MÍ zona.

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Cap. 2

Narra Horacio


Aquel hombre se había ido.

Me acerqué a mi hermano, el cual había guardado el botiquín, o, como nosotros lo solemos llamar, el B.T.N, en su sitio.

-Gusnabo...- le llamé, este rápidamente, se tiró hacia mi-

-Qué pasa, caranabo?- me respondió felizmente-

-Esta ciudad me da miedo...- le dije abrazándolo, me devolvió el abrazo junto unos golpecitos en la espalda-

-Ea, no te asustes, es normal; acabamos de llegar después de lo que pasó en la otra. Tranquilo- me dijo reconfortandome, sacó unas chuches de su bolsillo y me las acercó-

-Vale... gracias, te quiero- le dije agradecido, cogí las chuches y me senté en una caja aplastada y la abrí-

-Yo también te quiero osito- me dijo mientras volvía con su trabajo; limpiar-

Hacía ya dos días que habíamos llegado a la ciudad. No teníamos nada porque queríamos comenzar una vida nueva por unos problemas que nos habían ocurrido.

Llegamos a este lugar y construímos un pequeño refugio, allí, encontramos al pequeño Muffin, el gatito marrón claro con ojos azules.

Comencé a comer de aquella bolsa de chuches mientras mi hermano limpiaba.

Cuándo las acabé, me levanté y comencé a limpiar junto a mi hermano, Muffin dormía plácidamente en su cama junto a sus ronroneos.

-Ya está Gusnabo, hemos acabado esta zona!- le dije mientras ponía mis manos en la cintura, orgulloso-

Este solo rió levemente mientras negaba con la cabeza. Se acercó a mí.

-Si, hemos acabado, cara polla- me respondió revolviéndome el pelo-

-Vamos a dormir? Se ha hecho tarde...- dije mirando al cielo oscuro-

-Claro, tira pesao'- me empujó hacia la casa, tiró su chaqueta al suelo y me acostó en esta con empujones-

-Oye! Que puedo yo solo, eh- le dije enfadado-

-Si si, claro...- me respondió gracioso- Venga, a dormir- se acostó al lado mía bruscamente, haciéndose un poco de daño-

-Cuidado gilipollas! Que te haces daño!- le dije mirándolo-

-Que no coño- se apoyó en el montón de trapos viejos dejando un espacio para mí, lo palmeó-

Rodé los ojos y me acosté. Me acerqué a él y le abracé, me devolvió el abrazo y nos fuimos a dormir acurrucados.


...


Unos ruidos me despertaron, al abrir los ojos, mi hermano no estaba allí, me pareció raro, pero luego recordé que Gustabo tenía el sueño ligero y se despertaba incluso con solamente el sonido de un grillo, la vida le enseñó a ser así, o eso me decía él. Al contrario que a mí; yo tenía un sueño bastante pesado.

Me giré y vi a mi hermano con su bate mirando hacia el final del callejón.

Miré hacia aquella dirección y no vi a nadie.

Me levanté y acerqué a mi hermano, le toqué el hombro.

-Que pasa?- le pregunté-

-Sh...- me silenció, ladeé la cabeza, confundido- Hay alguien allí, he escuchado unos ruidos- me dijo en voz baja, otro ruido de pisadas se escuchó cerca del callejón- Mierda, Horacio, vete para atrás y escóndete- me dijo poniéndose en alerta, se puso en modo de defensa atento a cualquier cosa-

Another time?⚠︎(No es Gustacio)⚠︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora