Guía de supervivencia del médico del loto negro

Capítulo 19: La indiferencia de Xie Bufeng

Un trozo de piel se cayó del codo del tercer príncipe y tenía mucho polvo, lo que le hacía parecer bastante lamentable.

En esta época, la mayoría de la gente no tenía el concepto de "desinfección", pero Wen Qingci estaba particularmente preocupado por ello.

Sacó una botella de vino medicinal especial de su caja de medicinas, empapó un poco de algodón y luego desinfectó suavemente el área alrededor de la herida del tercer príncipe.

– Sss... ¡Ay, duele! – Los ojos del joven príncipe se llenaron de lágrimas y su brazo temblaba junto con su voz, sin confianza –¡¿Qué es esto?! Wen, Wen Qingci, ¿estás intentando hacerme daño deliberadamente?

Después del incidente anterior, el tercer príncipe albergaba odio y miedo hacia Wen Qingci.

Mientras hablaba, inconscientemente evitó los movimientos del otro.

– Si la herida no se limpia a tiempo, es muy probable que se infecte – Wen Qingci continuó limpiando la herida para el tercer príncipe como si no hubiera notado la reacción del príncipe, explicando a la ligera.

El tercer príncipe quedó atónito – ¿Qué dijiste

Wen Qingci se dio cuenta sólo después de hablar de que el concepto de "infección" no existía en la medicina tradicional.

No sabía cómo explicarlo, así que simplemente sonrió gentilmente y no dijo nada.

Al ver esto, el tercer príncipe se convenció aún más de que Wen Qingci estaba albergando resentimiento y apuntándolo deliberadamente.

–¿Dónde está el médico imperial Yu Guanlin? Tráelo para que trate mi herida – El joven príncipe miró a su alrededor, buscando la figura del viejo médico imperial.

Incluso, hasta el final quiso salvar su dignidad – Yo... sólo quiero encontrar a alguien familiarizado con mis heridas para que venga.

Ante estas palabras, todas las personas a su alrededor cambiaron sus expresiones.

Cambiar de médico en ese momento fue sin duda humillante para el médico imperial. ¿Podría Wen Qingci tolerarlo?

Mientras el joven príncipe hablaba obstinadamente, Wen Qingci lo tocó accidentalmente, y el príncipe sintió como si la otra parte fuera a matarlo con solo un toque, temblando incontrolablemente aquí.

Wen Qingci fingió no ver y sonrió levemente, diciendo – Una lesión tan leve no requiere molestar al médico Yu.

– Quiero cambiar de médico imperial, ¿necesito el permiso de otras personas? – El tercer príncipe estaba disgustado y asustado, y mientras hablaba, su voz se hizo un poco más fuerte.

El segundo príncipe, que había estado esperando, no supo cuándo había mirado. Al escuchar esto, él, que ya estaba impaciente, finalmente miró ferozmente a Xie Yinshang, advirtiendo con los dientes apretados –¡Deja de hacer un escándalo, cállate!

– Oh... está bien... – El tercer príncipe pareció recordar finalmente dónde estaba, y cerró la boca con torpeza, incluso sus gritos de dolor fueron un poco más silenciosos.

Wen Qingci siempre había sido una persona demasiado vaga para discutir con los niños.

Además, después de la caída del tercer príncipe, acababa de ser rescatado de las garras de Ge Dejiao. Estaba agradecido y no tenía tiempo para el resentimiento.

Después de que el tercer príncipe se calmó, Wen Qingci aplicó un medicamento en su herida y luego envolvió una venda alrededor del brazo del joven príncipe.