Libro

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- Ya no llores cabrón.

- ...

- Masachika, bonito, bebé, ya no llores.

- ...

- ¡Oye imbécil, deja de llorar! ¡Te trato bonito, lloras! ¡Te trato feo, lloras! ¡¿Cómo te ayudo entonces?!

Estaba metido en mi futón, y no estaba llorando por mi amor rechazado, sino porque estaba leyendo un libro romántico debajo de mi futón.

¡María Eugenia de las Mercedes nooOOOO!

- Oye, lo siento. No quise gritarte, solo dime qué pasa. ¿Cómo te ayudo?

- No puedes ayudarme'.

- Claro que sí, puedo darle una paliza por rechazarte si quieres.

- ¡No! ¡No lo hagas...!

- Ash, bien. ¿Puedo al menos amenazarlo?

- ¡Eso tampoco está bien! ¿Qué pasa contigo?

- Ya bueno, entonces...

- ¡Maldita sea contigo, Pedro! ¡¿Qué no ves que haces sufrir a mi María Eugenia de las Mercedes?!

Sanemi quitó el futón de encima de mí, alce la mirada con el libro entre mis manos mientras lloraba y me mostraba enojado con el inútil insensible de Pedro.

- ¿Qué?

- ...

Al otro día llegue a la finca mariposa casi muriéndome.

Recomendación del día: No lean un libro cuando Sanemi les está hablando, créanme.

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Este cap está corto nomás porque es una explicación breve para el siguiente, que será más largo y el final de la historia.

Datazo: Sanemi canónicamente puede leer, pero no escribir.

Recién me enteré y no se, me dio chiste saberlo xd

Miss_Sol29

Relatos de un cazador enamoradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora