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—Tae... Taehyung...

Había algo en esa voz que suavemente murmuraba su nombre. Taehyung lo notó cuando solo bastaron un par de súplicas y suspiros para hacerlo sumirse en un sopor cálido y extraño. Aun si los grandes ojos castaños de Jung Kook ya no lo miraban, implorantes, sus labios seguían llamándolo y borrando lentamente el raciocinio hasta volverlo poco menos que una voz queda en lo más profundo de su mente. Precisamente esa que le repetía que no debía hacer aquello, cada vez más bajo, cada vez más leve.

—Muéstrame...

Taehyung dejó que la iluminación deficiente fuera su cómplice al extender una de sus manos y acariciar suavemente el cuello contrario, acunando su nuca en un gesto levemente posesivo.

—¿Realmente tienes tantos deseos de aprender? —susurró de vuelta y el pequeño asentimiento que recibió a modo de respuesta derrumbó aún más sus ya débiles defensas— Ah... —suspiró— ¿Qué será de tu inocencia si te muestro?

—No importa eso... —Jung Kook cerró sus ojos y se relajó en el tacto del humano, dejando caer suavemente su cabeza hacia atrás, inconscientemente disfrutando la calidez de su mano— Tú y yo, nadie más sabe...

—Eres más consciente de lo que parece —Taehyung sonrió—, al menos entiendes que es algo privado.

—Se siente como algo que solo es de tú y yo...

—Pues lo es... —Taehyung subió suavemente hasta enredar sus dedos en el cabello del tritón. Acercó su rostro, cerrando aún más el ya breve espacio entre ambos—. Se trata de hacernos cosas que se sienten bien... el uno al otro... cosas muy específicas...

—Quiero saber... —Jung Kook mordisqueó su labio inferior, ansioso— Hazme esas cosas.

Esas súplicas que casi sonaban como caprichosas órdenes, hacían más en Taehyung que cualquier palabra sucia o incitante antes escuchada por él. Bastaba con eso para encender su cuerpo y hacerlo bullir, era irreal en cierta manera, más allá de todo lo irreal que había en esa situación. Jung Kook conseguía enviarlo cada vez más lejos de la cordura y no podía realmente entender cómo.

—En serio... ¿No eres consciente de lo que estás haciendo? —Taehyung deslizó su agarre en el cabello contrario, pasando de solo tocarlo a acariciarlo, cerrando la distancia hasta que pudo rozar la nariz del tritón con la suya—. Hay algo en ti ahora mismo... que me está hipnotizando... puedo sentirlo...

—¿Y te molesta? —Jung Kook preguntó, sonando a la vez tentador y juguetón. El aliento de ambos se mezcló en el breve espacio entre sus rostros y para Taehyung fue tan difícil no sucumbir ahí mismo. Tan difícil...

—Ahora mismo no me molesta nada.

—Entonces ignora eso... solo hazme esas cosas que se sienten bien... tú también me haces algo... mi cuerpo —Jung Kook dejó salir un pequeño jadeo al pensar en la reacción que estaba teniendo con esa cercanía, con esos suaves roces.

—¿Qué le sucede a tu cuerpo?

—No sé —negó, suavemente rozando sus narices—. Es extraño, mi pecho aprieta... mi cuerpo hace cosquillas... pero es bueno... no quiero dejar de sentir.

—Pues... —Taehyung dejó que sus manos bajaran hasta sujetar su cintura, tirando de él hasta sentarlo enteramente en su regazo, cómodamente sobre él, todo lo cerca que dos cuerpos podían estar— te haré sentir más... —deslizó sus manos al unísono, lentamente recorriendo la piel del tritón, deteniéndose en el inicio de sus muslos, en una posición muy similar a la que habían tomado hacía un rato, cuando había descubierto aquellas piernas que ahora solo contribuían a hipnotizarlo aún más— Tú solo sigue diciéndome... sigue hablando...

📖 Scales | TaeKook (Adaptación) ࿐*:・゚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora