Diario de una noble capitulo 3

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Como era de esperarse esta vez no me arregle para nada para encontrarme con él, no quería que se diera expectativas o que pensara que estaba intentando conquistarlo.

Al Mirar el celular leo el mensaje y al ver la dirección me doy cuenta de que era un restaurante francés, pero había mencionado que su reunión seria allí, así pensé que lo mejor era esperarlo afuera.

Espere 30 min y ya estaba perdiendo la paciencia de repente sale el señor Robert con un traje muy elegante y me ve afuera....

-¿Señorita Ana es usted?- dijo observándome de pies a cabeza

-Si soy yo, ¿por qué?, es ropa normal mejor dicho casual

-¿Estar un buzo es ropa casual? Acabo de salir de mi reunión y le pedí que venga al mismo lugar por ello pensé que se arreglaría para la ocasión, pero no me hizo caso, así no es como debería ver a mi futura esposa- dice refunfuñando- Me topa del brazo de repente y me jala-¡vamos!

-¿A dónde?- pregunte de repente

-A comprarte ropa- responde

-Por qué? Yo solo vine a hablar algo breve con usted...

-sí, pero ya reservé mesa en el restaurante y no puedo dejar que me vean a mí con una mujer que podría parecer mi sirvienta vestida así, recuerde que soy una persona importante y mi reputación me preocupa mucho, sino lo entiende puede darse la vuelta e irse y no lograra que yo la escuche en otra ocasión.

-De acuerdo vamos- dije molesta

Fuimos a una tienda cara y había muchos trajes formales, faldas, vestidos blusas, chaquetas, blazer, tacones. El me escogió un vestido rojo, ajustado, que resaltaba mi silueta con un blazer y tacones negros

Luego me llevo a la peluquería, en donde me hicieron un hermoso peinado.

Pasamos también por una joyería donde me compro un collar y aros a juego

Le dije que ya debíamos detenernos con este juego y salió de una tienda con un bolso de mano color negro.

-Ya gracias por las molestias, pero todo esto que acaba de comprar se lo devolveré señor robert, no era necesario tanta cortesía solo por venir con ropa casual-

-Señorita Ana, ¿puede dejarme consentirla? La verdad quería hacer esto, mas que por mi reputación quería verla vestida con algo que resaltará su belleza

Habrá más días en lo que nos reuniremos así que me anticipe a prepararla para la ocasión, no tiene q devolverme nada son regalos para usted.

-Señor Robert. ¿No entiende que no necesito sus regalos? -

-Está bien señorita Ana, sino es ropa ni joyas lo que quieres... ¿necesitas algo más?, pídelo y haré lo imposible por obtenerlo- dijo mirándola intensamente

-Si señor Robert hay algo que anhelo más que nada, quiero mi herencia- dije seriamente

-Eso no está en negociación- responde fríamente

-Necesito una explicación por favor- dije exaltada

-Está bien señorita Ana, ¿Qué quieres saber exactamente?, puedo responderte al menos dos preguntas hoy y las demás las contestaré en otra de nuestras citas ahora por favor entremos al restaurante

Vienen a tomarnos la orden

-Ya que usted pidió su plato señorita Ana ¿pensó en su pregunta? - dice Robert

-Si, ¿cuál es la verdadera razón porque usted desea casarse conmigo? - lo miró fijamente

-Por capricho, ¿algo más? - responde cortante

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