quisieron matar pero me ayudaron a encontrar la cura, pero tenían que dar con la dosis exacta, aún falta un poco de tiempo y muchas cosas pueden salir mal como ese día

y con respecto a eso, Minami sigue encerrada, a todos en la academia le dijeron que se había ido nuevamente a la otra base. ella aun no quiere informar quien era su cómplice diciendo que nunca se imaginó que él estaba diciéndole todo a los demonios, yo no le creo, pero no podrán tenerla mucho tiempo encerrada por protocolo, si me pudiera aparecer en su celda y hacerla hablar por las malas o por las malas

-Vé a la habitación -me dijo Sabito cuando llegamos a la sala- y descansa, yo me encargo de todo

-la verdad es que no estoy cansada -lo abracé por la espalda, acerqué mi nariz a su cuerpo e inhale fuerte, solté el aire- hueles a gloria -dije dramáticamente y el soltó una risa

-¿Tu esposo huele a “gloria”? -me dijo soltando las cosas que traía en su mano- ella fue mi ex… no creo que su olor…¡Auch! -se quejó cuando le pegué, volví a abrazarlo

-correción, hueles a “gloria” por qué eres mi esposo, es gracias a mí -se rió cuando llevé mis manos a su pecho y apreté sus pectorales- perfecto… -luego llevé mis manos a su trasero y apreté dos veces- totalmente perfecto

-me estás manoseando -dijo divertido

-¿Y? -pasé mis manos por debajo de su camiseta para pasar mis uñas por sus cuadritos

-que es sin mi consentimiento

-¿Quieres que pare? -sonreí al sentir como se tensaba bajo mi toque

-si -se dió la vuelta y me tomó en sus brazos, yo solté un pequeño grito por qué fue muy rápido- pero continúas cuando lleguemos a la habitación y me saque toda la ropa, ahí puedes manosear todo lo que veas

Corrió

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-¿Cómo te sientes? -me dijo acariciando mi cabello, tenía mi cabeza en su pecho acostada encima de él, solo estábamos tapados con la sábana

-me lo has preguntado 5 veces Sabito y mi respuesta sigue siendo la misma… me siento en el cielo

-aumentas mi ego -se rió

-solo digo la verdad -puse mis manos en su pecho y mi mentón encima de ellas- ¿Cómo te sientes tú?

-feliz, extasiado, enamorado… -sonreímos- casi completo

Fruncí el ceño

-¿Solo casi? -él asintió con la cabeza- ¿Qué te falta para estar completo?

-que tu seas feliz

-lo soy -le dije confundida- ¿Qué te hace pensar que no lo soy?

-tu cara cuando tuviste que dejar a Kenji en la base

ok, no me esperaba esa respuesta, aunque sabito me conocía tan bien que sabía que eso es lo que me molestaba o me estaba haciendo sentir mal, suspiré y desvié la mirada

-Kenji -dije- ese niño es… especial, y no me gusta que esté viviendo en la base -sabito acarició mi mejilla- sé que los chicos lo cuidan bien pero… es muy pequeño, necesita una familia y -respiré, los ojos se me llenaron de lágrimas- hubiera estado en una casa con personas que lo cuidaran si yo no hubiera intervenido y hubiera dicho que no lo enviaran, me siento un poco culpable en realidad

-él es feliz en la base, se divierte con los chicos y a ti te adora

-y sabes que yo a él también, es solo que me gustaría darle más…

-esperame -me hizo a un lado interrumpiendome-

-¿qué pasó?

-que me esperes -se puso los boxers y fue a la sala

se demoró un par de minutos, mientras yo me colocaba unas bragas y una camiseta de sabito, las cortinas que había instalado estaban abajo, aún era de noche, pero las quise subir y ver la ciudad desde aquí, este apartamento tenía una de las mejores vistas de la ciudad, a Kenji le encantaría

-estuve hablando con Kiriya -dijo sabito cuando entró a la habitación y se sentó en la cama y puso unos papeles encima- él está de acuerdo, pero tenemos que hablar de algunas cosas antes

-¿de qué estás hablando?

-obviamente esto no podía ser como lo del matrimonio, tenemos que hablarlo -sonrió- pero sabes que yo también quiero a ese pequeño, así que pensé ¿por qué no?

-aún no te entiendo sabito -me acerqué-

el me dió una sonrisa tan cálida que mi corazón, que ahora estaba volviendo a latir lo hizo un poco más rápido

-tenemos la posibilidad de adoptar a Kenji… convertirnos en sus padres

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