Mí destino siempre fue salvarte

capitulo 5

•Capitulo 5

Las clases siguieron su curso luego de que Shinwu fuera regañado y al parecer ante mi sorpresa era algo normal.

El profesor explicaba algo que para mí era demasiado fácil gracias a mis habilidades así que decidí no prestar atención. Y practicar Matemáticas que, aunque ahora ya no eran tan difíciles para mí, después de llevar 2 años en el mundo humano aun había cosas que no entendía del todo.

El profesor notó que no le estaba prestando atención así que me dijo que me pusiera de pie y relatara todo lo que decía la página 46 del libro.

Lo miré y luego a los demás estudiantes que tampoco dejaban de mirarme expectantes, me puse de pie y empecé a relatar todo lo que decía, no fue para nada difícil, pero todos me miraron como si hubiera hecho algo de lo más sorprendente del mundo.

—Manejas muy bien el idioma por lo que puedo notar —Me habló el profesor en inglés.

—Es un idioma universal —Me excuse al no saber qué más decir.

—¿Sabes hablar otros idiomas? Claro, aparte del inglés y tu idioma natal.

—bueno no muchos, yo diría que son 3, el idioma de aquí aun me cuesta, pero ya lo estoy dominando—dije restándole importancia.

El profesor me miró sorprendido, al parecer quería decir algo, pero al parecer no tuvo el coraje de hacerlo, aparte que retrasaría las clases.

Una hora después pude notar que Raizel miraba cada tanto lo que yo hacía, no sabía porque, pero supuse que tan solo era curiosidad y ¿si no era por eso? . Entonces ¿Por qué?, decidí no imaginar cosas innecesarias y solo preguntar.

—¿Pasa algo? —me atreví a preguntarle, ya que literalmente no me sacaba los ojos de encima.

Raizel parecía avergonzado y dejó de mirarme, pensé que él era otro tipo de persona, pero ver esta parte de él que obviamente no conocía me alegraba un poco, Después de todo no puedes confiar en otras personas, tienes que descubrirlo tú misma.

—Raizel, ¿Quieres hacer lo mismo que yo? —le pregunté.

Él me miró y no pude evitar reír bajo. Saqué un cuaderno extra que siempre llevaba conmigo y se lo di.

Le enseñé lo más básico y simple, él entendió al instante y no pude evitar sorprenderme al notar lo rápido que aprendía. Él parecía fascinado sobre el tema, me causó mucha ternura así que seguí explicándole hasta llegar a algo más complejo, pero aun así sin alejarnos de lo básico.

Llego el receso, y mientras él seguía practicando yo solo leía un poco, pude notar a Shinwu mirarnos y cuando lo miré el voltio la cara. Voltee a mirar a todos y note que en las puertas había tanto chicas como chicos mirándonos, para mí no era nada nuevo ya que había experimentado cosas parecidas, les sonreí y todos parecían querer desmayarse así que decidí seguir leyendo y no prestarle mucha atención a nadie.

Cuando empezaron las clases nuevamente Shinwu parecía muy incómodo y molesto por algo, pero nadie le prestó mucha atención y si era normal entonces yo tampoco lo haría.

Raizel tomó atención a la clase de Matemáticas que nos tocaba, pero parecía muy confundido y no lo culpaba, yo había estado igual los primeros meses cuando por primera vez estudié sobre esta materia.

.-.-.-.-.-.Unas 2 horas después en la oficina del director.-.-.-.-.-.

Toca.

—director.?

—Adelante.

—Disculpé, —dije mientras entraba en su oficina junto con Raizel —no sabía qué hacer y él me ofreció venir a tomar el té con ustedes, lamento si mi presencia es algo molesta.

—No, si la ha traído aquí es porque así lo quiso y usted no molesta señorita Lombrad.

—enserio?, muchas gracias por aceptar mi presencia director.

—¿Y qué tal las clases?, cómo les fue a ambos. —dijo mientras nos servía té a ambos y luego tomaba asiento.

—Fue una nueva experiencia, nunca había tocado ese tipo de temas, pero he de admitir que, gracias a su excelente explicación, he podido aprender muy bien.

—Qué bueno que haya sido así y que tal le fue a usted.

—Al parecer tengo un problema.

—¿E-Eso... de que se trata?

—.... —Yo solo me limité a tomar mi té mientras sentía curiosidad, ¿de qué estaba hablando? ¿Problema de qué? ¿Él se encontraba mal? ¿Como no lo había notado?

—Fue en la clase de matemática.

—Matemática...

Creo que el director, el fiel sirviente de Raizel estaba pensando igual que yo cuando vi su expresión, "es obvio que no entiende las complejas operaciones aritméticas y ecuaciones matemáticas..."

—Lilian D. Lombrad me ayudó un poco.

—¿Es así? Eso es bueno, le agradezco mucho.

—No me agradezca, yo solo vi que le interesaba lo que hacía y por eso lo ayudé.

Y con eso dicho, pase mi receso con ellos dos, en esa oficina donde los tres tomamos el té en un silencio cómodo y agradable, me gustaba la tranquilidad que ese lugar podía ofrecerme.