AU musical de los mugis

Cuento De Nina Simone

Cuento De Nina Simone, el día que Franky y Robin recordaron.

Aclaraciones:

Franky sólo entró a la banda por Robin, Luffy se lo pidió después de recibir ayudar de él y que les regalara una camioneta, pero este se negó hasta que Robin se lo pidió.

Esto sucede antes de que tuvieran una relación estable.

Es la única pareja confirmada en el AU. El resto es interpretación del lector.

⚠ Todos los cuentos se desarrollan en épocas distintas, no hay una secuencia. ⚠

* * *

Era bien sabido que Franky había entrado a la banda de los mugiwaras no por gusto o porque Luffy se lo hubiera pedido por gratitud; no, Franky había entrado porque desde que la vio, se enamoró de ella, Franky había entrado a la banda porque estaba enamorado de Nico Robin, la pianista o tecladista de la banda, la hermosa morena de ojazos azules y cabellera negra, que siempre olía a flores... Si, Franky sabía que no había mujer igual.

A decir verdad, el peliceleste no era tan fan del rock que tocaba la banda, él era más de música guapachosa, algo que pidiera bailar, solía decir, algo que disfrutará en la playa con un refresco en mano y a todo volumen. Sin embargo, por azares del destino, llegó a verlos en televisión por una entrevista que le hacían al pequeño grupo, y ahí la vio por primera vez... Desde entonces, siguió su carrera, y cuando la banda fue por su ayuda para un auto nuevo, se cautivó no sólo con el físico de la morena, si no, con su personalidad... Tan seria, tan reservada, tan dulce... Nada que ver con la cara del grupo, es decir, Nami; Robin era un ángel.

Por supuesto, cuando Luffy le pidió que se uniera, se negó, porque él no era un niño que estaba en una banda de universitarios... Pero cuando Robin se lo pidió no pudo resistirse, no supo si por su belleza o porque le estaba jalando el cabello.

Aun así, incluso con ese acto de violencia hacia su persona, Robin le seguía pareciendo una persona maravillosa.

Esa tarde, estaban en ensayo, y no era raro que el bajista les llevara de comer, así que todos habían ido corriendo para comer lo que hubiera llevado. A excepción de Robin que riendo vio a todos irse, y Franky, que se quedo sincronizado unas bocinas.

-¿No vas a ir, Cyborg-kun? -La voz suave y delicada de Robin hizo que la cara de Cutty Flam ardiera.

-No, voy a quedarme a terminar esto para cuando todo vuelvan - respondió con toda la tranquilidad posible, y, a decir verdad, se notaba su seguridad, no era un niño, sabía lo que quería -. ¿Y tu, Robin? -arrastró las letras.

-Puedo acompañarte -dijo ofreciendo una dulce sonrisa y sentándose en el banco frente a su teclado -. ¿Te molesta si pongo música?

-Adelante - animó el hombre con media sonrisa y subiendo sus gafas de Sol a su frente.

La música que empezó a sonar era un versión extraña de Here Comes The Sun, cancion que obviamente Franky conocía por cultura general. Sin embargo, aunque era la misma letra la cantaba una mujer y con un estilo distinto... En vez de ser el rock suave de The Beatles, era más movido, era Soul.
Franky sonrió involuntariamente al reconocer el género, a su mentor le encantaba y tenía años que no escuchaba esa música... A juzgar por los tonos que usaba la dama dedujo de quien se trataba.

-Nina, Simone, ¿eh? - dijo el peliazul volviendo a mover las pequeñas rueditas de las bocinas y del equipo de audio.

-Es correcto -respondió la morena -. Te noto sorprendido, ¿qué no tengo cara de escuchar esta música? Fufufu~

Franky soltó un a risa también por la dulce de Robin, le miró de lado con una sonrisa, le encantaba escucharla reír.
-No es eso, es que creí que te gustaría el rock porque es lo que tocamos.

-Que toque algo, no significa que sea mi género favorito o el único que existe. Admito que si me gusta la música que creamos, pero el Soul siempre va a ser mi favorito - explicó la dulce dama mientras cruzaba una pierna y capturada la mirada de Franky -. El Soul tiene tanta historia, su influencia es maravillosa, además me gusta el ritmo.

-Es un género con clase, encaja perfecto contigo - halagó el mayor. Robin sonrió.

-Tu eres de música más movida, ¿no? -Franky asintió -. Pero conocías a Simone, ¿le gusta a alguien importante?

-A mi mentor - confesó el peliceleste con una sonrisa por la mujer tan perspicaz que tenía al frente -. Era gran fan, la escuchaba todo el tiempo en el taller... Me trajo recuerdos -dijo al final mirando al suelo con melancolía.

-¿Sabes, Franky ? -Al escuchar su nombre en los labios de la preciosa mujer, el nombrado levantó la mirada para verla -. La música es maravillosa, hay tantos géneros, tanta variedad en cantantes, músicos, artistas... Nos dejan expresarnos, nos deja liberarnos... Y también, nos ayuda a recordar -sonrió al final también -, a mi mamá también le gustaba Simone.

El peliceleste sonrió y se levantó, se acercó a la pelinegra y cuando estuvo cerca se frenó, mirándola hacia abajo por la altura, ya que él estaba parado y ella sentada. Tomó su mano y sonrió, la morena no tardó en hacer lo mismo.

-Bueno, parece que ya tenemos algo en común.

Robin soltó una risita corta y con su mano libre se cubrió la boca, luego miró a Cutty Flam a los ojos.
-¿No te molesta? Es decir, no es para nada tu género musical.

-Bueno... Soy de mente abierta -bromeó pasando su mano por su cabello y sacándole otra sonrisa a Robin.

Se quedaron así, mirándose el uno al otro, dejando que los recuerdos viajaran en su mente conforme la canción iba avanzando, y que sus miradas conectadas les dieran un vistazo al futuro... Porque es bueno tener el pasado vivo, pero era mejor pensar en los recuerdos que formarían después.

Y así, tomados de la mano y mirándose fijamente, conforme avanzaba el tema, iban recordando, y esperando con ansias, poder recordar más momentos como el que estaban viviendo, juntos.

Y así, cuando termino la melodía, la sonrisa volvió a sus rostros. Estaba bien.

Fin

* * *

Los amo los amo los amo
Hagan más fanfics de ellos porfa
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