Five years later - Tsukishima Kei

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Tsukishima Kei.

No veía a Hana por ningún lado pero el partido acababa de empezar.

—¡Haz un buen saque, Asahi! —gritó Tanaka.

Asahi sacó y del otro lado lo recibieron fácilmente, el levantador la lanzó hacia el atacante "As" de su equipo e hicieron el punto.

—No importa, los alcanzaremos. —nos alentó Daichi.

Ellos sacaron y Nishinoya recibió perfectamente el saque haciendo que Kageyama levantara la pelota perfecta para Hinata e hicimos el punto.

—¡Eso es! —gritaron.

—Ese enano voló. —oí decir al público.

—Hinata esto, Hinata aquello. —murmure.

Al cambiar de rotación le tocaba sacar a Kageyama e hizo un buen saque.

—Buen saque, Kageyama. —dijo Daichi.

Con dificultad recibieron su saque y atacaron pero Nishinoya lo recibió haciendo un pase perfecto, Kageyama la lanzó hacia Tanaka e hicimos el punto.

—¡Eso es! —Tanaka no paraba de gritar presumiendo su fuerza.

[...]

16-10 ganando Karasuno y vi llegar a Hana, ella se sentó en las gradas y después llegó un chico con el uniforme de Aoba Johsai y se sentó a lado de ella.

—Tsukki, ¡bloquéalo! —gritó Yamaguchi y así fue.

Kageyama miraba fijamente a Kindaichi (su ex compañero).

—Y pensar que no haz dado una orden como nos hacías a nosotros. —dijo el ex compañero y Kageyama solo dijo.

—He crecido y no solo en el voleibol, Kindaichi. Hazlo tú también.

—Y pensar que esas palabras saldrían de la boca de Kageyama. —dijo Hinata y Kageyama lo miró mal.

Salió Nishinoya, entro Hinata y me fui al saque. Apunte hacia donde penetraba el armador pero fácilmente lo recibieron.

—Tsk. —chasquee la lengua.

Me prepare para recibir (aunque se me da fatal) y ellos atacaron e intente recibirla pero lamentablemente falle.

Entro Nishinoya y me senté en la banca.

Suzuki Hana.

—¿Quién es tu amigo? —pregunto Oikawa.

—El rubio de defensa central. —dije mirando a Kei y él se dio cuenta e hicimos contacto visual. Le sonreí y pensé que no me regresaría la sonrisa pero lo hizo, solo que esta sonrisa era cínica... muy cínica.

—Ah, ese. —miró a Kei y al parecer tenían una batalla de miradas. —Es alto, ¿cuanto mide?

—Creo que está cerca de los 1.90. —dije intentando recordar. —. Si mal no recuerdo Kei mide 1.88cm. —termine por decir mirando como Kageyama le lanzaba un balón perfecto a Hinata haciendo el punto.

—1.88cm... ¿que edad tiene? —pregunto.

—Estas muy curioso, ¿no? —él sonrió—. 15 años. —mire a Oikawa y él no despegaba su mirada del juego. Cuando se dio cuenta que lo estaba mirando hicimos un contacto visual duradero hasta que el público empezó a gritar. —¿Que sucedió?

—Al parecer Karasuno ganó el primer set pero Aoba Johsai empezó a leer a través de los ataques rápidos del pequeño.

Quede sorprendida y volví a mirar a la cancha. —¿Empezaron a leer a través de esos ataques?

Él se levantó. —Creo que es hora de que entre en acción. —se giró quedando frente a mi —. Míreme cómo destruyó el ego de tu "amigo".

Dicho esto se marchó y entró en cancha, note como habló con el entrenador y comenzó a calentar.

Tsukishima Kei.

El chico que estaba a lado de Hana se levantó y entró en la cancha y comenzó a calentar.

—Oikawa-senpai. —susurró Kageyama.

—¿Te dio miedo ese flaco? —me burlé de Kageyama pero en realidad quería aplastar algo y no se porque.

—Claro que no, idiota.

—Más te vale, Rey de la cancha.

[...]

20-24 ganando Karasuno. Hinata dejó el saque en la red haciendo que aquel equipo obtuviera el punto.

Apuntó de sacar el árbitro canto cambio de jugador y entró el flaco aquel. Ahora si, el silbato sonó y el flaco lanzó el balón haciendo un saque con salto de suma fuerza dirigido entre la zona donde yo estaba (en el puesto del atacante lateral) y el puesto del libero.

El punto fue un saque directo y todo el público empezó a gritar apoyando a Aoba.

El flaco volvió a sacar en la zona donde estaba yo aquí que intente recibirla pero el saque fue tan duro que llegó a las gradas.

22-24 ganando Karasuno.

El flaco hizo su tercer saque el cual Nishinoya leyó y gritó: —¡Fuera! —lo esquivo y efectivamente cayó fuera.

22-25. Ganó Karasuno pero sentí una derrota por parte del flaco con su saque del diablo.