Capítulo 26

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El trío tiene una discusión en la oscuridad. Noticias del Festival Enfoques, y los tiempos son diferentes para los gatos. ¡Y conocen a un nuevo mentor!

Una vez más, el trío se encontró en la habitación de Ochako, acostado en una cama juntos, con las extremidades enredadas envueltas una sobre la otra, ya que encontraron la comodidad en el calor de los demás que podían. Pero a diferencia de cualquier otro momento..ninguno se había quedado dormido todavía. Himiko todavía estaba luchando contra las heces de los celos dentro de ella, y sintiéndose culpable de que los demás lo supieran. Ochako todavía estaba exhausta, tan agotada que no tenía sueño, aunque contradictorio. E Izuku...well, su preocupación y miedo se estaba desangrando a Ochako tanto que simplemente no podía soportarlo más.

"Izu?" se aventuró en la habitación tranquila y oscura, sintiendo que la mano de Izuku se apretaba alrededor de su cintura en respuesta.

"...sí?"

"Quiero decirme por qué estás tan molesto?"

Izuku suspiró, su aliento revoloteando sobre las orejas de Ochako. "Porque soy un hipócrita masivo", murmuraron, haciendo que Ochako parpadeara en confusión.

Himiko aparentemente sintió lo mismo, arrastrándose por el otro lado de Izuku donde había estado atrapada en la espalda de Izuku dejando claro que también estaba despierta. Su cabeza apareció sobre el hombro de Izuku, mirándolos. "Qué quieres decir con eso?" Himiko preguntó suavemente.

Izuku suspiró una vez más, con los ojos firmemente cerrados mientras sus orejas yacían planas sobre su cabeza. "...Ochako, te ibas a dejar morir. Y lo ibas a hacer y ser feliz al respecto, porque íbamos a estar bien."

Ochako respiró hondo instintivamente, porque la segunda Izuku habló sintió el aumento de las emociones tanto de Izuku como de Himiko se encuentran con el vínculo tan rápidamente que casi duele. Teniendo en cuenta cómo Himiko se desplomó inmediatamente sobre los hombros de Izuku, girando la cabeza hacia no mira a Ochako..ella podía descubrir que Himiko también se había preocupado por esto.

Ochako tragó espeso. "Cómo te lleva eso a ser un hipócrita?"

"Porque como mamá señaló, mi solución para las cosas también se está lastimando para los demás. Y ahora me di cuenta de que eso significa que lo que sentía al respecto es cómo se sentirían ustedes dos si hiciera lo mismo...especialmente porque quiero estar enojado contigo y no puedo porque sé que habría hecho lo mismo en tu lugar", suspiró Izuku. Se agacharon la cabeza, presionando su frente en la espalda de Ochako mientras los brazos alrededor de su cintura se apretaban aún más, casi dolorosamente apretándola.

Ochako no podía soportarlo más. Ella giró en el agarre de Izuku, tirándolos en su pecho y rizándose a su alrededor, una mano enredándose en su cabello y acariciando sus ojos. "Lo siento", se ahogó. Mientras sentía la angustia de Himiko mezclándose con la de Izuku, extendió la mano libre y sacó a Himiko sobre Izuku y encima de los otros dos, el ajuste adolescente un poco más pequeño sin problemas. Himiko reaccionó enterrando su rostro en el hombro de Izuku, envolviendo sus brazos firmemente alrededor de ambos. "Lo siento mucho. No quise decir...No quise asustarte así", susurró Ochako.

"...eso es lo que apesta", Himiko se burló, su voz espesa con sus propias lágrimas pinchando en sus ojos. "Porque ambos sabemos que habríamos hecho lo mismo, y chupa."

"Lo que ella dijo", murmuró Izuku.

"...No sé cómo arreglar esto", admitió Ochako con un susurro.

"No puedes. Nadie puede. Estabas haciendo lo que podías para protegernos. Yo sólo...No puedo perderte. Cualquiera de ustedes. No ahora, no después de que te recuperara", susurró Izuku.

Promesas hechas, promesas cumplidasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora