Prologo: El Arquero

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Estaba más concentrado en este momento, que en toda mi vida. Solo yo y mi objetivo. Mi acción no se debía a la memoria muscular, ejercitada por años de entrenamiento, sino por una mezcla de puro instinto, habilidad y gran concentración.

Entre la diana y yo había como treinta metros de distancia. Algo justo y agradable.

Contuve la respiración, mi postura se estabilizó, mis pies se pusieron tan firmes que la tierra parece haberlos tragado. Tensé la cuerda del arco hasta su limite. Si la tensaba más, la cuerda se saldría y lastimaria mi cuerpo; si la tensaba menos, la flecha no llegaría muy lejos.

Mucha gente piensa que usar un arco es como una pistola y que la diferencia es la cantidad de disparos. Falso, la diferencia es la fuerza para sostenerlos, la capacidad de puntería y el peso de las cargas.

También la resistencia al viento es un inconveniente, pero no nos preocupemos por eso.

Hay una gran diferencia de peso entre una flecha y una bala. Así como los arcos y las pistolas. El peso de una pistola cargada es grande (el cargador, las balas y la maquinaria interna) y el peso del arco depende del material.

Aunque la velocidad es bastante distinta. Las velocidad de las balas es como compararlas con un rayo, nunca sabrías cuando te golpeo; y las flechas a cierta distancia podrías verlas venir.

El tutorial de las diferencias puede esperar. Regresando, el mundo se estancó; mi única preocupación era la diana en mi visión.

¿Seré capaz de darle? Mi pregunta fue respondida cuando volvi a respirar. Con mi primer suspiro nuevo, la flecha alcanzó su objetivo.

"Si todavía estuvieras en el equipo, abriamos llegado a las nacionales." La voz de una mujer se aproximo a mis oidos. La actual capitán del Club de Tiro con Arco, Mitsuzuri Ayako.

Una chica guapa, cabello castaño hasta la nuca y ojos que buscaban un reto. Vestida con el conjunto clasico de Tiro con Arco (Keikogi¹, Muneate², Hakama³, Obi⁴, Tabi⁵ y Zori⁶).

"¡Eso, chicos, es un experto innato para el Tiro con Arco!" Ella les grito a los demas miembros del club. No entiendo lo que quiso decir con eso.

"¡No le crean! No soy un experto.

"... ¡Y ademas humilde!" Ella ignoro mi comentario sobre mi habilidad.

Lo que dije era verdad, no soy un experto. Solo tengo una habilidad que cualquiera podría tener en este mundo.

"A propósito Yoshi-kun" Mitsuzuri-san dirigió su mirada y su cuerpo hacía mi, como intentando seducirme. "¿No considerarias regresar al club?"

"No gracias, y tu sabes porque." Ante mi respuesta ella gruño.

No es porque yo fuera demasiado bueno, sino porque había terminado con el tendón de mi brazo izquierdo (el brazo con el que sostengo el arco) lastimado por el error por un idiota.

Tuve un yeso por unos tres/cuatro meses, mi único deseo fue volver a tirar un arco. Me entretuve con novelas ligeras, novelas visuales y videojuegos para mantenerme cuerdo.

"Qué recuerdos. Sino encontraba entretenimiento me darian sedantes para calmar a la Bestia. Después de todo era mi último año allí."

Por alguna razón, odio las armas de fuego. Siento que le quitan la diversión a la acción. Las armas antiguas: espadas, lanzas, hachas, arcos. Las únicas armas de fuego por las que tengo aprecio son los revolvers y mosquetes.

Debo aceptar que el tiempo de recarga es bastante excitante.

Luego renuncie al puesto de Capitán que me ofrecieron y con ello al Club, luego empecé a trabajar en un izakaya⁷ como cocinero y, cuando era necesario, como camarero.

El Registro del Héroe del ArcoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora