Kny y Tú

9

— (Tiene sentido que intente atacar en cuanto la gente no tenga posibilidad de visión, pero...si los "pilares" son comparables a una luna "inferior", supondré que los pilares son como los más fuertes...o algo así. No soy buena en esto) —desvió la mirada activando el infinito— Que cansancio...los lentes no son suficientes, Dios...

— ¿Qué estás cuchicheando? —todavia desconfiado— Una luna superior generalmente equivale a la fuerza de tres pilares, ¿lo sabías...? Eso te haría alguien de su calibre. ¿En serio crees que te creeré? —poniendo unos ojos de juicio—

— Bueno...no sabía eso. Supuse que los pilares eran los más fuertes por su nombre, pero...meh, qué más da —alzo los hombros— Vamos, te espero —sonreía confiada—

— Hm...(Concentración total)...

• Parpadeando brevemente, el pilar desapareció de la vista de Mei, sorprendiendo a la misma en gran medida. No había superado su velocidad de reacción, pero sí había aprovechado a la multitud para esconderse.

Atacaría por sorpresa... •

— (Es de igual manera rápido...)

— Ni tanto. Es porque aún estás controlando tus técnicas, pero pronto superarás con creces el poder de ese demonio —decía entrando a la conversación— Este tipo...no parecía gran cosa porque había peleado conmigo, pero parece que no lo es. Es inteligentemente idiota —se burló—

— (Que orgulloso...que no se te olvide que yo te superaré en algún momento) —mirando al alrededor cerrando los ojos— (No tiene energía maldita, así que no puedo sentir su presencia...tengo que esperar a que ataque; tengo que quedarme quieta con el infinito) —pensaba convencida—

• Por abajo de ella, aún en frente, apareció el chico en cuál en tono de estocada, golpeó el ojo izquierdo de la albina. Al tener activado el infinito, claro está, nunca llegó a dañarle absolutamente nada •

— Jajaja... —reía al haber apenas reaccionado al pilar— ...¿Ves que no soy cualquier cosa? —apartando el filo de la hoja, la mirada del peli-negro se escondía entre su pelo—

• De confiada, había desactivado el infinito. Por otro lado, el hombre musitaba unas palabras inaudibles para la chica.

A sus espaldas, un albino chico caía con espada en mano. Con gran fuerza y velocidad atacandola de frente •

— Oh... —la espada de detuvo antes de tocarla, a milímetros de su ojo— ...Oye...venías acompañado, eso cuenta como trampa —sorprendida— ...

— Aah~ así que era verdad —exhaló el recién llegado— Tomioka... —alzó una terrorífica sonrisa— ...Esta chica es un monstruo.

— (¿¡Eeh!? ¿A quién llama monstruo con esa sonrisa...?) —con cara de poker...— Hnh...¿sabían de mi infinito? —preguntó con una gota de sudor cayendo de su mejilla—

— El patrón mencionó sobre eso, y del por qué quiso hacerte su aliada. Los cuervos kusagai han estado vigilando tus movimientos durante este último tiempo —imponiendo más fuerte en su estocada— Shinazugawa.

— ¡Claro, lo sé! ¡Es imposible tocar a este demonio! —emocionado gritaba el mencionado—

— ...Es inútil...no podrán tocarme, se-

— Nos volveremos más lentos conforme más nos acerquemos —terminó de hablar Tomioka— El cuervo kusagai también escuchó eso (!)

— Entonces...supongo que habrá visto mi pelea con ese demonio —anonadada se le caían los lentes—

— ¡El patrón no nos dijo nada sobre eso, maldita mentirosa! —aún sonriente decía el albino—

— ¿Y tú quién demonios eres? —arrugó el seño— Ni crean que voy a desactivar el infinito en esta situación. ¿Me quieren de aliada o me quieren matar? —cerrando el puño con fuerza— (Ya me hartaron...)