𝗉𝗋𝗈𝗏𝗈𝖼𝖺𝗍𝗂𝗏𝖾 ♡⃕ 𝗄𝗈𝗈𝗆𝗂𝗇 ﹙𝖼𝗈𝗆𝗉𝗅𝖾𝗍𝗈﹚

Capítulo O8.

Jimin abrió los ojos sintiendo una pequeñas manitas tocando su rostro. Una sonrisa se pintó en sus labios cuando el pequeño cuerpo gordito corrió lejos entre risas.

El menor se levantó rápidamente de la cama y corrió detrás del pequeño cuerpo gordito. La risa resonaba en toda la gran casa con paredes color crema.

La sonrisa de Jimin era tan grande que podía sentir sus mejillas doler. Era un sentimiento genuino.

Estiró sus brazos para atrapar al bebé que corría entre risas y gritos. no tenía más de dos añitos.

—" ¡Papá!"

Gritó el bebé corriendo a los brazos de un hombre, la vista de Jimin era cegada por la luz reflejada y no podia ver el rostro del contrario.

—" ¿Bebé acabas de despertar a mamá de nuevo? "

El hombre besó las mejillas del infante y entonces en castaño reconoció su voz. La luz dejó de cegarlo y pudo verlo.

JungKook estaba ahí cargando al bebé y para Jimin se sentía tan familiar y normal el verle así.

Se acercó lentamente hasta estar rodeado por los brazos del pelinegro quien le susurraba disculpas entre sollozos.

Jimin no entendía por qué se disculpaba, no tenía sentido que lo hiciera. Tomó las mejillas del mayor y lo besó con amor y dulzura.

Sonrió mirándole con tanto cariño que podía sentir su estómago reclamarle por toda la dulzura.

Unas manitos se aferraron a su camisa y el menor rápidamente llevó su mirada. El bebé era precioso. Cabello negro azabache, sus ojos eran los mismos que los de JungKook pero definitivamente tenía la sonrisa de Jimin.

Los ojos del castaño se llenaron de lagrimas con solo verle sonreír hacia su persona. La pureza de su ser era palpable.

Jimin no entendía por qué lloraba al ver a su pequeño hijo. El pequeño lo miraba con tanta adoración, como si hubiera sido testigo de su propio nacimiento.

Jimin sintió su piel tibia y rápidamente lo apretó contra su pecho sollozando con fuerza. Se sentía feliz y pleno.

—" Mamá "

La manito del infante se posó sobre su mejilla y Jimin apoyó su rostro sobre esta.

— Hijo mío, mamá está aquí.

Susurró besando la frente y las mejillas del bebé, causando que este riera.

Toda la casa se llenó con la risa del bebé causando un sentimiento tan grande en el corazón del castaño.

— Está volviendo, otra carga enfermera.

Se escuchó una voz a lo lejos, pronto la hermosa casa que Jimin compartía con su familia se volvió una habitación blanca de hospital.

Abrió poco a poco sus ojos sintiendo un dolor agudo en su cabeza. Dejó escapar un suspiro y cayó nuevamente rendido, estaba agotado.

Por otro lado JungKook estaba comiéndose las uñas de los nervios y el miedo que sentía, todo esto era culpa suya.

Si hubiera decidido irse con Jimin y dejar de lado todas esas estupideces tal vez el menor estaría durmiendo entre sus brazos en este momento.

La culpa lo carcomía por dentro. Se lamentaba de todo menos de enamorarse de ese precioso doncel que rompía todos los moldes.

La noticia del embarazo de Jimin lo pusieron eufórico, quería comerselo por completo a besos mientras le agradecía por hacerlo tan feliz.

Pero no pudo, la situación estaba tan tensa y al borde del colapso, no podía solo hacer eso ignorando todo el maltrato que Jimin estaba sacando a la luz.