Kny y Tú

10

— ¿Hm? —Sukuna, en su espacio imaginario veía hacia un rincón de la manifestación de su dominio— ¿Quién está ahí? (!)

• Puso una cara seria, ya que sintió una energía maldita positiva imbuida en armas potencialmente peligrosas para cualquiera.

¿Se lo imaginó acaso? Poco probable contando que su instinto, tan agudo como intimidante, pocas veces ha fallado  •

— Oooh~ —abrió los ojos sonriente, con un sentimiento de emoción en su interior— Ya entendí el juego...tal parece ser que tú también estás aquí, ¿verdad, general divino...?

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• Mei se disculpaba repetidas veces con Giyuu, aceptando la culpa y llorando cómicamente a su vez que la presencia tranquila de un hombre se iba acercando más y más •

— Escucha, mocosa...muestra espero hacia el patrón, él es quién manda aquí —habló Sanemi— Si llegas a hacer alguna otra estupidez...

— No te preocupes, no fué mi intención...(fué exitante de alguna forma...o extasiante) —sopesó ella, redondeando sus ojos— Hasta yo misma me sorprendí, lo lamento, ¿sí? —rascando su nuca en forma de vergüenza—

— Tck...solo no seas un estorbo —tranquilizando sus sentidos le decía, arrodillándose lentamente hacia el patrón—

— Mei —el peli-negro le llamó la atención, mientras repetía la acción de su compañero— Tranquila... —intentó calmarla levantando el pulgar con una pequeña sonrisa impasible— ...

— (Creo que puedo tranquilizarme. Mi infinito está en automático) —se dijo a sí misma— (Aunque este hombre...no me da una sensación extravagante, ni mucho menos me da miedo) —veía a los ojos a aquel hombre parada frente suya como si nada—

— Mei Gojo, ¿verdad...?

— C-Claro, soy yo —algo nerviosa—

— ¡Idiota, más respeto! ¿¡Qué es eso de "c-claro, soy yo"!? ¡Se dice "presente mi señor"! —en voz baja y con cómica cara 'gritó' el albino—

— ¡Perdón, don llorica! ¡No sabía que el hombre tenía eco! —gritó de vuelta (en voz baja)—

— (¡Esta hija de...!)

— Sanemi...

— Patrón —tomó postura rápidamente—

— No seas descortés con la invitada...estoy seguro de que ella será escencial en un futuro —tranquilo— ...

— Lamento mi comportamiento, comandante general —se disculpó sinceramente— Sin embargo, ¿cómo podemos confiar en una humana que altera toda lógica con solo su presencia aquí...? Tiene técnicas destructivas y una segunda personalidad malévola dentro de ella —muy serio alzó la vista— Sugiero que antes de cualquiera cosa, probemos su fidelidad.

— Si te sientes seguro con eso, mantente tranquilo, haremos eso a su debido tiempo, Sanemi —sonrió cálidamente—

— ...Gracias, comandante...

— ... —ella miró al "patrón"— No quiero ignorante, ¿sabe? Me gustaría saber qué está pasando, de buenas a primeras. He escuchado mucho la palabra "demonio"; ¿qué hay con eso? —preguntó frunciendo los labios—

— Los demonios...de buenas a primeras, me presentaré, Gojo Mei —dijo con voz relajante— Mi nombre es Kagaya Ubuyashiki; jefe de la compañía cazademonios —reveló—

— ¡Ooh! ¡Así que sí que existían...! (Eso quiere decir que este tiempo no es el mío. Es uno diferente) —aquellas palabras habían captado la atención del hechicero—