siempre fuiste tu - t/n x Sabito

capitulo 40

pov t/n

-¿E-estas hablando en serio? -le dije con el corazón en la mano

-muy en serio -el sonrió y se puso de pie para abrazarme cuando vió que mis ojos se estaban llenando de lágrimas- bueno, si eso es lo que quieres

-quiero -le dije soltando las lágrimas- lo que yo no sabía es que tu querías…

-ey -me tomó de la cara- ¿quién crees que le ha enseñado a bailar? esos pasos que hace Kenji los aprendió de mí -me besó- he aprendido a quererlo, es un niño… muy amable, divertido, es inteligente, tiene talento, de seguro se va a convertir en cazador y en uno muy talentoso, o si decide seguir una profesión sé que lo hará genial, pero ¿sabes qué es lo más importante? que lo veo sonreír cuando está contigo, te veo sonreir a ti cuando estás con él y creo que lo que siento en el pecho es cuando un padre vé a los dos amores de su vida juntos, a su hijo y su esposa…

jamás en la vida pensé que podía enamorarme mas de este hombre que tenía al frente, pero estaba equivocada porque justo en este momento, me estaba enamorando aún más de él y su corazón

-¿Sabes que eres el mejor hombre del mundo?

-lo sé -dijo con falsa arrogancia y nos reímos- peeeeero no va a ser tan fácil como creemos

-¿por qué?

-si fuera por Kiriya nos entregaría de inmediato a Kenji, sabe que no estará mejor con nadie más que contigo pero siempre hay protocolos que cumplir

-¿cuales son?

nos sentamos a conversar, las limitaciones son pocas, pero importantes, primero, que los dos estamos en medio de una investigación, por lo menos debería haber uno solo que no estuviera involucrado en ninguna actividad peligrosa por el bien de Kenji y la estupida de Minami aún no ha querido hablar y si hay un infiltrado en la base que nos quiere perjudicar y que nos pueden atacar en nuestra casa, no es seguro que el niño esté con nosotros, yo estaba totalmente de acuerdo, deberíamos solucionar ese tema primero, y segundo y más importante, estoy en plena transición de demonio a humana, no sabemos cómo pueda reaccionar en cualquier momento, y no me puedo hacer cargo yo sola de un niño pequeño e arriesgarme a estar sola con él si en cualquier momento me puede dar una crisis como las que me dieron los primeros días en la base, un dolor intenso que me duró algunos minutos, ni siquiera me podía colocar de pie o pedir ayuda cuando me quedé sola por un momento

-en los temas económicos no hay problema -prosiguió sabito- si debemos cambiarnos de casa para tener a Kenji con nosotros lo hacemos, pero…

-yo soy el problema

-no -me dijo sabito con dulzura- tu no eres el problema, pero hay que solucionar el primer tema con Minami…

-no digas su nombre -le interrumpí y levanté una ceja-

-ok, lo siento -se rió y me abrazó fuerte- hay que solucionar el tema con esa arpía

-mucho mejor -lo abracé de vuelta-

-lamentablemente no nos podemos hacer los desentendidos, porque gracias a tí pudimos descubrir que había un infiltrado en nuestra organización, lastima que ese demonio no quiso decirnos su nombre

-tengo un recuerdo borroso de aquel chico

-¿que? -me miró- que estas…

-después que trataron de envenenarme recuerdo que un dia estaba despertando, pero estaba tan débil que no pude hacer nada cuando ví la figura de un hombre joven abriendo las cortinas, me volví a desmayar

-¿por qué no me dijiste nada? -me dijo un poco molesto

-por que en ese entonces no estábamos juntos

-y aunque hubiéramos estado totalmente peleados y no hubiéramos hablado por meses algo así me lo dices…

-lo quería encontrar para matarlo -lo interrumpí, él me miró con sorpresa-

-lo ibas a… ¿matar?

-el trató de matarme a mí

-pero…

-de hecho -me separé de él y fui por algunas toallas- si lo encuentro y aún tengo algunos de mis poderes creo que lo haré… y si tuviera la oportunidad de matar a Minami…

-t/n -me dijo sabito pero yo continué

-también lo haria sabito -me giré a mirarlo, podía ver la preocupación en su expresión- estoy segura de que ella tambien tenia intenciones de que yo muriera, yo tengo las mismas intenciones con ella… ya no soy la misma que conociste hace años amor -le sonreí- quizá tuve que decirtelo antes de casarnos

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