Doce.

308 26 2
                                    

Naruto llegó al lugar indicado por Toneri, un antiguo almacén en las afueras de la ciudad. La estructura, olvidada por el tiempo, se erguía como un monumento sombrío a los días pasados. La penumbra del lugar y el eco de sus propios pasos resonando en el suelo metálico le daban una sensación de inquietud. Avanzó cautelosamente, sus ojos adaptándose a la escasa luz que se filtraba a través de las ventanas rotas. De pronto, una figura emergió de las sombras.

—Así que finalmente te dignaste a venir —dijo Toneri, con una sonrisa fría que apenas se veía en la penumbra.

Naruto frunció el ceño, su cuerpo tenso y listo para cualquier cosa.

—¿Quién eres y qué quieres de nosotros? —exigió Naruto, tratando de mantener la calma aunque su corazón latía con fuerza.

Toneri avanzó unos pasos, quedando a la vista bajo la tenue luz de una lámpara colgante, revelando su semblante serio y calculador. Llevaba un elegante traje negro, lo que contrastaba con el entorno decadente del almacén. Sus ojos, fríos y penetrantes, se fijaron en Naruto con una intensidad que casi podía sentirse físicamente.

—Mi nombre es Toneri Otsutsuki. Y lo que quiero, Naruto Uzumaki, es muy simple: poder y control. El matrimonio de Sasuke y Hinata es crucial para mis planes. Con el control de sus empresas, puedo asegurarme una posición de influencia que ninguno de ustedes puede imaginar.

Naruto frunció el ceño aún más, tratando de entender la conexión.

—¿Por qué te interesa tanto su matrimonio? ¿Qué ganas con ello?

Toneri soltó una carcajada, llena de desprecio.

—Eres tan ingenuo, Naruto. La fusión de las empresas Uchiha y Hyuga abrirá puertas que ahora están cerradas para mí. Influencia, acceso a recursos, y, sobre todo, la capacidad de manipular a las familias más poderosas para mi beneficio personal. Los Uchiha y los Hyuga, juntos, forman un imperio que puede dominar muchos aspectos del mundo empresarial y político. Y si eso significa destruir algunas vidas en el proceso, que así sea.— Pausó.— Si quieres que todo siga tan bien como antes, más te vale darme todo el dinero que quiera. A tu empresa le va bastante bien ¿No es así?

Naruto sintió una mezcla de rabia y confusión.

—No permitiré que destruyas la vida de Hinata o de cualquier otra persona —dijo Naruto con firmeza, dando un paso hacia adelante.

Toneri levantó una mano, señalando a Naruto con una expresión de superioridad.

—No tienes idea de con quién te estás metiendo. He estado observando a todos ustedes desde hace mucho tiempo. Tengo información y pruebas que podrían hundir a cualquiera de ustedes en un abrir y cerrar de ojos. Y estoy dispuesto a usarlas si es necesario.

Naruto apretó los puños, sintiendo la tensión en cada músculo de su cuerpo.

—¿Por qué involucrar a Sasuke y Hinata? ¿Qué tienen que ver ellos con tu sed de poder?

Toneri comenzó a caminar lentamente alrededor de Naruto, como un depredador acechando a su presa.

—Sasuke Uchiha es una pieza esencial en mi juego. Él controla una parte significativa del mercado empresarial. Hinata, con sus conexiones y su posición en la familia Hyuga, complementa perfectamente mis necesidades. Juntos, su matrimonio simboliza una alianza que me abrirá las puertas al poder absoluto.

Era evidente que Toneri había planeado esto durante mucho tiempo, usando a Sasuke y Hinata como piezas en su ajedrez maquiavélico.

—No dejaré que te salgas con la tuya, Toneri —dijo Naruto, con una determinación renovada.

𝑳𝒂 𝒆𝒔𝒑𝒐𝒔𝒂 𝒅𝒆 𝒎𝒊 𝒎𝒆𝒋𝒐𝒓 𝒂𝒎𝒊𝒈𝒐 | 𝑵𝑨𝑹𝑼𝑯𝑰𝑵𝑨 +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora