ஜ Look My Way ஜ [STOLITZO]

CAP 10: Continua🔥

(¡Advertencia! Este episodio contiene escena setzual😈)

El sonido de pasos acelerados resonaron en toda la sala, cada vez mas cerca de la puerta. Lleve una mano a mi pecho por el susto, si mi corazón seguía latiendo de esa forma me iba a dar una taquicardia. Hasta que los pasos cesaron, dejando ver la esbelta y alta figura del demonio envuelta en una larga bata roja. Desvié la mirada apenado ¿Lo había despertado? Nada mas llegue y ya había molestado a medio mundo. Pero no era mi culpa, la gema fue la que me había llevado a su casa en ves de a la mía.

–¡Blitz! ¿Te encuentras bien? – Pregunto. Pero no pude mirarlo, ya que los mareos se hacían mas fuertes con cada movimiento que daba. -Blitz. –llamo Stolas casi en un susurro, no había escuchado cuando se acerco pero pude ver parte de su cuerpo frente a mi. Sentí como una de sus manos toco mi frente mientras que con la otra sujeto mi nuca levantando mi cabeza, sus cejas estaban casi unidas de lo fruncidas que estaban, con una expresión tensa y claramente preocupada.– Por lucifer Blitz, estas ardiendo ¿Qué fue lo que paso? Estas lastimado en algún lugar? Déjame revisarte, te duele cuando-

–¡estoy bien Stolas! –Exclame apartando su mano en cuento rozo mi cadera. Obviamente no estaba bien, pero apenas había tocado mi frente sentí un escalofrió recorrer toda mi espina dorsal y eso solo erizaba cada pelo de mi ser, y me asustaba no saber la razón del por que mi cuerpo reaccionaba de esa manera. Mire a Stolas que se encontraba aun mas preocupado que antes, sus ojos carmín estaban fijos en los míos y supe lo que estaba haciendo pero no lo detuve, me sentía demasiado agitado como para hablar. Luego de unos segundos su mirada se poso en mi pierna, justo donde había recibido la inyección.

–"Mantendre todo bajo control, soy un profesional" –Soltó entrecruzando ambos brazos. Yo solo levante una ceja. ¿estaba siendo irónico? De cierta forma tenia el derecho de enojarse, casi estropeaba la misión pero al final conseguimos la estatuilla y nadie había salido lastimado, e excepción de mi, y de verdad no me sentía de humor a causa de eso. –Al final terminaste usando el amuleto, ¿te imaginas lo que hubiera pasado si no te lo hubiera entregado? ¿Lo que ellos hubieran echo si te atrapaban? –Finalizo casi exasperado, algo inesperado de alguien tranquilo como él.

–Solo fue un descuido, obtuvimos la estatuilla, nadie mas salió herido y yo estaré bien. –Respondí con reproche, no había necesidad de exagerar las cosas.

–Exagerar? ¿Eso es lo que piensas? –Dijo inclinándose hasta quedar cara a cara, lo que me hizo inhalar una gran bocanada de aire por la cercanía. Trate de retroceder torpemente por el nerviosismo pero el extremo del sofá bloqueaba mi huida. Sus ojos carmín sin pupilas me hacían sentir aun mas nervioso, ya que no sabia donde estaba mirando exactamente. –¿Te das cuenta de lo irresponsable que suena eso? Llegas aquí a mitad de la noche, inestable a causa de lo que se que te inyectaron y me llamas exagerado? ¿Cómo se que esta clase de situaciones no volverán a suceder? Estoy comenzando a dudar si fue buena idea contratarte como guardaespaldas. –Recrimino alzando ambos brazos para después dar media vuelta hacia una de las mesas de estar. Entrecerré los ojos enojado, sentía mi corazón a mil y mi cabeza palpitaba. Pero lo que mas me estaba molestando era el extraño ardor que se había formado en mi abdomen. Mire a mi alrededor, tal parecía que los empleados ya se habían marchado.

–Me habría ahorrado todo tu estúpido e innecesario sermón de no ser por tu maldito amuleto defectuoso. ¿Crees que quería venir aquí? que crees que hubiera pasado si tu amuleto no hubiera funcionado cuando mas lo necesitaba, seguiría siendo mi culpa? Debería estar en mi casa con mi familia, no aquí contigo. –Dije molesto. Apoyándome del sofá para no caer. Mire la espalda del demonio, notando como una parte de su bata se deslizaba lentamente dejando su hombro izquierdo al descubierto al igual que su largo cuello y nuca. Su piel se veía tan blanca y liza e Inconscientemente recorrí su esbelta figura hasta llegar a su espalda baja, ¿Acaso no llevaba nada bajo la bata? Sentí mis ojos lagrimear a causa del calor, todo se sentía tan bochornoso. Trate de suspirar, pero involuntariamente salió entrecortado creando un ligero gemido que me sorprendió hasta a mi. Solo esperaba que no se hubiera percatado de eso. –Escucha, lamento que todo esto se me haya ido de las manos, no pensé en las consecuencias a largo plazo y el plan no fue el mejor. Tengo tantas cosas en la mente que...de verdad creí que nada iba a pasar. –Dije. El demonio se dio vuelta encarándome pero yo desvié la mirada a la mesa.