Me desperté de la pequeña siesta que había hecho, o eso creí hasta que me dijo Omar que dormi nada más ni nada menos que 7h seguidas, algo que ni siquiera sentí ya que el tiempo se me pasó volando.
Faltaba 1h para aterrizar, y evidentemente tenía hambre.
-Omar tengo hambre-
- Cómeme-
Ya empezamos con sus bromitas.
El llamo a la azafata la cual nos trajo un menú con muchísima variedad gastronómica.
- Que vas a pedir cariño- pregunto Omar
- Que es lo que no te ha quedado claro de, no me llames así-
- Pues le llamaré con apodos cariñosos a otra-
- No te atreveras-
- Tienes razón, no lo haría por nada del mundo, yo solo te quiero a ti-
- Últimamente estas como que muy cariñoso, ¿No crees?- pregunte algo sorprendida ya que antes Omar era muy seco, borde y distante conmigo
- No se, tu me haces ser así, es algo que solo tu puedes y causas en mi-
Si seguía con ese tema de conversación acabaría roja y nerviosa así que simplemente le sonreí y pedí específicamente lo que quería comer.
Filete de ternera con patatas y una salsa la cual acompañaba el plato, pero no tengo ni idea de como se llama.
Y Omar se pidió una pizza margarita, algo sencillo pero rico.
Cuando los dos acabamos de comer, tan solo faltaban 20 minutos para aterrizar así que fui al baño para arreglarme el hijab y luego volví a mi asiento.
Aterrizamos y alhamduli'allah llegamos bien.
Omar me agarro la mano y yo le mire algo sorprendida.
- La prensa nos espera fuera, no te separes de mi agarre preciosa-
Sabia que me llamaba con ese tipo de apodos simplemente para enfadarme así que no le preste ni la más mínima atención.
Me cogió de la mano y nuestras suaves pieles tocaron, lo que causó una corriente eléctrica por todo mi cuerpo.
Con tan solo el tacto de su mano sobre la mía, me hacía sentir sentimientos y sensaciones que nunca antes había sentido con alguien o algo.
Bajamos las escaleras del avión y nos montamos en el coche que previamente nos esperaba, cabe recalcar que habían bastantes personas haciendo preguntas de todo tipo, preguntas que ni yo misma sabría responder porque eran muy imprevistas.
El chófer puso el coche en marcha y nos dirigmos a casa, el hogar que tanto había echado de menos.
Al llegar, los dos encontrábamos muy cansados, nos habíamos duchado por la mañana y habíamos comido hace menos de 2h, por lo tanto ninguno de los dos tenía nada que hacer, ya que según Omar ya había adelantado suficiente trabajo y no tenia nada pendiente que hacer.
- Si ninguno de los dos tiene cosas que hacer, toca trabajar en la cama, porque ya te tengo ganas- dijo Omar acorralandome y pegando mi espalda contra la pared, posicionó sus manos sobre mi cintura y se acercó hasta quedar a menos de 2 cm de mi cara.
Es increíble lo que puede llegar ha hacer un hombre dentro de ti.
- Alejate- dije poniendo mis manos sobre su pecho
- Estas muy a la defensiva, ¿No crees cariño?- pregunto
- No , no lo creo la verdad- respondí
Se acercó aún más y posicionó su ojos sobre mis labios.
- Tienes unos labios muy apetecibles-
- Que pena que no pueda decir lo mismo- bromeé
- Me tienes locamente enamorado Hafsa, no sé que me has hecho, pero lo único que sé es que has conseguido hacerme sentir algo increíble en muy poco tiempo-
Ni siquiera me dejo responder, porque me beso.
Un beso que decía todas esas palabras que no podíamos sacar de nuestra boca, un beso lento y lleno de pasión.
Ojalá este momento fuera eterno.
Empezó a sonar el sonido de un móvil, ese maldita llamada ha estropeado nuestro precioso momento.
- Mierda- susurro
Aparto sus manos de mi y saco su móvil del bolsillo para contestar.
Sentía que mis pies ardían, estaba demasiado nerviosa como para estar de pie al lado de él, necesitaba sentarme y procesar esto, se que no es la primera vez que nos besamos, pero cada vez que lo hacemos siento sentimientos diferentes y nuevos.
Me aparte un poco hasta que vi que colgó la llamada.
- A donde vas mi amor, aun no hemos acabado-
- Como te acerques veras- dije echándome hacía atrás
-¿Que harás?- pregunto volviendo a acercarse a mi
-Pegarte-
-Con tu metro cincuenta, no creo-
- Callate-
- Callame-
-Vale- y volví a posicionar mis labios sobre los suyos, esta vez lo hacía involuntariamente, no era yo la que me movía, era mi cuerpo que actuaba por si solo.
Coloco sus manos sobre mis caderas y yo puse mis manos sobre su pelo ondulado el cual estaba despeinando con pequeños movimientos.
Cuando nos quedamos sin respiración nos separamos y nos miramos a los ojos por lo menos 1 minuto.
- Con este beso lo único que has demostrado es que te mueres por mi-
- No-
- Si-
-¿Porque crees que me muero por ti señorito Omar?
- Con pequeños detalles que vas demostrando a lo largo del tiempo-
- Como cual-
- Como por ejemplo que tengo mis manos sobre tu cintura y no te has quejado, o también porque estás acariciándome la nuca y tocando mi pelo, o porque sonríes cuando estás cerca mío, o porque te pones nerviosa cuando te hablo, o tambien cuando te pones celosa porque chicas me tiran. Como ya te he dicho son pequeños detalles que se van notando señorita Hafsa -
- No creas cariño, esos detalles son cosas que solo tu has notado-
- O tambien, otro detalle es que me llamas cariño siempre que tengo la razón-
- Eres un imbecil- dije y se empezó a descojonar.
Lo aparte de mi y entre al vestidor para ponerme un pijama porque estaba MUY cansada.
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Assalamu Aleikom chicas, que tal??
estoy intentando recuperar mi racha de escribir capítulos cada semana, pero se me hace algo difícil 🥲
espero que os guste este capítulo!! 💗💗
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Mi halal
RomanceOmar el típico hombre moreno, alto y guapo que para conseguir la herencia de la empresa de su padre se ve obligado a casarse con Hafsa una chica guapa, estudiosa y humilde sin el plan del matrimonio. Los dos son muy diferentes pero acabaran encaj...