Halloween

LA UNION

Cierro mis ojos al oír el disparo, el grito desgarrador de Arthit me hace abrir los ojos i mirar hacia él, ahora tiene sus dos piernas heridas. 

Las expresiones de Tomas y Ton no tienen precio, son expresiones que guardare en mi memoria.

- ERES UNA MALDITA LOCA – al oír como le gritan a Freen hace que me hierve la sangre, pero tengo que mantenerme tranquila.

Volteo a mirar a Freen, pero su mirada, no hayo expresión alguna, están vacíos, solo hay emociones llenas de enojo, desprecio, odio por ellos, en su rostro mantiene esa expresión fría. Pero yo sé que ella no es así, ella es un amor de persona, es dulce, amable, bondadosa con un corazón enorme. Si ella es un monstruo, es porque ellos la hicieron así, ellos son el problema no ella.

Inclina su cabeza levemente a la derecha, con una sonrisa siniestra plasmada en su rostro, me da una orden que gustosa cumpliré. Me desata de las manos y los pies, me da un cuchillo y me da la orden de clavarlo cuantas veces quiera en el abdomen de Ton Y Tomas, inmediatamente hago lo que me dice, ella viene detrás de mí con la pistola apuntándome a la cabeza. Cuando estoy enfrente de ellos dos, no lo pienso dos veces, dos puñaladas a cada quien. Me regocijo al escuchar sus gritos de dolor.

Freen me abraza por detrás, con su brazo izquierdo rodea mi cintura, y con su mano derecha baja el cierre de mi vestido, dios esto es tan excitante para mí, ella besa mi cuello, le doy libertad de que ella bese cuanto quiera, después siento como sus besos bajan por mi espalda. Cuando termina de besar y disfrutar, ella me recuesta en el piso, no me importa mancharme en el rio carmesí, ella se posiciona encima de mí, me mira a los ojos.

- Te amo – murmura cerca de mis labios, para después besarme, es un beso feroz, hambriento, tosco nada delicado, yo trato de corresponderle al beso, siento como sus manos recorren mi cuerpo, siento que mi libido aumenta.

- NOOOO, DEJALA EN PAZ, NO LA TOQUES – grita enfurecido Arthit, por los dioses él ya me tiene arto.

- Acaba con el mi amor - le digo a Freen en su oído, solo para que ella escuche. Ella me mira a los ojos para ver si estoy realmente segura.

- Si es lo que quieres lo hare – a regañadientes se levanta – vigílalos amor – me dice en un tono fuerte y claro.

Mientras ella camina a la salida, volteo a ver a Arthit, me divierte la expresión de su rostro al igual que el de los dos restantes.

- No, no, tu no Becky, no puedes estar con ella- apenas y puede hablar por el dolor – dime que ella te obligo, ¡DIMELO! –

Solo puedo observarlo, no quiero responder, Freen no tarda en llegar con Heng y otros hombres seis hombres más.

- Llévenlos, ya saben dónde – ordena Freen. Ellos inmediatamente sacan a los hombres del sótano – cariño no es necesario que vengas – en su mirada de Freen se nota la preocupación que siente por mí.

- No te preocupes cariño, deseo ver esto – decido mirarla directo a los ojos para que sepa que no miento. Ella solo me observa para después tomarme de la cintura y me guía a las afueras de la casa, en donde el espectáculo final se llevará acabo.

La noche ya ha caído, por lo cual las luces de los jardines nos iluminan el camino hacia el laberinto que ha sido preparado especialmente para este día.

Al llegar allí los hombres sueltan bruscamente a los chicos, apuntándoles cada uno con un arma en la cabeza, Freen camina para estar al lado de ellos. Su mirada tiene ese brillo especial que desde hace mucho no le había visto.

- ¿Están listos los perros? - pregunta a Heng

- Si mi señora, ellos esperan para ser alimentados- inclina su cabeza al hablar.