팔 - 8

296 56 22
                                    

—Capitulo Ocho—

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Capitulo Ocho—

Las chicas esperaban en el aula, ciertamente impacientes, por la llegada de la profesora. Las otras parejas se habían tomado más tiempo para completar sus lienzos, por lo que no habían podido presentar sus pinturas el día anterior. Mientras esperaban, observaban con curiosidad como los lienzos habían sido cubiertos por la profesora con una fina tela.

Faltaba la castaña, quien aún no había llegado al salón. En ese preciso instante, la puerta se abrió y ella entró con paso decidido. Sus compañeras la miraron con curiosidad mientras se dirigía directamente al escritorio de la pelinegra y dejaba una botella de jugo de durazno sobre él;La chica quedó sorprendida ante el gesto inesperado, sin saber como reaccionar y antes de que pudiera decir algo, la castaña tomó asiento a su lado. En ese mismo momento, la profesora Im entró al aula, captando la atención de todas las estudiantes.

La profesora Im se colocó frente a la clase y dirigió una sonrisa hacia sus alumnas. —Hoy vamos a mostrar los lienzos que trabajaron ayer.— Anunció con calma. —No tendrán que explicar por qué pintaron lo que pintaron; simplemente dejaremos que cada una lo interprete a su manera.—

Las chicas asintieron, algunas con nerviosismo palpable y otras con una expresión de curiosidad en sus rostros. La mujer procedió a llamar a las parejas una por una.

La primera pareja reveló su lienzo, que representaba un hermoso jardín, con colores vibrantes y detalles delicados. Las estudiantes intercambiaron miradas y murmullos, tratando de descifrar los significados detrás de las pinceladas.

Otra pareja mostró una escena marítima:olas tumultuosas rompiendo en la costa y un faro solitario en la distancia. Las interpretaciones de sus compañeras fueron diversas, reflejando desde un sentido de esperanza hasta una lucha interna.

Finalmente, llegó el turno de la pareja principal. La castaña y la pelinegra se levantaron, sintiendo las miradas curiosas de todas sus compañeras. Con un gesto decidido, retiraron la tela que cubría su lienzo.

Del lado izquierdo, pintado por la castaña, predominaban los tonos cálidos y brillantes. Una figura femenina estaba de pie en medio de un bosque otoñal, rodeada de árboles con hojas doradas y anaranjadas. La figura parecía parcialmente girada hacia el lado derecho, como si estuviera intentando avanzar, pero algo la detenía.

En el lado derecho, pintado por la pelínegra, los colores eran oscuros y sombríos. El paisaje mostraba un bosque invernal, con árboles desnudos y cubiertos de nieve. La figura femenina en este lado estaba envuelta en sombras, con un rostro que reflejaba dolor y resistencia, mirando hacia la figura del lado cálido.

Entre las dos figuras, en el centro del lienzo, había un camino estrecho y rocoso que conectaba ambos mundos. El contraste entre los colores cálidos y fríos era marcado, pero había un punto donde ambos se fusionaron, mostrando una transición difícil pero posible.

Las adolescentes observaron en silencio, algunas inclinándose hacia adelante para captar cada detalle. La profesora Im asintió con aprobación, permitiendo que la interpretación quedará abierta, sin añadir una palabra más.

El mensaje del lienzo era claro para algunas, pero ambiguo para otras: una lucha interna, un camino hacia la reconciliación, o tal vez un reflejo del resentimiento y el entendimiento que aún se desarrollaba entre las dos chicas;La interpretación quedaba en manos de cada observadora.

Después de la presentación, las miradas de las demás chicas se volvieron hacia la castaña y la pelínegra, esperando alguna explicación, sin embargo, ambas chicas permanecieron en silencio, permitiendo que la obra hablara por sí misma. Algunas de las alumnas murmuraban entre ellas, tratando de descifrar el significado detrás de los colores y las figuras contrastantes.

La profesora Im rompió el silencio con su voz serena. —Gracias, chicas, su obra es fascinante.— Comentó, con una mirada que alternaba entre orgullo y curiosidad. —Ahora, sigamos con la siguiente pareja.—

La castaña y la pelinegra se sentaron nuevamente, compartiendo un breve intercambio de miradas cargadas de significado. Aunque no habían hablado explícitamente sobre el significado de su obra, ambas entendían el mensaje implícito. Era un reflejo de su propia relación:una mezcla compleja de conflictos y momentos de conexión.

Mientras las otras parejas mostraban sus lienzos, las dos chicas se sumergieron en sus propios pensamientos. Sooji se sentía ligeramente sorprendida por la decisión de la castaña de dejar el jugo de durazno en su escritorio esa mañana, un gesto que aún resonaba en su mente. Por otro lado, Harin se preguntaba si había interpretado correctamente la reacción de su compañera al recibir el jugo.

Al final de la clase, la profesora Im anunció que al día siguiente se realizaría la inspección de las pulseras de la convivencia a primera hora.

Importante: Más al rato estará el otro capítulo listo, y también lamento no haber actualizado el jueves, pero estuve fuera todo el día porque  me celebraron

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Importante: Más al rato estará el otro capítulo listo, y también lamento no haber actualizado el jueves, pero estuve fuera todo el día porque  me celebraron.

𝑇ℎ𝑒 𝐺𝑎𝑚𝑒 𝑂𝑓 𝐿𝑜𝑣𝑒 / 𝐻𝑎𝑟𝑖𝑛 - 𝑆𝑜𝑜𝑗𝑖 /Donde viven las historias. Descúbrelo ahora