𝐑𝐡𝐚𝐞𝐧𝐲𝐫𝐚 𝐓𝐡𝐞 𝐂𝐫𝐮𝐞𝐥

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Una semana había pasado desde que la princesa se encontraba en Driftmark cuando el rey envió una carta pidiéndole que regresara inmediatamente. Ya que según sus palabras era un asunto urgente.

-gracias por invitarme a su castillo Lord Corlys. Sin duda ha sido una semana maravillosa- Rhaenyra se encontraba lista para partir junto a sus damas. La familia velaryon se encargó de acompañarla hasta el puerto para despedirla.

-gracias a usted por venir princesa, siempre es un honor tenerla en mis tierras- el hombre sonrió y vio como su esposa se acercaba a la platinada y le daba un suave abrazo.

-sabes que eres bienvenida cuando sea sobrina. Todos estaremos muy felices de recibirte y a tus amigas- rhaenyra sonrió alegremente prometiendo que los visitaría tan pronto como pudiera.

No muy lejos de ellos se encontraba la joven Arryn despidiéndose de Sir Leanor con un fuerte abrazo y un pequeño puchero.

Las otras muchachas solo reían al ver cómo el velaryon sonreía y trataba sin poder lograrlo quitársela de encima.

Era el turno de Laena de despedirse -hasta pronto nyra- le dio un fuerte abrazo y susurro en su oído -prometo tenerte informada de todo lo que pase con Daemon- luego de eso se separaron y se dieron un pequeño beso en el cachete.

La princesa junto a sus damas partieron hacia Kings landing con syrax al frente.

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-esto es ridículo, por que le pidió que regresara? Estamos mucho mejor sin esa niña aquí-

En la fortaleza Roja se encontraba una no muy feliz reina por en regresó de la princesa. Refurfullando y maldiciendo el nombre de su esposo por enviar una carta a su hija.

-es su copera alicent y sobre todo es su hija, Viserys a demostrado tener debilidad por ella. Es obvio que la quiere junto a él- su padre. La mano del rey trataba de calmarla sin éxito, asiendo que con sus palabras su ira solo crezca más.

-le he dado tres hijos, tres! Dos herederos y una hija. Y aún así se atreve a ignorarlos y poner toda su atención en la malcriada de rhaenyra- el rostro de la mujer se encontraba rojo de la furia dando vueltas por toda la habitacion. Hasta que tocaron la puerta.

-mi reina disculpe la interrupción pero me han informando que la princesa ya se encuentra en el castillo- dibujo una pequeña sarcástica en sus labios.

No iba a dejar que esa niña aruinara su paz...

-gracias por informarme myrella. Ahora vete- Otto se levantó de su asiento y miro a su hija -será mejor que vayas a recibir a tu hijastra y no intentes nada frente a tu esposo que pueda causar una pelea entre ustedes-

-lo se padre, la trataré amablemente frente al rey y en privado le haré su vida miserable- término de decir con una pequeña risa y salió de los aposentos para buscar a su esposo.

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Al llegar al castillo Rhaenyra dejó a sus amigas y se dirigió al solar de su padre donde la esperaba ansiosamente.

-Ser Harrold- al llegar donde su padre se encontró con su protector en la puerta.

-mi princesa. Que alegría verla de nuevo aquí- el hombre sonrió mientras hacía una pequeña inclinación -su presencia nos a hecho mucha falta-