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Era de mañana y la reserva se encontraba tranquila, había gente disfrutando de la push, otros paseaban por el bosque dando vueltas dentro de el, mi hermano y yo nos encontrábamos en el taller, amaba pasar tiempo con el desde niña.

-Jacob de verdad no entiendo tu obsesión con ese motor- Dije mientras comía, últimamente tenía un poco más de apetito de lo normal.

-No lo entiendes por qué aún eres muy pequeña, te demostraré que puedo hacer que este motor va a ser veloz-

-Claro, si tú lo dices- Conteste mientras llevaba una papita a mi boca.

Ambos oímos la llegada de una camioneta, salimos para ver de quién era proveniente ese ruido, Bella Swan había llegado cargando algo en su camioneta, Jacob no pudo contener la emoción y salió corriendo para abrazarla mientras que yo me quedé en la puerta del taller viendo aquella escena.

-Émar- gritó Jacob -Saca las piezas para arreglar las motos-

Mientras Jacob y Bella pasaban el rato yo leía un poco hasta que note a Embry y a Quil entrando al taller, no dude en ir a saludarlos.

-Vaya que cada vez estas más hermosa y un poco más grande- Dijo Embry con un poco de coqueteo en sus palabras mientras que se colocaba mi lado para abrazarme por la cintura.

-Pero siempre serás la más enana de los cuatro- Quil a veces era experto en interrumpir los cumplidos que me hacía Embry.

- Bueno mientras que mi hermano y yo estamos cambiando ustedes parecen que no les vendría mal una manita de gato-

-¿Estás diciendo que somos feos linda?- Menciono Embry fingiendo estar dolido por las palabras que había dicho.

-No, tienes razón, ustedes necesitan una garra de tigre-

-Lamento interrumpir pero Sue llamó viene por ti en 5 minutos alístate- Me dijo mi hermano mientras fulminaba con la mirada a Embry y su mano en mi cintura.

-Claro Jake- Antes de entrar a la casa me despedí de los chicos con un abrazo, mientras que a Bella solo me le despedí de lejos. 

-Ya estoy lista- Grito mientras salía de mi habitación

-Que bueno, Sue ya está aquí, saluda a Harry y a los chicos de mi parte-

-Claro papá, nos vemos mañana-

Cómo era costumbre desde niños, los fines de semana me quedaba en la casa de los Clearwater, amaba pasar el tiempo con mi mejor amigo Seth, no quería admitirlo pero hace un tiempo Seth me ah gustado, obvio nunca le eh dicho ni le diré para mantener su amistad aunque no se por cuanto tiempo pueda mantener el secreto.

...

-Gracias Sue por traerme, Jacob estaba muy ocupado con Bella- 

-No hay problema cariño- Desde que falleció mamá ah sido como una madre para mis hermanas, Jake y para mi.

Al entrar en la casa el olor a galletas llegó a mi nariz, trate de llegar a la cocina pero unos brazos me detuvieron, el olor a canela con vainilla daba vueltas en mi mente ahora.

-Te eche de menos Seth- Dije mientras volteaba para abrazarlo y apreciar mejor su aroma.

-Igual yo te eche de menos Émar, ven mamá hizo tus galletas preferidas- Al llegar a la cocina vimos a Harry colocando las galletas en un plato y otras en un topper para mi papá y mi hermano.

-Que bueno que llegaste querida, Seth lleva las cosas de Émar arriba- Dijo mientras le daba a Seth mi mochila -Y llama a tu hermana para que baje-

-Claro papá-

-¿Aún esta mal por lo de Uley?- Pregunto con suavidad ya que no es un tema muy agradable, lo detestaba por lo que le hizo a Leah y por que parece que quiere llevarse a mi hermano a su grupo de idiotas.

-Si, pero hemos visto que mejora su estado de animo cuando vienes y pasan el tiempo juntas, aunque ay que admitir también que le cela que estén juntos Seth y tu, le recuerda cuando salía con Sam- No pude evitar que mis mejillas se enrojecieran un poco, en este momento maldecía que mi piel fuera un poco más clara que la de Jake ya que al parecer Sue noto ese enrojecimiento.

Llegaron ambos hermanos Cleawather, Leah me abrazo tan fuerte que sentía que se me salían los ojos. Pasamos todos la tarde entre risas, juegos de mesa y la exquisita comida de Sue, al final todos se fueron dejando nos a Seth y a mi, nos pusimos a ver una película mientras nos tapábamos con una manta que trajo de su habitación.

-Émar, ¿Tu te haz enamorado?- Esa pregunta me tomó de sorpresa

-Emmm si... ¿Y tú?-

-Si, pero creo que es solo es algo pasajero o algo así-

-Ouh ya veo-

-Supongo que es de Embry, ¿Verdad?, eh visto cómo te mira y del cómo lo miras a el-

Le iba a responder en ese momento pero llegó Leah a regañarnos y decirnos que nos fuéramos a dormir ya que el ruido de la tele y nosotros no la dejaban dormir, no tuvimos de otra que hacer lo que dice ya que no era nada bueno hacerla enojar menos si esta cansada.

RAMÉDonde viven las historias. Descúbrelo ahora