【🅒🅞🅛🅔🅒🅒🅘🅞🅝】|『Giyū x Shinonu』Giyū y Shinobu pensaron que tomarían a todos sus conocidos por sorpresa al hacer oficial su relación y su decisión de comprometerse en matrimonio, pero resulta que los sorprendidos fueron ellos.
-¡Al fin! -excla...
NO PLAGIEN, NO RESUBAN Y TAMPOCO TRADUZCAN SI YO NO LO HE AUTORIZADO. -Gracias.
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Rated: K+.
Géneros: confort, friendship, y romance.
Advertencias: relato corto. Apto para todo público.
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Cualquiera pensaría que dos personas tan opuestas como Giyū Tomioka y Shinobu Kochō, en caso de enamorarse, se besaron por primera vez siendo pareja, ¿no es así?
Bueno, tal vez sólo para ellos sí fue así. Y depende de qué tipo de beso estábamos hablando.
Según Giyū y Shinobu, su primer beso en la boca fue posterior a la confesión que ambos hicieron en un momento de desesperación; pero esa es otra anécdota.
Ese... su primer beso, fue un poco distinto.
Un roce tan común, pero tan significativo, no tendría por qué haberse olvidado, ¿verdad?
No... no fue en una noche de ebriedad.
No... no fue un impulso guiado por los celos.
No... tampoco fue obra de la técnica de sangre de un demonio.
Fue... bueno, comenzó gracias a un intento fallido de Shinobu por realizar un veneno más poderoso.
Debemos retroceder en el tiempo un poco. Donde ella aún no era un pilar.
Por aquellos entonces, cierta tensión podía sentirse entre Shinobu y Giyū, el asunto escaló a tal grado que ambos procuraban no quedarse solos mucho tiempo, ni siquiera cuando salían a misiones juntos. Se sentían lejanos, pero sentirse muy juntos los ponía nerviosos.
Ella ya no lo molestaba tanto como antes (lo del "zum-zum" estaba en pausa indefinida) y él no estaba muy feliz por eso, pero contrariamente, Giyū agradecía ese distanciamiento porque él tampoco era muy bueno entendiendo los sentimientos, en especial los suyos propios.
Shinobu para entonces se negaba a aceptar que Giyū le pareciese un hombre atractivo, especialmente sus ojos... tan azules como el cobalto; ella sólo se negaba a decir en voz alta (aunque estuviese sola) que la inusual belleza de Giyū Tomioka no estaba distrayéndola, aunque supiese perfectamente que estaría mintiéndose.
De forma constante y hasta ridícula, ella intentaba convencerse a sí misma de que nada estaba cambiando. Trataba de manipularse, diciéndose de forma continua que era ridículo que Tomiokapudiese ser lo más cercano que ella tenía a: "su tipo de hombre ideal".
Con Giyū la cosa era más o menos lo mismo, pero en lugar de tratar de quitarse de la cabeza preguntas como: "¿qué hago para dejar de pensar en ella?", su cerebro estaba más y más concentrado en averiguar: "¿desde cuándo comencé a pensar tanto en ella?" y Giyū Tomioka no era Giyū Tomioka si no pasaba horas y horas mirando la nada mientras se preguntaba lo obvio.
