RENACER

Capítulo 2

El despertar del vacío

No dormía tan bien desde hacía semanas. Desperté antes que Talon, el aún seguía profundamente dormido y no quise despertarlo. Lo observé detenidamente, estaba boca abajo y agarrado a la almohada, solamente vestido con la ropa interior. Su rostro, sin embargo, estaba fruncido como si estuviera preocupado o soñando algo desagradable.

Me hice una cola alta en el cabello y me vestí con ropa cómoda, estaba hambrienta. Al salir Syndra estaba mirándome fijamente con las cejas levantadas, cerré la puerta al salir. <<¿Cómo es que siempre me pilla? Tiene olfato para el cotilleo>> sonreí y puse los ojos en blanco.

- Vamos a desayunar y te cuento... - mi amiga se levantó de un salto hacia mi y me cogió del brazo casi tirando de mi hacia la cocina mientras me dedicaba una amplia sonrisa.

Al poco de terminar, Talon salió de mi cuarto todo despeinado y vestido, se acicaló un poco el pelo con sus manos y se despidió excusándose de que lo habían llamado para otra misión. No hubo tiempo de preguntarle en que soñaba que lo tenía tan preocupado y a mi tampoco me dejaron mucho rato para el ocio, pues poco después de que el se marchara me llegó un aviso de Kayle para que fuera a su oficina <<Toca dar explicaciones....>>.

Cuando llegué a su despacho estaba hablando con Leona.

- Ahh Diana, ya estamos todos, bien - Kayle caminaba con las manos entrelazadas por detrás -Leona me ha estado explicando un poco sobre los aspectos celestiales, ¿tu que sabes de todo eso?

Me sorprendió que la conversación se dirigiera a ese tema tan rápidamente, aun estaba pensando que decirle, no parecía buena idea ocultarle nada.

- Son dioses antiguos que han habitado desde siempre en Runaterra, las leyendas decían que cuando subías a la cima del monte Targon podías verlos y te concedían lo que tu corazón más anhelaba, pues solo los más puros de corazón conseguían alcanzar la cima. También cuentan que a veces los dioses escogían a algún de esos afortunados mortales para ascenderlos a los cielos. Pero claro, eso son solo cuentos. Nosotras subimos a la cima antes de exiliarme y no vi nada sobrenatural allí.

- Y sin embargo te han ascendido como cuentan las leyendas, igual que a mí - anunció Leona

- Fue aquella noche... - le dije a Leona refiriéndome a cuando me exiliaron, ella me miró duramente apretando los dientes

... En una de mis excursiones por los alrededores del monte Targon encontré un templo, bueno, más bien apareció delante mía en cuanto cayó la noche, como si lo hubieran invocado - pensé si decirles acerca de guardián, pero puesto que ni yo sabía suficiente sobre el ni su nombre, decidí omitirlo de la historia - Dentro había todo tipo de esculturas, tapices y paredes con dibujos referentes al pueblo Lunari, estaban desgastados por el tiempo y la guerra que ambas tribus mantenían, también estaban en una especie de altar mi arma y la armadura que siempre llevo y un libro, lo cogí todo y al salir del templo se evaporó de mi vista, me llevé todo lo que encontré a la capital...

- ¿Existe ese libro aún? - preguntó Kayle intrigada por mi historia

- No lo creo, cuando llegué me encarcelaron por hereje. Seguramente lo quemarían como hacían con todos los libros que les enseñé y que se desviaban de sus creencias religiosas - Leona seguía mirándome duramente, obviamente tenía un conflicto interno respecto a mi

...pero continuando con los de los aspectos... ocurrió por la noche. Aquella noche iban a ejecutarme por herejía, pedí ayuda a la Luna, puesto que es la fe en el que siempre he creído... y no se como lo invoqué, un pilar de luz plateada cayó sobre mi, de alguna forma algo entró en mi y me poseyó. Era como si compartiera mi cuerpo y mi mente con alguien más, me mostraba recuerdos del pasado que fluían a gran velocidad en mi mente y también guiaba mis movimientos, me dio más fuerza y habilidad de la que cualquier ser humano es capaz de tener... ese dios es un ser salvaje, difícil de apaciguar a veces. Enciende mis emociones dominantes en momentos de presión y hace que este constantemente concentrada y alerta con mi entorno...

- ¿Es por él que llevas esa marca en la frente?

- Si, apareció cuando me dio su poder...desde que la luz de la Luna me atravesó... tengo el presentimiento de que hay algo por lo que nos a tomado a Leona y a mi como avatares, que estamos destinadas a algo importante.... aunque aún no se a que - así concluí mi relato

- Creo que tengo la respuesta a esa pregunta... me han llegado reportes de que han avistado criaturas extrañas saliendo de una especie de portal amorfo, principalmente en el desierto de Shurima, aunque también se han visto criaturas menores en otras zonas y ciudades de Runaterra.

Leona y yo nos miramos mutuamente.

- El vacío - dijimos ambas al unísono

- No pensé que se repitiera de nuevo - Leona acariciaba su frente, aparecieron varias arrugas de preocupación << ¿habrá tenido las mismas visiones que yo?>>

- ¿Qué es? ¿es más preocupante de lo que pensaba?

- Me lo mostraron las visiones cuando me convertí en avatar del aspecto. Hace eones que fue desterrado de aquí, sería muy peligroso para nuestro futuro cercano que volviera a aparecer. El vacío no es un simple portal, es un ente alienígena insaciable, un devorador de mundos que crece y se adapta al entorno como un cáncer.

- Pero es como un portal de entrada, ¿no? ¿no se puede sellar?

- Es muy difícil y peligroso, tiene una consciencia colectiva como una colmena, todas las criaturas están interconectadas de forma que saben lo que ocurre en todo momento, cuando luchas contra ellos aprenden- continuó Leona

- Pero se derrotó en el pasado, has dicho que fue desterrado, ¿como? - inquirió Kayle preocupada, nos miro fijamente a ambas al no obtener respuesta - ¿lo sabéis? ¿no lo habéis visto en visiones?

- Son recuerdos borrosos, no lo se - anuncié

- Me ocurre igual, no he visto el final de esa batalla

Kayle se sentó pesadamente en sus silla de escritorio sujetándose la sien preocupada, casi podían oírse sus ideas como una máquina que se pone en marcha. Claramente estaba buscando las posibles soluciones para salvar al mundo de la destrucción que se avecinaba.

- Por el momento enviaré patrullas de todas las academias y estaciones a pelear con esas criaturas, o por lo menos evitar que maten gente o destruyan mas de la cuenta - nos miró - quizá deberíais ir y verlo, puede que os ayude a recordar y nos de algo de luz para resolver esto...

Ambas asentimos, Kayle hizo un gesto con su mano para que nos retiráramos y salimos de su oficina.

Aunque Kayle me había sugerido ir a Shurima y estudiar a el Vacío, no iba a partir inmediatamente, debía arreglar mis asuntos pendientes con Leona antes de partir juntas. A pesar de que había hecho las paces con Leona, todavía me sentía incomoda su compañía, evidentemente ella se sentía igual, por eso me miraba siempre con dureza y evitaba decir más palabras de las necesarias para ser cordial. 

Tendríamos que trabajar cuanto antes esas diferencias si queríamos luchar juntas contra el Vacío... y no teníamos mucho tiempo si el Vacío avanzaba tan rápido como la última vez. Me preocupaba el hecho de no saber como enfrentarnos a ello, <<¿Por qué a ninguna de las dos nos han transmitido recuerdos de la lucha final contra eso?>>.