Capitulo 7: "El Ángel de la Guarda"

0 0 0
                                    

Mi cuerpo estaba paralizado al ver la figura de Azrael en la puerta, con la oscuridad a su espalda y la leve luz que salia del hogar parecía una presencia siniestra.

-Lindo lugar donde te encuentro cielo- dijo con una sonrisa
-¿Qué haces aquí?-
-Que agresiva, solo venía de paso, oí rumores sobre ti y tu...-

Noté como su mirada se desvío hacia dentro de la casa, posiblemente hacia mi hermano.

-¿Hermano?- dije con sarcasmo.
-Si... Tu hermano, veo que ya se encontraron... Eso es bueno-.
-¿Por qué lo dices?-
-Tu sabes porqué, Laura, lo has visto tu misma-. Dijo mientras sonreía sarcásticamente.

Azrael posiblemente se refería a lo ocurrido en el bosque y en la iglesia, lo cual me generaba aún más desconfianza, dado que si estaba al tanto de lo ocurrido porqué no hizo nada.

-Y si sabes tanto, ¿Por qué no viniste tu mismo a ver que ocurría?-
-Digamos que estaba en una reunión bastante... importante-. Dijo mientras levantaba sus hombros.
-Pues ya sabes dónde estoy, ¿Necesitas algo más?- dije con seriedad a la vez que cerraba un poco la puerta.
-No, solo quería saber si estabas bien, y por lo visto estás en buenas manos, pero ten cuidado, los perros huelen y siguen rastros- dijo a la vez que extendía sus alas y se marchaba.

Me dejó sorprendida el que haya mostrado sus alas sabiendo que posiblemente los humanos dentro estarían expectantes, pero a su vez lo último que dijo me dejó preocupada... ¿Perros?, ¿Rastro? Será que se refiere al Querubín o quizás a algo más, al entrar todos estaban sentados en el sofá y mi hermano me hizo un gesto para que me sentara a su lado.

-¿Y quién era?- preguntó un tanto emocionado.
-Alguien que sabe más de lo que aparenta-.
-Mmmmhhh pues quizás eso no sea tan malo o si?-
-Esa es la cuestión, las visitas de él no son frecuentes y siempre tiene un aire tan misterioso-
-A mi me parece bastante amigable- dijo mientras se reía.
-Puede ser, Azrael, es muy extraño- dije mientras me reía.

En eso Natalia me acerca una taza de té, diciendo que ayudaría a relajar la mente, a su vez me dice que no quedan más dormitorios vacíos disponibles, a lo que yo respondo que puedo dormir en el sofá; Apolo hizo un gesto de desagrado cuando dije que me dormiría en el sofá, pues al parecer no confiaba en mí. Entre eso mi hermano dice que puede compartir el dormitorio donde estaba durmiendo, ya que así tendría tiempo para conversar conmigo, a lo que ambos acceden tanto Natalia como Apolo; al irnos al dormitorio, Apolo prepara un colchón pequeño a un costado de la cama, diciendo que no es mucho, pero a menos servirá por mientras.

Al día siguiente, desperté temprano, y aproveché de salir al patio y ver el cultivo de uvas de mejor manera, entre eso, llega mi hermano.

-Es hermoso, ¿Verdad?-
-Si, es una vista hermosa, han sido muy buenos contigo estás personas- dije mientras cruzaba mis brazos.
-Apolo, fue la persona que me ayudó desde que desperté en esa plaza-.
-¿Y te lo has topado muchas veces desde entonces?-.
-Asi es, aunque era raro, ya que nunca lo había visto antes, pero se sentía como si lo conociera de siempre-.
-Algunas personas transmiten esa sensación, pero me alegra saber que te han ayudado-.
-Si, oye, ayer cuando estabas en la iglesia, y me atacó esa persona...¿Qué era?-.
-La verdad, nunca había visto algo igual, pero se podría decir que esa persona había sido poseída por un demonio-.
-¿Y por qué quería atacarme?-.

Esa pregunta me dejó con más dudas de las que ya tenía, no sabía que responderle sin caer en la divagación, pero si alguien podría tener respuestas sería Raziel, aunque desde ayer que no se nada y no contesta su celular. En eso Natalia se acerca y nos dice que podemos ducharnos con agua caliente, nos dió toallas y se dirigió a la cocina.

-Ella es muy amable, a comparación de Apolo- dije mientras me dirigía al baño.
-Apolo es una persona buena, quizás debas conocerlo más-
-Si es verdad, por cierto, ¿Cómo es tu nombre humano?-
-Mmhh... Matias, es un nombre que se me vino a la mente cuando Apolo me hizo la misma pregunta- dijo mientras soltaba una risa nerviosa.

𝕮 𝖆 𝖗 𝖎 𝖘 𝖘 𝖎 𝖒 𝖎  𝕸 𝖔 𝖗 𝖙 𝖊 𝖒 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora