Burbuja que se rompe

74 4 0
                                    

A mis 14 años, no puedo creer todo lo que desencadena un cambio de escuela. Nuevos amigos, nuevo lugar, nuevas experiencias, todo es nuevo. Y eso me aterra, literalmente.

No me culpen, yo tampoco me imaginaba cómo iba a reaccionar ante tal cambio. Yo era una niña feliz, con un "mundo perfecto", con "amigos perfectos", notas perfectas, con un cuerpo poco perfecto, pero feliz. ¿Qué esperaban? Sentí que mi mundo se vino abajo.

Los primeros días fueron terribles, y dolorosos. Llenos de nostalgia y tristeza. No les miento, lloraba y luego estaba bien, y luego lloraba. Porque no me sentía cómoda, porque extrañaba a mis amigos, porque sentía que ese no era mi lugar, porque me sentía sola.

Pero, ¿saben qué? fue gracias a ese cambio que 1) Bajé de peso increíblemente rápido, 2) Conocí gente maravillosa, 3) Salí de mi burbuja "feliz". Expliquemos breve-mente:

  1) Y bueno... eso. No es tan difícil de entender ¡vamos! no comía, no tenía ganas de nada, la vida me parecía un asco. Sí, re exagerada yo.

  2) Sí, esa es la mejor parte <3 Si no hubiera sido por este cambio, no hubiese conocido a una persona estupenda llamada Carla <3 Sí, esa loca que ama pervertir gente pero que es una maravillosa persona que se ha ganado un lugar en mi corazón. Y es que es imposible hablar de ti sin insertar mucho corazoncitos <3 <3 <3 porque te quiero mucho, y te agradezco tu apoyo. Como te dije muchas veces, si no fuera por ti... el colegio no tendría sentido, hahaha. Tampoco puedo dejar de mencionar a Majo, últimamente eres muy especial para mí, gracias por ser como eres, por ser mi amiga. Te quiero.<3

  3) Cuando estás en los peores momentos, te das cuenta de quiénes son tus amigos y quiénes no. Creía estar rodeada de ellos pero no era así, y abrir los ojos duele. Es por esto que ahora veo las cosas con más cuidado, y trato de no ser muy confiada. Pero no por eso dejo de dar oportunidad a las nuevas personas que se acercan a mi vida. 

Solía creerme la persona más débil del mundo, la más tonta y la más insegura. Ahora soy un poquito menos de todo lo anterior.

¡Y eso es todo! Estoy orgullosa de mí, como tú debes estarlo de ti. Todos tenemos limitaciones que en algún momento saltarán a la vista, pero está en nosotros vencerlos. Y, créeme, huir no es la solución...


ConfusiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora